Pasión Prohibida

Capítulo 8

         Jennie preparo algunas cosas, paso por el laboratorio de ciencias y saco una rata, la guardo en su bolsillo siguió su camino hacia la puerta y corrió hacia el bosque en busca de su amigo emplumado. Al llegar le dio de desayunar y comenzó a entrenarlo para que comience a volar. Alrededor de una hora decidió volver al internado eran alrededor de las 6 A.M así que llego a la habitación se sacó sus zapatillas, su pantalón y remera mangas largas.

          Se dirigió hacia la cama de Lisa se acostó y la abrazo de atrás, comenzó a besar su cuello hasta lograr a Lisa que dormía profundamente.

-Jen… dónde estabas? – Pregunto. Lisa se puso sobre ella, siguió besando su cuello y ella comenzó a reír.

- Shhh… Quieres que Rosie se despierte? – Comenzaron a reír juntas.

          Lo que no sabían es que Rose nunca se durmió solo cerraba sus ojos esperando que el sueño llegue a ella.

          De la nada Lisa tomo la delantera y Jennie quedo bajo de ella, comenzó besarla y masajear sus pechos ya que estaban expuestos por lo que no tenía sujetador así que cuando se sacó su remera que solo en ropa interior baja. Lisa al estar sobre ella saco la parte de arriba de su pijama que consistía en una remera gigante, quedo solo en short.

          Lisa abre las piernas de Jennie le quita la única prenda que le quedaba en un movimiento brusco, comenzó subiendo por su pierna derecha con la punta de su lengua llega a su entre pierna. Baja nuevamente y repite lo mismo con mi pierna izquierda. Besa sus labios vaginales y su monte de venus, Jennie no habla, ni mucho menos respira. En su mente solo está el deseo que Lisa la hiciera suya las veces que quisiera, en este momento está sobreexcitada y demasiado húmeda.

        Lisa en un momento desprevenido comienza a succionar ferozmente su clítoris. Se estremece y por reflejo intentó cerrar las piernas, pero los brazos de Lisa se lo impiden.

        Ella continuó lamiendo y chupando su intimidad, lo hace de una manera tan feroz que a Jennie se le hacía algo imposible guardar sus gemidos y oraciones incoherentes salen su boca. Su forma, su ritmo, la presión que ejerce, todo es perfecto, pone atención a lugares claves para llevarla a la locura. En un momento suelta una de las piernas de Jennie y comienza a ingresar su dedo aunlar a su entrada, su dedo entraba y sali en movimiento lentos. Mientras continúa jugando con su lengua y el clítoris de Jennie, succionando sus labios y penetrándola con su lengua. Puede sentir perfectamente sus labios carnosos presionando su clítoris. Ingreso un segundo dedo a la acción, encada enbestida lo hacia de manera circular que la hacian caer a la locura y aumentando la velicidad a sus penetraciones, Jennie arqueaba su espalda y se agarraba de las sabanas al sentir las mil sensaciones que Lisa la hacia sentir. Luego de un rato llego al clímax y largando un fuerte gemido.

-Estas bien? –  Le pregunto Lisa a Jennie

- Si. – Dijo mientras volvía a juntar sus labios en un beso lento. - Es mi turno. – Dijo mientras se dibujaba una sonrisa en su rostro y comenzaba a devorar su cuello.

          Jennie se deslizo hacia abajo haciendo un camino de besos y comenzaron a besarse ferozmente y frotar sus cuerpos, se tocaban mutuamente su intimidad, siente su intimidad muy caliente y húmeda, le introduzco un dedo y al sacarlo está totalmente envuelto en sus fluidos lleva su dedo y lo introduce en su boca, se sonríe mirándola haciéndole saber que le encanta su sabor.

         La castaña se incorpora se da vuelta y quedan opuestas, Jennie y Lisa elevan sus caderas y pasa una de sus piernas por debajo de Jennie, se acerca y sus intimidades hacen contacto, sienten la sensación más hermosa, sus sexos están notablemente a mayor temperatura. Comienzan a moverse un poco más rápido frotando sus sexos, sus fluidos comienzan a salir y a lubricar toda la zona. Lisa gime y su respiración se torna más acelerada y fuerte, Jennie se dejo llevar por el frenesí y al igual que ella comenzó a gemir ya los fluidos inundaron toda la zona y se escucha claramente el segundo orgasmo de Jennie y el primero de Lisa.

          Jennie acostó a Lisa, la abrió de piernas y comenzó a pasar su lengua por cada rincón de su intimidad, saboreo cada lugar no se cansaba era el sabor favorito para Jennie, comenzó a dar pequeñas mordidas, con su lengua comenzó a penetrar su entrada con su dedo pulgar a frotar su punto G. Lisa estaba perdida en el placer que le daba Jennie, gemido tras gemidos salían de ella, con sus manos agarraba el cabello de la castaña y la empujaba levemente para sentirla aún más, Jennie dio unas envestidas mas con su lengua y aumento la velocidad en el frote que hacía con su dedo y sabía que estaba cerca del segundo orgasmo de Lisa, así fue la limpio con su lengua, se acomodaron en la cama y durmieron abrazadas como cada noche

Narra Rose:

             No sé si sabían que podía oírlas o hacían como si no estuviera, pero a medida que pasa el tiempo estaba bien, sus sombras, sus susurros, sus gemidos. Se volvieron parte de mí y de mis sueños, las cosas eran como eran, ellas amándose y yo amándome a mí misma.
          Escuchando sus gemidos fue que les di la espalda y cerré mis ojos para poder conciliar el sueño.