SCRAWLS

iridiscente

Resumen: El abuelo de Beca le dice que Chloe es Iridiscente.

Iridiscente: Que muestra o refleja los colores del iris.

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Cuando Beca Mitchell se muda al pequeño pueblo de Norcross en Georgia, no puede estar más que enojada por alejarse de sus amigos de la escuela y del vecindario. Pero todo empeora en el momento en que Chloe Beale se cruza en su camino. Ella está ayudando a su padre a descargar el camión de mudanza, llevando las cajas menos pesadas y que una pequeña niña de diez años pueda cargar sin dificultad, cuando un par de ojos azules, tan claros como el cristal, se tropiezan con los suyos.

Hay mechones cobrizos enmarcando su rostro y una sonrisa que podría romperle la cara de lo grande que es, junto a una mano extendida. Pero Beca no contesta y de un manotazo aleja la mano para agacharse y recoger la caja que dejó caer por el susto que la niña desconocida le dio.

Sin embargo, la pelirroja no se rinde y empieza a parlotear sin parar, como si a Beca le importara conocer su nombre. No lleva ni veinte minutos en su nueva casa y ya se siente irritada por tener que soportar a su vecina de enfrente que no parece entender cuando no es querida en un lugar.

Siente que puede suspirar feliz, cinco tortuosos minutos después, cuando la madre de Chloe la llama de regreso, y Beca continúa con su labor.

Claro que ella no nota el suspiro anhelante de la pequeña niña de rizos rojos, porque a Beca no le interesa para nada conocerla. Porque mientras para Beca fue el principio de más de media década de estrategias de evasión e incomodidad social, para Chloe fue amor a primera vista.

Y, por supuesto, tuvo que imaginarse que, en un pueblo tan pequeño, ella tendría que asistir a la misma escuela a la que Chloe iba.

-Beca, estás aquí - había gritado Chloe y corrido a sus brazos.

Definitivamente la escuela no sería un santuario y Beca pasa todo el año tratando de esquivar a la niña que parece ser la personificación del sol por lo brillante que suele estar todo el tiempo, aunque luego regresa en sus pensamientos y se da un golpe por considerar a Chloe como un brillante sol. Eso es tan cursi.

A ese año desastroso le siguen otros cuatro más, y Beca no sabe qué hacer para que Chloe la deje en paz porque la pelirroja no parece entender ninguna indirecta.

-Te lo digo, B - le dice Bumper mientras masca su chicle. Beca realmente no sabe cómo ha llegado a ser amiga del chico, pero suele tener sus momentos agradables-. Chloe la rarita no se alejará de ti a menos que salgas con alguien y se lo dejes en claro.

Algo se remueve en su interior al escucharlo referirse a la pelirroja de esa manera, pero lo deja pasar, como ha hecho siempre. Porque a Beca Mitchell no le importa Chloe Beale.

Ella ya había empleado esa táctica hace tres años, usando a Jesse, pero no funcionó porque el chico es más un amigo que cualquier otra cosa y ambos decidieron que se sentía extraño tomarse de las manos y aparentar hacer cosas de pareja. Luego Beca descubrió que es gay, y se lo contó, lo que explicaba su constante rechazo a los chicos y los convirtió en lesbros.

(Beca le repetiría a Jesse que dejara de usar esa palabra, pero él no le haría caso y se presentaría siempre como su lesbro con algún nuevo conocido)

-No creo que eso funcione - responde Beca soltando un suspiro y dejándose caer contra el césped del parque de skate y colocando su patineta sobre su estómago-, ya lo intenté ¿lo olvidas?

-Eso no cuenta, usaste a Jesse - responde-, además ahora que todos en la escuela saben que eres gay es más probable que haya llegado a sus oídos y este tramando algo para atraparte.