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Estoy nervioso. Muy nervioso. Me miro en el espejo, y suspiro. Llevo unos vaqueros oscuros, una camisa blanca simple y una americana granate que compramos juntos, ella y yo. Es mi favorita. Me doy el último vistazo en el espejo, y cogiendo mi móvil de la mesilla de noche, salgo de mi habitación.

Me dirijo al garaje, a coger mi coche y salir hacia casa de Jack, donde recogeré a mi amigo y a Jackie. Hace bastante tiempo que no veo a la pelirroja, y sé que va a ser raro, pues sigue siendo la mejor amiga de Isabelle. Por lo menos, tengo la certeza de que no quiere matarme por haberla hecho daño, porque si no, no hubiese dicho eso sobre que Isabelle tiene miedo de volver a verme y darse cuenta de que aún me quiere. Y mucho menos hubiese intervenido para que yo fuese a la fiesta. Pero lo ha hecho, y eso es una muy buena señal. Supongo que tampoco tendría razones para querer matarme, ya que yo no le rompí al corazón a Isabelle. Al menos, no a propósito. Cuando cortamos, fue por mutuo acuerdo. O algo así. Y nadie ha acabado peor que yo, eso es seguro.

-Hola, tío.-saluda Jack entrando al coche.

-Hola, Alexander.-Jaqueline entra justo después de Jack y me da una sonrisa enigmática desde los asientos de atrás. Yo me giro a mirar a ambos y les sonrío lo más confiado que puedo.

-Hola.-me quedo callado un instante, sin saber bien qué decir. Al final, me decido a darle las gracias a la pelirroja.-Oye, Jackie… Muchas gracias. Por haber hecho que pueda ir a la fiesta.

Ella me mira, esta vez con una sonrisa sincera, y me dice:

-No hay de qué. Conozco a Isabelle. Sé que quiere tenerte ahí. Y sé que tú quieres ir más que nada en este mundo.

Jack rodea a su novia por los hombros y le da un beso en el pelo. Sonrío agradecido y vuelvo a girarme, dispuesto a conducir hacia la fiesta. Por el retrovisor, veo como la pareja no para de darse mimos. No sé si vomitar de lo cursis que son, llorar por los recuerdos que me traen o reírme de lo ridículo que me parece todo desde fuera.

Al cabo de unos diez minutos, llegamos al local donde se celebra la fiesta. Mis nervios son cada vez mayores y tengo que tragar saliva antes de poder salir del coche. Es la primera vez que voy a verla en persona después de 5 meses de verla sólo en mis sueños.

Me quedo algo rezagado detrás de Jack y Jackie, dejando que entren ellos primero en el local. Al segundo, y tras respirar hondo, entro yo.  Mi cerebro es un cúmulo de pensamientos que no sirven para nada más que para hacer que me ponga el triple de nervioso:

“Tranquilo, Alexander.”

“Todo va a salir bien.”

“Calma.”

“Tú puedes.”

“Oh. Allí está.”

Y mi corazón se para. Porque la estoy viendo, y está preciosa. Como siempre, pero como nunca. Lleva un mono negro, con un escote en V que le sienta increíble, unos tacones morados oscuros y el pelo liso, brillante y suelto. Me quedo sonriendo, seguramente como un idiota y paro de andar, incapaz de moverme más, porque las piernas me fallan. Isabelle parece sorprendida de verme, pero definitivamente no disgustada, y eso me alivia de algún modo. Veo que empieza a andar hacia mí, y sonrío más ampliamente. Sin embargo, algo hace que la sonrisa se borre de mi rostro. Porque justo detrás de ella, está Joel Courtney. Su novio. Mi pesadilla.

A/N: ¡IMPORTANTE! Es algo corto, pero quería subirlo :) Chan, chan, chaaaan. Alexander está en la misma situación que Isabelle cuando él trajo a Nicole a la fiesta. A ver qué pasa ;). ¡Muchas gracias lectoras por votar y comentar, sois geniaaaales! Os quiero aclarar que seguramente subiré capítulo una vez por semana cualquier día, según vaya escribiendo. Me gustaría conoceros más, ¿cómo os llamáis? Yo me llamo Irene, pero podéis llamarme Berry :3. ¡Hasta el próximo capítulo! Xx

The way I loved you.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora