🌧️Vampire Knight: La niña en el olvido🌧️ (EN CORRECCION)

-CHAPTER 13-

El viaje de regreso se volvió eterno, la vida de Oyuki pendía de un hilo y no importaba cuánto avanzará ni a qué velocidad, Yagari sentía que el auto no se movía ni un metro. Cuando vio la clínica a lo lejos por poco grita de alivio.

En menos de dos segundos, la bajaron de la camioneta y la llevaron con el médico. Nuevamente, en cuestión de segundos ya la habían preparado e iría a cirugía, debían extraer las balas o nunca sanaría. El médico había tenido que obligar a Kaito a quedarse sentado en la sala de espera junto con los demás.

Algunas horas más tarde, finalmente salió y la llevaron a una habitación. El médico llamó al tutor de la jovencita y a todo familiar o amigo que tuviera allí.

- La niña logró reponerse de las heridas y ya comienzan a sanar un poco más rápido- informó el médico- Logramos extraer las 4 balas que tenía en su interior, tenía dos en el muslo derecho, una en el estómago y la última a centímetros del corazón- Los tres hombres quedaron pálidos ante esa información, podría haber muerto- Afortunadamente, es muy fuerte y está bien alimentada, por lo que no creo que haya complicaciones, si sigue bebiendo sangre como hasta ahora, es muy probable que se recupere en poco más de una semana- el hombre anciano les dió una sonrisa a los cazadores- solo deben tener cuidado de que no se vayan a infectar las heridas y todo estará bien, en cuanto despierte le haremos algunos análisis y la enviaremos a casa-

Yagari- muchas gracias, mantenganos al tanto de todo, por favor- dijo ya más tranquilo- ¿Podemos verla?- el anciano asintió

Oyuki descansaba en el cuarto, siendo observada por los cazadores que la cuidaban. Esperaban que todo saliera bien y pronto llevarla a casa.

Zero- ¿No hay otro tipo de camuflaje que pueda usar?- su mirada estaba fija en el rostro de la albina, ansioso por el momento de verla despertar

Kaito- Por lo que sabemos, solo han logrado hacerlos funcionar poniéndolos en las manos- respondió sin voltear a verlo, él también estaba observando a la chica fijamente

Yagari- Conozco a alguien que puede ayudarnos, pero eso lo veremos una vez que la llevemos a casa- suspiró aliviado cruzándose de brazos

A la mañana siguiente, Oyuki fue enviada a casa. Yagari recibió una lista de cuidados para la joven, fue difícil obligarla a quedarse en cama sin levantarse, pero trabajando los tres juntos lograron hacerlo.

Kaito había dado la idea de enyesarla y encadenarla a la cama, cosa que Yagari rechazó. Zero dijo que podían romperle las rodillas y atarla en el sótano. Y así, fue como Yagari se dio cuenta de la pésima salud mental de sus alumnos tenían y pronto tendría que pagarles las terapias.

Oyuki terminó durmiendo con Kaito durante las noches, el recuerdo de esa noche le causaba pesadillas con lo que podría haberle pasado. Le daban de comer, al menos, cinco veces por día. Tal como dijo el médico, en una semana ya estaba casi lista para retomar las clases. Tenían que mantenerla fuerte y lista para todo, con los cazadores acechando no podían darse el semejante lujo de descuidarla o restringir su alimentación.

La dejaron volver a la escuela con una condición, Kaito los llevaría y luego los acompañaría de regreso. Tuvieron que tomar muchas precauciones debido a que los cazadores que intentaron matarla, seguían rondando por la ciudad.

El primer día de regreso en el colegio, el trío de aprendices se quedaron frente al establecimiento, no estaban seguros de que fuera buena idea entrar. Los cazadores custodiaban las puertas de ingreso y revisaban a todos los alumnos que pasaban por esas puertas. Oyuki temblaba ligeramente, su cuerpo seguía herido y temía no poder huir de ellos.

Kaito- Cachorra, deja de temblar- dijo seriamente- Eres más fuerte que esos cazadores, que no te intimiden, uno de nosotros no puede vencer a un sangre pura, si quieren pelear, demuestra que puedes deshacerte de ellos en menos de unos segundos- intentaba darle valor, pero ella estaba insegura

Oyuki- No debo lastimar a los humanos- susurró angustiada- ya herí a muchos la noche del baile-

Zero- Oyu, todo estará bien, Yagari-sensei te dió unos brazaletes nuevos, no se darán cuenta que eres tu- intentó apoyar

Kaito- Si los humanos te hacen daño a ti, debes defenderte, si un humano te golpea tu se lo devuelves ¿Comprendes? Hazles saber que eres poderosa y no le temes a nada ni nadie- la incentivó y la apoyó para que no se mostrará frágil- Muestrate como la princesa que eres, demuestra el poder que tienes- ella asintió más segura y le sonrió- No se separen en ningún momento, los van a tener muy vigilados y van a aprovechar si los ven solos-

Zero- Tendremos cuidado-

Oyuki- ¿Puedo demostrar que soy un vampiro para alejar a los cazadores?- preguntó antes de acercarse a la entrada

Kaito- Si es necesario tienes la libertad de hacerlo, ya no vamos a limitarte, eres lo suficientemente grande como para comprender lo que debes hacer- la abrazó fuertemente- Ya hablé con el director, él va a ayudarlos a huir, en caso de que se atrevan a atacar- le susurró al oído

Oyuki- Bien, nos vemos por la tarde, Onii-chan- se separó del abrazo y tomó la mano de Zero de inmediato

Kaito- Claro, cuídense- ambos albinos se despidieron y con valor caminaron a la entrada del colegio- *Oyu... Yo arreglaré esto, pronto serás libre de toda esta carga que te dieron*- pensó seriamente, vigilando que ingresarán al establecimiento

Oyuki sentía mucho miedo, pero su familia le dio la fuerza de enfrentarse a los cazadores, cara a cara. Dejó fluir su energía y permitió que ellos lo vieran, aquel porte refinado, altanero y elegante de sangre pura. El temblor de su cuerpo desapareció y la serenidad la invadió.

En las puertas, el cazador los reconoció, pero ella lo hipnotizo y entró en el edificio sin mayores inconvenientes. Una vez que llegaron al salón, Zero la abrazó fuertemente al ver que comenzaba a temblar como gelatina. Ambos agradecían que fuera algo temprano por lo que no habían más de 5 alumnos en el salón con ellos.