LAUREN POV
Estaba caliente, mentira, ya estaba hirviendo. Mi cuerpo estaba completamente incendiado por los toques descarados de Camila y las putadas que me susurraba al oído, aprovechando el momento de pánico de los hombres que compartían el mismo ascensor que nosotros.
Camila tenía una mano en mi pecho aprovechando la fina tela de mi camisa, la otra estaba en medio de mis piernas apretando mi centro completamente empapado. Estaba goteando, mis bragas estaban inutilizables.
Pero nuestro momento se truncó cuando volvió la luz, me alejé un poco de Camila y respiré hondo tratando de ocultar la lujuria que sentía. La dura latina detrás de mí todavía sostenía mi cintura, tenía un agarre tan caliente que me hizo cojear.
- Creo que está bien ahora. - Dijo uno de los hombres.
- No moriremos en un ascensor ... - dijo otro aliviado.
Mi cerebro se estrelló de nuevo cuando sentí a Camila moverse discretamente contra mi trasero, y me pasó la dura polla por todo mi culo. Mi coño palpitaba pidiéndole que se lo metiera profundamente, para satisfacer su necesidad de ese placer apoyado contra mi culo.
- ¿Lo sientes? - preguntó en voz baja, yo solo suspiré y asentí. - Ven aquí, siéntelo más de cerca. - dijo y levanté una ceja, esperando a ver qué iba a hacer.
Fue entonces cuando dejó caer una mano en mi cintura, subrepticiamente tomó mi mano y la volvió a colocar entre nuestros cuerpos. Mi mano fue a su miembro, pude sentir su firmeza y mi boca se hizo agua y mi coño estaba adolorido.
- Cuando se abra esa puerta te comeré en el primer lugar que encuentre, ¿me darás ese coño mojado? - suspiré sintiendo mis piernas temblorosas, confirmé respondiendo que daría todo lo que ella quisiera.
Si me pidiera que me comiera boca abajo así lo haría, lo único que me importaba era que me follara una y otra vez y me hiciera correr.
Retiré mi mano cuando el ascensor empezó a bajar y pronto se abrieron las puertas, todos se iban tranquilamente mientras los guardias de seguridad y técnicos del edificio se disculpaban y ofrecían agua. Camila tomó mi bolso y lo puso frente a su cuerpo para esconder la erección, nos fuimos y pronto Camila negó el agua que nos ofrecían y salió tirándome de la mano.
La primera habitación que encontramos entramos en ella, era muy pequeña y tenía algún equipo de sonido. Camila pasó la llave de la puerta y se volvió hacia mí con fuego en los ojos...
- Ahora eres toda mía. - dijo sonriendo sucia y jalándome hacia ella.
- Soy toda tuya. - dije todo suave y ella empezó a bajar y mordisquear mi cuello haciéndome temblar.
- Hagamos un rapidito, en casa lo haremos. - Dijo apretando mi trasero.
Ni siquiera tuve tiempo de responder, me atrajo para un beso caliente, su lengua atrevida exploró mi boca, haciéndome temblar y aún más excitada. Ella estaba abriendo mis pantalones y bajando mis bragas, pasó sus dedos entre los labios de mi coño, tuve que morder su lengua para no gemir.
- ¡Toda para mí, maldita Lauren! - habló gruñendo.
- Tengo una propina para ti, cómeme. - Provoqué rodando los dedos y controlando las ganas de gemir.
Camila me dio la vuelta haciéndome apoyarme en la pared y pincharle el culo por ella, entendió mi provocación porque en respuesta me golpeó fuerte el trasero y me hizo morderme el labio para no gritar.
- Ho bisogno che tu (Te necesito).- supliqué al escuchar el sonido de la cremallera de su pantalón abriéndose.
- Creo que es sexy que hables en italiano, pero no lo entiendo. - Camila pasó la cabeza de su miembro a lo largo de toda mi intimidad, haciéndome gemir.
- Dije que te necesito. - Gemí suavemente disfrutando de la deliciosa sensación de que me estaba frotando.
Me penetró lentamente, me abrí como me lo impuso. Cada centímetro asentado dentro de mí, palpitaba a su alrededor disfrutando del monumento de ella enterrado dentro de mí.
- Tan apretada... - murmuró apretando mi trasero y meneando.
Miré hacia atrás y pude ver la escena más emocionante que llenaba mi ego, Camila estaba hipnotizada mirando mi trasero con la boca ligeramente abierta. Cuando salió del trance me golpeó el trasero con fuerza y empezó a ir y venir abrazándome con fuerza.
Me muevo contra ella recibiéndola de la mejor manera, Camila tiene un agarre y un control, estoy tan emocionada que empiezo a gemir sin ningún control sobre mi cuerpo ...
- ¡Tranquila! Tus gemidos son muy sabrosos pero ¡cállate o nos atraparán! - Camila pide autoridad, lo que me emociona aún más.
- N ... no puedo ... me dejas ... fuera de control ... ¡oh mierda! - Hable gimiendo salvajemente.
- ¡Dios mio! - Camila gime y golpea más rápido.
Empiezo a sentir la sensación de calor y no quiero que se acabe, quiero que se pase horas follándome fuerte y rápido. Necesito sentir sus toques en mí, haciéndome perder el control y gemir como una puta.
- ¡Joder, me voy a venir! - anuncié sintiendo que mi vientre temblaba.
- Ven ... ven a mí ... ven. - Ella gobierna y yo dejo que suceda.
Siento el placer apoderarse de mi vientre, corriendo por mis piernas haciéndome temblar y liberando mi placer a lo largo de su polla que todavía me folla haciéndome rodar los ojos.
- ¡Mierda! - Gime y me golpea el culo.
En el siguiente segundo ya sentí chorros de semen liberarse dentro de mí, Camila palpitaba dejándome con ganas de más. Pero era muy peligroso para nosotras seguir haciendo esto aquí, quería mucho más solo por eso necesitábamos tener privacidad y un cien por ciento de certeza de que nadie nos va a obstaculizar.
- Eso estuvo muy bien. - Camila me abrazó fuerte y me besó el cuello.
- ¿Qué tal una segunda ronda en casa? - pregunté riendo.
- Hasta tres mi italiana caliente ... - Nos reímos.
Nos enderezamos como lo hicimos, le agradecí por tener toallitas en la bolsa. Logramos asearnos un poco para salir de allí al menos presentables, confieso que ahora más lúcido veo que tener sexo sin condón fue un error.
Pero está bien, soy un adulto y sé muy bien qué hacer para evitar futuras sorpresas. Y todo lo que tengo que hacer es tratar de controlarme en el momento de la lujuria y hacer que ella se ponga un condón primero, luego está bien, podemos disfrutar y follar sin preocupaciones.
Y sí querré repetirlo varias veces, si ella también quiere, claro ... no haré caramelos ni jugaré a la santa no, estoy soltera y ella también, nuestro sexo incluso muy rápido fue muy sabroso así que lo haré. No crearé tonterías en mi cabeza, solo lo disfrutaré.
Salimos de la sala mirando por todos lados y gracias a los dioses no había nadie alrededor, salimos de la convención bajo una fuerte lluvia. Dentro del uber Camila vino aferrándose a mí, intercambiamos besos y nos reímos cómplices en nuestra pequeña aventura.
ESTÁS LEYENDO
Living Proof Camren [Traducción]
FanfictionCamila Cabello acaba de sufrir una gran decepción en su vida, con la pérdida de la traición de su esposa. Avergonzada y disgustada por cada situación, se encuentra con el huracán llamado Lauren Jauregui. Italiana de sangre caliente, Lauren Jauregui...