🌧️Vampire Knight: La niña en el olvido🌧️ (EN CORRECCION)

-CHAPTER 30-

Dejó fluir su poder por la cuchilla de la katana, aquiriendo un aura anaranjada. Ambos sangre pura se sintieron inútiles por no ayudar, así que desobedecieron. Los tres luchaban juntos, lo cual no fue bueno, llegaron refuerzos de parte de los cazadores y un grupo de ellos vio a ambos vampiros desconocidos uniéndose a sus compañeros en la lucha. 

Ni siquiera con los refuerzos lograron vencer a los vampiros, cada vez más cadazores morían y el agotamiento les estaba ganando. Nazli se separó un poco y utilizó uno de sus poderes, una fuerte corriente de viento los tomo por sorpresa, al igual que ver a los vampiros intrusos volverse cenizas frente a ellos.

- ¿Por qué... - habló exhausta- ¿¡Por qué mierda esos malditos vampiros venían por ustedes!?- Exclamó furiosa apuntándoles con la espada

- ¿Quienes son ellos?- preguntó un cazador a su compañero

- Son dos sangre pura... Pero jamás los había visto- respondió otro

- Te juro que no sé nada, te lo juro por mamá- dijo Kellan

- ¡No jures por los muertos!- gruñó enojada

- Hija, cálmate- habló el vampiro

- Ella no es tu hija- se escuchó la voz grave de Yagari, apareciendo entre la multitud- No sé que clase de oportunistas sean, pero no permitiré que nos causen más problemas- añadió con seriedad

- Papá, perdón, no tenía idea de que venían por ellos, creí que venían por Kaname o Yuki- dijo apenada la chica del cabello blanco, sin despegar la mirada de ambos puros

- Ahora- dijo Kaito y los cazadores arrestaron a ambos puros- No los dejaremos ir hasta que sepamos quienes son- avisó acercándose a su cachorra mientras ambos vampiros eran reducidos y esposados, impidiendo que usen sus poderes o habilidades

- Yagari Nazli, queda detenida por conspiración en contra de la raza humana y traición al consejo de cazadores- anunció un cazador, mientras le colocaba un grueso collarín de metal madre para suprimir sus poderes- incauten los animales- ordenó al ver qué los pequeños felinos no le permitían acercarse a su madre

- A mis cachorros no les ponen un dedo encima, mugrosos- gruñó enojada, protegiendo a sus pequeños

Un cazador que apuntaba a la chica, llamó a Yagari y a Kaito. Según lo que dictaba el acuerdo, si Nazli era ejecutada, ellos debían hacerlo

- Ya saben las reglas ¿Ustedes la trajeron? Ustedes mismos le pondrán fin al problema- dijo entregándole un arma sana y cargada

El padre adoptivo suspiró y apuntó a su hija en el corazón. Ella se había quedado inmóvil. Todo aquel que quisiera defenderla era inmovilizado y sostenido por los cazadores.

- ¿No le dirás unas últimas palabras a tu hija vampiro?- preguntó con sorna uno de los cazadores infiltrados

Los ojos de la chica observaban al cazador con miedo y desconfianza, aquella mirada que tuvo cuando Cross la dejó a su cuidado. Esos ojos lila cargados de temor hicieron que Yagari viera a su hija igual a como llegó, pequeña, asustada y con el corazón herido. Al verla cerrar los ojos con resignación, se sintió fatal.

- No... Porque no pienso hacerle daño- respondió disparándole en la cabeza a él, era un vampiro por lo que se desintegrandose

- ¡No seas cobarde!- Exclamó su superior- Si no lo haces tu, alguien más lo hará y podría no estar satisfecho con solo asesinarla, podrían querer más, no sé... Humillarla y utilizarla-

- ¡Dispara!- Exclamó ella, con el dolor de su alma, aceptaría su destino- Estaré feliz de saber que fuiste tu quien lo hizo- sonrió con cariño

- No lo haré- arrojó el arma lejos y se acercó a ella- No puedo- la abrazó fuertemente

- La muestra de amor más fuerte que puedes darme es... Dispararme tu- susurró mientras se dejaba abrazar- solo te pido una cosa, cuiden de mis gatitos- un disparo se oyó por todo el bosque y Nazli cayó de rodillas

El cazador fue asesinado por Novak, el león mató a ese hombre y a muchos más que quisieron hacerle daño a su mamá. En cuanto terminó, corrió al lado de donde estaban sus conocidos reunidos. Intentó ayudar a su mamá a levantarse, pero el disparo fue directo al corazón.

- No, no, no, no, no, por favor no- dijo desesperado el del parche, quitándole el collar, intentando tapar el agujero en el pecho de su hija y evitar que pierda aún más sangre

- Te dije que no era buena idea regresar- murmuró con dolor

- No puede ser- dijo su hermano rubio- Después de tantos años la volvemos a encontrar y pasa esto-

-... Malditos Cazadores...- dijo con furia el hombre de cabello blanco

Nazli intentaba curarse pero le era muy difícil aún sin el collarín ese. Estaba perdiendo mucha sangre y cada vez respiraba con mayor dificultad.

Novak estaba furioso, se levantó del costado de su madre y se dirigió a los cazadores gruñendo. Rugió con fuerza, haciendolos retroceder unos cuantos metros. Su gran tamaño imponía mucho más que solo respeto. Era aterrador verlo enojado me y él estaba furioso, por lo que la multitud de indeseables emprendió el regreso a sus casas.

- Cachorra... Muerde- dijo Kaito, le dió su brazo descubierto

- ...No...- respondió débilmente-... Si lo hago... Te volverás vampiro...-

- Hay que llevarla adentro- dijo Yagari tomándola en brazos y corriendo a su cuarto en los dormitorios nocturnos

Kellan se dió cuenta que algo iba mal con su padre, su aura se volvía cada vez más pesada y oscura. Pudo apreciar el drástico cambio de su cabello.

Andreus ahora tenía el cabello largo y tan negro como la noche, sus ojos eran tan rojos como la sangre, con un brillo de odio y rabia en su más puro estado. Se liberó de las ataduras con un simple movimiento y desapareció en una nube oscura junto con varios murciélagos.

El rubio se levantó de dónde estaba y sintió una explosión a lo lejos. El castillo de las tinieblas había regresado y junto a él, su más grande problema, "Athan, el decapitador". Su padre había despertado de su sueño.

En el cuarto, Nazli gimoteaba por el dolor, sentía como se quemaba por dentro. Su familia no sabía que hacer, no había bala que quitar y ella se negaba a beber sangre de ellos.

Sus gatitos permanecieron sentados junto a ella. Maullaban, de tanto en tanto, con tristeza y desesperación.

- Novak... Creo que no podré cuidar del cachorro- dijo Nazli sonriendo con tristeza y el felino frotó su rostro con el de ella, ronroneando suavemente

- Por favor... Bebe de mi- habló Yagari- No importa lo que pase- ya estaba empezando a desesperarse evidentemente

- Sensei... ¿Podría dejarme solo unos minutos a solas con ella? Prometo que no pasará nada malo, solo quiero revisar que no hayan quedado residuos de la bala- pidió Kaito con los ojos ensombrecidos

- ...Está bien, iré a hablar con Cross y a ver dónde se metió Zero...- respondió después de aclararse la garganta

Yagari dejó un beso en la frente de su hija y salió del cuarto.