Capítulo 11

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El amor, más que un sentimiento es una decisión, decidimos con quién estar y con quién no. Con nuestras acciones y forma de actuar.

Si tomamos la decisión de callar el sentimiento y no decir nada, pues le decimos que no y si luchamos decidimos que sí.

Estoy un poco mal por mis sentimientos por Richard, lo quiero y aveces pienso que es muy evidente, otras veces no. Pero obviamente no me declararé y le diré lo que siento, obviamente que no.

Mi cara de vergüenza, yo pensando en el rechazo y el hazme reír del instituto no lo creo. Quizás a unas cuentas chicas le gusta porque toca y eso, tal vez algunos rasgos físicos. A mí me realidad, me encanta todo de Richard su risa, su mirada, su forma de actuar con los demás,  la pasión y dedicación que le da a las cosas y me da mucha risa cuando intenta imitar un chico malo.

Él es muy muro y bueno, tal vez demasiado o porque lo Queiro no veo bien y me estoy equivocando, si es así denle un premio porque no veo nada defectuoso aquí. Solo que... No se me a declarado y no sé si le gusto, porque el comparte con muchas personas y no sé si con la misma forma que me trata, lo hace con todo el mundo o solo a mí.

Se que su mejor amigo Erick, estoy casi segura que sabe de mis sentimientos por su amigo y se burla de mi por eso o puede ser que soy muy dramática.

Me dolió bastante verlo con otra riéndose y estuve esperando como una estúpida, siento como si me engañó y la verdad sé, que no tenemos nada, entonces, ¿por qué duele tanto?

Ese mismo día decidí evitarlo y ni quería hablar con él, algunos de mi compañeros me dijeron que me buscaba, pero lo ignore, estaba ofendida y me dolía joder mucho.

Tampoco puedo negar, que sentí celos, un poco, bueno mucho si le admito. Ella estaba tan cerca de él, riéndose demasiado cerca para mí gusto y se le veía muy agusta.

Yo podía estar hablando con él de un tema en general, pero algo cerca de mis sentimientos me pongo tensa aunque sea una broma y eso. Pero cuando me abrazaba o teníamos más contacto, ya saben su cercanía y me toma por sorpresa, me pongo como un tomate.

Decidí irme sin verle o hablar con él, porque iba actuar por mis emociones y eso no valdría la pena. No somos nada y no puedo reclamarle, le oculto mis sentimientos que siento hacia él y eso, más mis emociones y lo que me hace sentir.

¿Y si solo me quiere como una amiga? ¿O una hermana? Y digo eso, no podría con la vergüenza, al menos lo puedo ver y hablar con él.

Me fui directamente hacia mi hogar, me puse hacer algo de comer luego una hora después me trajeron a Mónica su primo. Vladimir y neomy son como un poco abusadores, porque estos últimos días él, la trae y la viene a buscar, tendré que hablar con ellos.

No tenía muchos ánimos y estaba molesta, con Richard, con la estúpida chica y conmigo. Cuando llegaron ya había comido y estaba viendo una película de esas que el hombre son estúpidos y dejan pasar su gran oportunidad en la vida, pero luego logran verlo y la buscan.

Con un tarrito de helado y papitas, porque para tarro de helado grande,no hay dinero. Estaba en pijama prácticamente al menos tenía braciel puesto y ropa decente, pero obte ponerme algo más decente ya saben por el chico y eso.

Me puse un pantalón holgado y una blusa por igual, ambos me miraron raro. Mónica me brinco arriba y me abrazo fuertemente, de esos que si te descuidas te mueres por falta de aire.

-  ¡Amada! - Me dice con alegría. A mejorado su léxico, pero mi nombre no lo dice del todo bien y completo.

Y pensar que mi nombre Amanda, debería ser ¿más no se amada? Ese nombre fue como una maldición para mí.

La Mala Suerte de AmandaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora