Capitulo 16

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LAUREN POV

- Lo... ¿Qué camisa me pongo? - Me di la vuelta y vi a Camila parada con una camisa rosa claro y otra negra.

- Ponte la negra, combinará con mi vestido. - dije y ella tiró la otra camisa sobre la cama y se puso la que elegí.

- ¿Quedó bien? Preguntó cuando terminó de abrocharse la camisa.

- Estás linda. - le sonreí, quien regresó con una sonrisa tonta.

- Te ves genial. - Ella se acercó y me abrazó por detrás. - Después quiero sacarlo pedazo a pedazo y comerte muy despacito, extraño tu chocho.

- No lo hagas así... - dije sintiendo mi cuerpo temblar.

- Está bien, ¿estás lista? - preguntó ella besando mi hombro, asentí. - Entonces desayunemos. - Ella me sacó de la habitación.

Antes de que bajáramos las escaleras, Camila me soltó, acordamos que teníamos que mantener la descripción cerca de la gente. Fuimos al comedor y el desayuno ya estaba en la mesa y María terminó de arreglar todo.

- Buenos días chicas - deseó María sonriendo.

- ¡Muy buenos días María! - Camila abrazó y besó emocionada al mayor.

- Cuántas animaciones hay. - María sonrió y besó a Camila. - Lo siento Lauren, a veces olvido que no todo el mundo habla español. - María parecía un poco avergonzada.

- Está bien, María, hablo un poco de español. Mi abuelo paterno es español - hablé sentándome y viendo a las dos mujeres mirarme con sorpresa.

- ¡Así que está bien, ahora coman! - Dijo.

- No sabía que hablabas español con fluidez. - Camila habló tan pronto como María nos dejó solas.

- El padre de mi padre es español, me enseñó a hablar. - le expliqué, entregándole el plato de ensalada de frutas.

- ¿Entonces tienes ascendencia española? - Me miró sonriendo de reojo.

- No eres la única latina en esta mesa Camila. - bromeé guiñándole un ojo.

Nuestro desayuno estuvo lleno de frases de doble y triple sentido, pudimos sentir el aura sexual que corría entre nosotras. Fuimos al último día de la convención, en el uber aproveché la oportunidad para hablar con Ally y Zac y contestar mensajes de mi madre que me acababa de informar que había tomado prestado mi auto desde que el suyo y el de papá fueron blindados.

Pasamos todo el día entre conferencias y conversaciones con varios otros abogados, tomamos folletos de algunas propuestas para mejorar la calidad y dinámica de la empresa. Camila y yo estábamos muy emocionadas de mostrar estas propuestas a nuestros padres y contar con su respaldo para implementarlas.

La emoción fue tan grande que nuestra aura sexual se dejó a un lado y pasamos todo el día hablando de trabajo, al final del día estábamos en el uber y Camila estaba teniendo una conversación animada con su padre y yo estaba ocupada escuchando lo que decía. Y fue allí dentro del uber que mi corazón se hundió en el anhelo de mi pequeño, quería tenerlo aquí conmigo, apuesto a que a mi niño le encantaría ir a la playa.

- Mamá te extraño mucho, voy con la abuela a recogerte. - Mi pequeño sonrió, tenía las mejillas rojas y la punta de la nariz por el frío de Nueva York.

- Yo también te echo de menos amor. - Sonrisa.

- Hasta mañana mamá, ahora voy a cenar. - Sonrió y besó la pantalla del celular.

- Hasta mañana mi amor. - Envié un beso y terminé la llamada.

Mientras Camila seguía hablando con su padre, notó que yo ya había terminado la videollamada con Yudi, puso su cuerpo encima de mí y jugué con mis dedos.

Living Proof Camren [Traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora