Just one more time

8 0 0
                                    

Aviso esta historia es lgbttqia+ si te desagradan o te molestas estas cosas raja de acá, gracias.

5 años de jardín, 4 de primaria, 3 de secundaria, 5 de preparatoria y finalmente he llegado a mi graduación...

La vida de una adolecente no es fácil, y creo que la mía no ha sido la peor ni la mejor.
Crecí con padres estrictos y extremadamente religiosos, por lo que siempre fui educada de una manera que no era para mí; vestirme con vestidos, cabello largo, jugar con muñecas, ser sumisa y que mi más grande objetivo fuera conseguir un hombre que me mantenga y al que atender. Nunca quise eso para mí vida, y por eso fui una decepción para ellos.

Salir del clóset con ellos fue más que horrible, me echaron de casa, y aún no me hablan. Ni siquiera se si vendrán hoy a mi graduación.
Me fui a vivir con mi hermana mayor, quien me aceptó muy orgullosa. Hasta el día de hoy, me apoya y me ha ayudado en todo, claro, yo he colaborado con las facturas del hogar.
Ella es lo único que me mantiene cuerda, además de claro, Ivy.

Ivy, es mi... novia. Nuestra historia es un poco larga, pero en lo que a mi me concierne, fue una de las mejores cosas que me ha pasado.

Todo esto comenzó hace dos año, ya todos sabían que yo era lesbiana y me aceptaron muy bien, muy diferente a lo que yo pensé.
Caminaba tranquilamente por los pasillos cuando vi a Ivy en el salón de música, sola, llorando.
Ivy era la típica chica rubia, bonita, capitana del equipo de animadoras y novia de uno de los jugadores de fútbol americano, esa es la razón por la que nunca nos hablamos hasta esa vez...

Entré cuidadosamente en el salón hasta llegar a donde ella estaba sentada, me agaché para mirarla y en ese momento ella se percató de mi presencia.

-¿Qué haces aquí? - preguntó amablemente secándose las lágrimas con su mano.

-Te vi llorando y quería saber si estabas bien, pero veo que no. Puedes contarme lo que sea, claro si quieres.

-Da igual, seguramente te enterarás en algún momento. Ni siquiera se aseguraron de que fuera secreto. - dijo mirando con resentimiento a la pared.

-¿Qué paso?

-¿Sabes quién es Cameron?

-Claro, es el Quarterback del equipo de la escuela, además de el chico popular y por lo que se... - hice una pausa antes de decir que era su novio.

-Mi novio. Bueno ex-novio ahora. Tanto le importaba nuestra relación que fue a cogerse a mi supuesta mejor amiga. - empezó a sollozar luego de decir eso.
-Eramos la pareja perfecta, ¿Por qué me hizo eso?

-Tal vez, tu eras demasiado para él. Tu eras mucho y el era nada, si tu fueras nada y el fuera mucho habría funcionado, o si ambos fueran nada, pero tu eras mucho y el es nada. - me miró sonriendo débilmente y se rió - no derrames lágrimas por alguien que no vale la pena.

-Tienes razón - se secó las lágrimas y se levantó de la silla - no debe ni debería importarme. Emily, ¿verdad? - verla parada así, me gustaba, se veía bonita aun despeinada. Me extendió la mano para levantarme y yo acepté.

De ahí en más nos volvimos mejores amigas. Ella me ayudó a entrar al club de drama, algo que siempre había querido pero no había hecho por pena. Me impulsó a probarme y me ayudó a ensayar.

Yo le eché una mano al practicar sus coreografías, también digamos que era su "co -capitana" por más de que no fuera animadora.
También la ayudé con ciencias, ella era muy mala, de hecho recuerdo la vez que casi explotamos el laboratorio de la escuela.

-Bien, ahora tienes que echar esto verde, esto violeta conseguirás una mezcla azul y... - ya era tarde Ivy ya había puesto cualquier cosa y la mezcla ya burbujeaba. - Salgamos antes de que explote, corre.
Salimos corriendo fuera del laboratorio pero nos quedamos detrás de la puerta mirando desde el cristal que pasaba con la cosa esa. Y sí, explotó y quemó la isla donde estábamos. Tuvimos serios problemas luego de eso, pero por lo menos estuvimos juntas en nuestro castigo.

Y pues en ese, ocurrió nuestro primer beso.

Estábamos limpiando las aulas del colegio, habíamos acordado que ella limpiara una mitad y yo otra, al terminar, nos sentamos en la entrada y empezamos a hablar de cualquier cosa, hasta que ella sacó el tema de mi sexualidad.

- Y... ¿cómo descubriste que eras... ya sabes?

-¿Lesbiana? Bueno creo que siempre lo supe, solo no quería admitirlo.

-Pero, cuando fue el momento en que, te diste cuenta.

-Mi primer amor, se llamaba Sofía. Teníamos 14 años, ella era un sol era amable con todos y era muy linda de verdad. Y me di cuenta de que no solo quería que fuera mi amiga, queria que estuviéramos juntas, nos tomáramos de las manos -solté una risa- además nunca sentí nada más por los hombres que amistad o algo así.

- ¿Qué pasaría si, yo sintiera por alguien lo que tú sientias por Sofía? - estaba nerviosa, miraba abajo y movía su pierna constantemente arriba y abajo.

-Puedes decírmelo, estaré para escuchar...- me interrumpió con un beso, me tomó de la mejilla y unió nuestros labios. Fue una de las mejores sensaciones y jamás había sentido eso por nadie, ni siquiera por Sofía. Segui el beso hasta que nos quedamos sin aire.

-Ya entiendo - dije y sonreí.

Desde ahí en más nos hicimos pareja, y seguimos siéndolo, todos aceptaron nuestra relación, incluso sus padres.

Ahora estamos aquí en nuestra graduación, me gradué como la mejor estudiante y me tocaba dar un discurso. Todavía no se que decir, no lo he planeado pero quiero que sea espontáneo. Y ella está ahí mirándome con orgullo...

-Bueno, bienvenidos todos, espero que estén bien.
Este año, y los otros, no fueron fáciles, pasamos por mucho estos años. Pero hoy estamos aquí para agradecer a nuestros profesores, a nuestros compañeros y a todos los que son y fueron parte de esta institución, nos acompañaron desde el principio y hoy están aquí, en el final.
No me gusta decir que hay un final, si no, un nuevo  comienzo. A partir de hoy comienza nuestra vida como adultos maduros, creo, no lo sé. Solo quiero decir que agradezco a todas las personas que estuvieron allí para mí, y ustedes deberían agradecer a las personas que estuvieron ahí para ustedes. - empezaron a mirarse unos a otros y a abrazarse - aquí termina esto, aqui termina nuestra travesía, aquí terminan nuestros recuerdos de la preparatoria. Pero no todo tiene que terminar, podemos quedarnos con nuestros amigos, con nuestras parejas - miré a Ivy - disfruten estos años que nos quedan para aprender, aunque, en realidad nunca terminamos de aprender. Gracias y felicidades.

Luego de mi discurso me entregaron mi diploma, me senté junto a Ivy quien me tomó la mano. Luego se levantó ella y le entregaron el suyo. Así con todos.

Pasamos nuestro verano juntas hasta que llegó el momento de despedirnos, por un largo tiempo.

-Bien creo que eso fue todo - dije cerrando la maleta donde ella estaba sentada ayudándome a cerrarla.

-¿Estas segura? ¿Llevas shampo? ¿Ropa dr invierno? ¿Al señor Warrington? - dijo tomando el peluche que estaba en mi estantería.

-Ohh, casi lo olvidaba, gracias.

-Creo que este es el adiós- dijo triste ella.

-Claro que no, es un hasta luego.

- Si tu dices... - y se me acerco y nos besamos como la primera vez, no quería que parara. Quería que todo se detuviera en ese momento pero tendría que dejarla.

- Se que en algún momento nos volveremos a ver. Lo prometo.

- Yo también lo prometo.

Y sin saber que esa promesa se cumpliría 4 años más tarde en un aeropuerto, las dos chicas se despidieron llevándose con ellas un recuerdo hermoso.

Corta, pero cool.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 28, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

historias random que escribo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora