La Emperatriz

Capítulo 28

Final parte 2…

Katya ya estaba entrando en el sexto mes de su embarazo cuando los acuerdos con doña Inessa habían por fin terminado.

Lena sería nombrada como la nueva emperatriz del imperio de Rusia y su madre a cambio de no ser encarcelada había tenido que firmar un sinfín de acuerdos de no intervención, todo esto a espaldas de su hija puesto que Inessa siempre pedía no perder su buena imagen ante Lena.

Se había decidido también que la capital volvería a ser en Saint Petersburgo y que Yulia y Nicolay debían trasladarse allí y verificar que se cumplan los acuerdos pautados y seguir en sus puestos dentro del imperio.

Y- ¡Ustedes siempre han sido como la familia que no tuve y sin duda alguna me harán mucha falta, sobretodo tú Katya que eres como mi hermana!

K- Siempre podrás venir a visitarnos cuando quieras eh, no te despidas así que me pones sensible. Además también podremos ir a verte a Saint Petersburgo.

Iv- Por favor Yulia cuídate mucho

D- Me encantaría ir contigo, pero siento que debo recuperar el tiempo perdido aquí con mi familia, ¡pero eso sí, no dudes en que te apoyaré si me necesitas!

Y- De verdad gracias por todo, los llevaré en mi corazón siempre…

Luego de despedirse de los Dorosh, Yulia llegó al puerto en donde la esperaba ya Nicolay con dos escoltas y partieron rumbo a la capital del imperio…

La coronación de Lena como nueva emperatriz había sido bastante sencilla y con sólo algunos miembros de la nobleza y sacerdotes como invitados.

Lena no había querido realizar una gran ceremonia ni nada extravagante, había discutido con su madre por no querer realizar una gran fiesta donde en sus propias palabras dijo: “sólo asiste gente supuestamente importante y de clase alta y se desperdicia dinero y recursos que pueden utilizarse en ayudar a los habitantes de la villa que lo necesitan más que los que ya son ricos”.

Tampoco había querido hacer ningún cambio entre los funcionarios de cada ciudad pues consideraba que realizaban bien sus funciones hasta ese momento, al igual que los nombramientos reales de los cuales dijo que tiempo después de dar a luz a su hijo, haría los que hicieren falta…

Lena se preparaba para salir cuando fue abordada por su madre que evidentemente estaba en desacuerdo con lo que ella quería hacer.

I- Sigo pensando en que no es buena idea que andes por la villa exponiéndote de esa manera Elena

L- ¡Madre es una actividad que he realizado desde pequeña y no ahora por ser la emperatriz voy a dejar de hacerlo!

I- ¡Pero estás embarazada! Ya no puedes pensar solo en ti… Puedes enviar a los sirvientes a repartir las dichosas canastas de comida en tu nombre sin necesidad de que vayas personalmente.

L- ¡Tú misma lo has dicho, estoy embarazada no estoy ni impedida ni enferma! ¡Puedo hacerlo, me gusta hacerlo y lo haré!

Luego de esa pequeña discusión, como era costumbre de Lena se dirigió a la villa con algunos sirvientes y escoltas en sus carruajes llenos con las canastas de comida que repartía siempre a los habitantes.

Yulia y Nicolay habían llegado a Saint Petersburgo, iban en los carruajes que los llevarían al palacio de Yulia.
Cuando pasaron por la plaza central pudieron ver una gran cantidad de personas reunidas allí.

Y- ¡Detenga el carruaje por favor!

-Como ordene primer ministra-

N- ¿Qué pasa señorita Volkova?