Adrien:
El día en el que escapé con Jane de esos criminales fue el peor de todos, no pude salvar a Peter y Mari quedó devastada, esos vídeos la dejaron en un Shock paralítico.
Alya dijo que podía cuidar de Jane durante el coma de Mari pero Louis era otro caso, un familiar debía estar a cuidados de él por ser una cuestión familiar, servicios sociales trataron de llevarse a Louis a la fuerza, pero Alya reveló algo que hasta a mi me dejó con la boca abierta.
–Adrien se quedará con la custodia temporal de Louis porque es su padre.– Le dijo Alya firme a la señora de S.S.
–Alya yo no puedo hacer esto, es ilegal– Le susurré.
–Oh Agreste eres un ciego– Reprochó Alya pero no la entendí.
–Bien, necesitaré análisis de ADN para comprobar lo que me dice–
–Espere aquí, Agreste, sigueme – Dijo en voz mandona pero no objete.–Nos hubiéramos ahorrado todo si Marinette te lo hubiera dicho hace tiempo –
–¿Decirme que? No entiendo– Cuestioné.
Todo ya estaba siendo molesto.
Entramos al cuarto de Mari y Alya rebuscó entre algunos cajones, hasta sacó un sobre, lo abrió y me lo entregó–Toma, solo no reacciones mal.–
Lo leí con miedo, no sabía que era tan importante como para que Alya actúe así, hasta que lo leo.....
“Análisis de paternidad o ADN:
El señor Adrien San Anastasio Agreste tiene:99,9% de probabilidad de ser el padre biológico de Juan Louis Dupain-Cheng.”
No reacciono, no hablo, ni me muevo. No se como responder ante toda la información.....
¿Como pude ser tan idiota? Era obvio que yo sea el padre de Louis, ella dijo que se fue embarazada de aquí y que lo descubrió allá.... ¡Louis y yo somos prácticamente idénticos!
–¿Todo el tiempo lo supieron? Lo supieron todo el tiempo y me lo ocultaron– Estaba molesto.
–No me vengas con eso ahora Agreste, recuerda el motivo de su partida, ella se fue porque cierto rubio oxigenado con el ego más grande que pueda existir, jugó con ella la noche de graduación. –
–¡LOUIS ES MI HIJO!¡No tenían el derecho a ocultarlo! Pude haber estado con mi hijo, lo pude haber criado, verlo crecer.... Es mi hijo.....– Mis piernas ya no las sentía, las manos me temblaban y sentía unas ganas tremendas de llorar.
Escuchamos unos sollozos tras nosotros, volteamos y vimos a Louis llorando.
–¿Es cierto? ¿Tu eres mi papá? – Sus ojitos estaban cubierto con lágrimas y en su rostro había un puchero molesto–¡¿ Porque nos dejaste?! ¡Ella te necesitó, ella llovió por tu culpa muchas veces al llegar aquí cuando me prometió no llover más! ¡Ella tuvo que luchar como nunca para mantenernos a mi y a ella para no pedir ayuda al tío Cheng! ¡Había veces en la ella no podía jugar conmigo porque tenia que estudiar para seguir con las deudas y yo jugaba en silencio para no molestarla! ¡¿ Y tú donde estabas?! ¡Dijo que eras rico!¡ Mientras que tu vivías nosotros sobreviviamos o al menos lo intentábamos! ¡¡¡TU NO ERES MI PADRE, TE ODIO!!! ¡Peter fue mejor padre de lo que tu nunca serás! – Dicho eso se fue corriendo y se oyó un portaso de su habitación.
Yo estaba en Shock, tan solo era un niño de 5 años, pero entendía todo a la perfección.
Sus palabras encerio me tocaron, es cierto, nunca estuve para ellos en verdad y eso me hace sentir peor, ellos me necesitaban y yo no estuve.
Alya me dio unos minutos de privacidad en lo que le mostraba la prueba de paternidad a la señora de S.S.
Me dispuse a recorrer el cuarto de Mari, observe las fotos de nosotros de jóvenes y algunas de Louis.
Mi vista se centró en una foto de Mari cargando a Louis en una camilla de hospital.
«El día en el que Louis nació »Pensé.
La tomé con cuidado y me senté en su diván.
No pude evitar soltar un par de lágrimas, siempre me dije a mi mismo que cuando tuviera un hijo lo cuidaría y le daría el amor que mi padre no me dio a mi. No cumplí esa promesa.
–Louis....perdoname – Susurré para mi.
Continuará.....
Es historia está por terminar gente, unos capítulos y damos por concluida con este fic.
Si, es un poco corto la historia por falta de material y eso.
Pero bueno, nos leemos luego.
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Mi Pequeño Louis: El Tesoro De Marinette[Terminada]
Fiksi PenggemarCuidado con tus caprichos con las mujeres, ya que un capricho terminó en un embarazo no deseado. La noche de la graduación una joven azabache lloraba en uno de los vacíos salones de aquella preparatoria, pues se había enterado que su amor platónico...