VIII

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[...]

4 años después

- ¡¿Por qué me mentiste de nuevo Naruto?! -

- ¡Lo hice por el bien de mis hijos! -

- ¡Ese asqueroso te quería... Te quería violar Naruto! - Gritó el Nara.

- ¡No me iba a dejar! Además, deja de gritar que los niños se pueden despertar -

Pero para todo eso, ya era tarde.

El niño de 10 años se encontraba con la puerta entreabierta de su nueva habitación; bueno, nuevo sería lo anticuado, una vez que nació el pequeño Minato tuvieron que mudarse una vez más a un sitio más grande.

Pero aquí estaba el gran problema.

Shikamaru se encontraba exaltado, más que nada por la seguridad de su mejor amigo, además de sus hijos.

- Me prometiste, desde hace años, ¡Que dejarías eso! ¡Naruto te puede pasar algo! ¡¿Acaso no piensas en eso?! ¡¿Y los niños?! -

- ¡En lo único que pienso cada día, desde que estaba embarazado, fue en mi familia! - Gritaban y gritaban entre ellos.

Por fortuna, el pequeño de 4 años todavía no despertaba, y eso era bueno.

- Dejaste tus demás empleos Naruto, incluso el que te conseguí... ¿Por qué? -

- Ya no puedo con nada Shikamaru, lo único que pienso es en mis hijos, su infancia, su niñez, y sobre todo su seguridad... Shikamaru, debo dinero, y, ni siquiera yo - Esta vez se soltó a llorar sin control, abrazando su cuerpo con sus delgados brazos.

- ¿De qué hablas? - Se acercó a él, sosteniendolo.

- La fortuna... Si tuve, fue heredada, la compañía de hecho fue lo que me dejaron... Poco después de que fallecieran mis padrinos, no lo sabía, fue asesinato, los mataron Shikamaru, pero los demás encargados se dieron a la tarea de gastar el dinero, e incluso dejaron una suma increíble de dinero con otras personas, la compañía se quedó en bancarrota y la cerraron, dejándome las deudas a mí... Es demasiada pero... Pude pagar en parte - Con una de sus manos tomó el hombro del moreno con lágrimas bajando por su rostro.

- Sólo déjame terminar ese pago, hasta ahí, prometo que lo dejaré - Dijo aferrándose a los brazos del moreno.

- No, vas a salir de ese lugar, créeme que te ayudaremos Naruto, te lo dije desde el inicio - Y ante sus palabras el doncel sólo asentía con lentitud. - Sé que no es esa la única razón por la que sigues ahí... Así que dime -

Parecía que ante los ojos tan serios de su mejor amigo nada se le escapaba, y estaba en lo cierto.

- Yo... Creí que, si seguía estando en esos lugares, podría encontrar a Sasuke de nuevo - Por sheunda vez, las lágrimas cayeron desde sus ojos hasta tocar el frío suelo.

- El Uchiha, ese tipo, Naruto ¡¿Te das cuenta del daño que te hizo? -

" ¿Uchiha? ¿Qué no es ese el apellido de los amigos de mamá? ¿Será Itachi-San? No, él es muy bueno y lo vemos cuando nos reunimos"

Se decía mentalmente el pequeño azabache.

- Lo sé... Pero, creí que él... -

- ¿Qué el qué? -

El rubio no respondía.

- ¡Naruto responde! -

- ¡Creí que él preguntaría por sus hijos! -

Eso dejó a los dos presentes helados.

"¿Papá? ¿Un Uchiha?"

- Creí, que si me veía, hablaría conmigo, si me diría o reclamaría el porqué estoy ahí, ¡Creí que se preocuparía por sus hijos! ¡Quería verlo y decirle que tiene dos bellos hijos los cuales lo esperan con ansias todas las noches! ¡Que lo extrañan y que ya no sé que mas decirles para que no se preocupen! ¡Yo lo seguí esperando! -

- ¡Y eso mismo te lastima! ¡Sasuke Uchiha es la razón de que estés así! ¡Lloras por él! ¡Él no te buscó Naruto! ¡Debes aceptarlo! ¡Él sólo te hará daño tienes que entenderlo! -

- Naruto, de seguro aún tienes esos videos del Uchiha ¿Verdad? - El primer mencionado sólo bajó la mirada.

- De cierto modo, no puedo dormir sin verlos, o sin leer la carta que le hice -

Ahora estaban los dos uno frente al otro, el doncel con lágrimas saladas en sus dos celestes ojos, y el castaño con unas ganas de llorar al mismo tiempo por tratar de retener la verdad, no sabe lo que hace.

- Mañana deja ese trabajo, te daré el dinero que necesitas y no quiero un no como respuesta, puedes vivir un tiempo con Temari, Shikadai y conmigo, ya después, cuando estés bien contigo, puedes regresar a tu casa, pues al final es tuya - Evitando mirar al joven adulto frente a él caminó hasta la entrada de la casa - Vendré mañana, por favor, descansa - Y sin más salió del pequeño departamento.

Finalmente el rubio había soltado el aire que había guardado en sus pulmones inconscientemente.

Se dejó caer en el frío suelo, siendo sus brazos aquella única zona protectora que tenía en el momento.

No podía hacer ya más ruido.

No podía decirle a nadie.

Sólo reprimía sus sentimientos.

Su pequeño hijo de ojos como el mismo cielo trató de sonar lo más convincente posible.

Con algo de fuerza y lentitud abrió la puerta de su habitación, dándole una señal a su progenitor para secarse las lágrimas.

- ¿Mamá estas bien? - Dijo el menor mientras se tallaba su ojo con la mano derecha, tratando de parecer un recién levantado.

- Men, cariño ¿Te sientes mal? - Se secó las lágrimas con rapidez para acercarse a su hijo.

- No, escuché gritos, pero no sabía... - Finalmente miró a su madre/padre, y ahí lo notó, sus ojos estaban rojos e hinchados, nadie lo podía evitar, sus labios se encontraban un poco temblorosos y su ropa no era la que acostumbraba a usar.

- ¿Escuchaste algo? - El pequeño negó.

El mayor de la familia simplemente trató de sonreír como siempre, y acarició con suavidad los cabellos de su pequeño hijo.

- ¿Mami estabas llorando? -

- Si, me peleé con tío Shikamaru, pero está bien Men - Al menos no mentía en ese aspecto; recibió un fuerte abrazo por parte de su pequeño hijo, un abrazo que al instante correspondió.

- Te amo mami -

- Y yo a ti Men, siempre lo hago, a ti y a Minato -





























Y~~~~~

¿Cómo creen que Men tome la historia?

¿Buscará quién es su padre?

¿Se enojará con Naruto después de saber aún más verdad?

Se verá después 7w7

Baissss

Gracuas por votar y comentar :D

Una Vida Contigo [SasuNaru] [9M2] EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora