🖇; capítulo 24

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—¿Qué ocurre? ¿Pasó algo en la empresa que se deba arreglar hoy mismo?— fue lo primero que preguntó Taehyung al estar dentro de la casa, lejos de todo el ruido y las miradas.

Hoseok aún no lo soltaba, pero tampoco lo miró, logrando que el menor se confundiera aún más. Trató de soltarse pero el mayor sujetó con más fuerza su muñeca.

—¿Qué pasa? ¿Por qué me ha sacado de la fiesta sin previo aviso?

Se sentía como un tonto. No tenía respuesta para las preguntas que el menor formulaba, así que decidió soltarlo antes de que le cuestionara más.

—Lo lamento.— dijo en voz baja.

—Está bien, no hay porqué disculparse.— mencionó, rodeando al mayor para poder mirarlo de frente. Le sonrió ampliamente y respiró profundo. —Yo...me preguntaba si le gustaría ir a bai...

—Taehyung.— se escuchó a espaldas de Hoseok, quien inmediatamente tuvo reacción al escuchar la voz de Park. —¿Está todo bien?

—¿Eh? Sí, no te preocupes.— rió un poco nervioso. —Volvamos a la fiesta.

Park sonrió y extendió su mano para que el rubio la tomara. De pronto, las palabras que le había dicho su hermana, vinieron a su cabeza como luz antes del trueno en un día de lluvia.

Tú no vayas a cometer la misma estupidez de perder a alguien y después de tiempo darte cuenta de lo valioso que era tenerlo a tu lado cuando lo veas con alguien más siendo feliz.

—Taehyung.— lo llamó Hoseok.

El rubio se detuvo en seco antes de tomar la mano del muchacho alto cuando escuchó ser nombrado por nada más que Jung Hoseok, aquel que sólo lo llamaba por su apellido y pocas veces mencionaba su nombre. Esta vez...esta vez había sido diferente.

Volteó hacia el mayor y sus miradas cruzaron. El corazón de Taehyung latía con fuerza, emocionado pero también se sentía una extraña tensión en esa atmósfera.

—Sí hay asuntos de la empresa que atender.— fue lo primero que se le vino a la mente.

El rubio soltó el aire que estaba conteniendo en sus pulmones y asintió. Volvió hacia Jinyoung y le sonrió.

—Perdón, pero debo ayudar a mi jefe con el trabajo.

—Está bien, lo entiendo. Espero que pronto volvamos a vernos.— asintió y se despidió con una reverencia de ambos para después salir por donde entró.

La música se escuchaba a lo lejos, pero los dos no se dijeron nada luego de que Park Jinyoung dejara el lugar. Hoseok se aclaró la garganta y estaba a punto de hablar cuando Taehyung lo interrumpió.

—Gracias.— mencionó el rubio dándole la espalda. —Yo...yo me sentía un poco incómodo bailando con él.

—No parecía ser así.

—Pero lo fue en un momento.— a espaldas de él, Hoseok vio como agachó la cabeza. —Estábamos bailando...su mano bajó más de lo que debería y se excusó diciendo que había sido un accidente. Es la boda de tu hermana y no conozco a nadie aquí, así que no vi prudente hacer un escándalo más.

Al escuchar esas palabras, las ganas de ir y partirle la cara a ese idiota eran inmensas. No sabía cómo pero se había contenido; no valía la pena. Caminó a paso lento hacia Taehyung y alcanzó a ver que se limpiaba algunas lágrimas. Sabía que el rubio aún no olvidaba lo que estaba a punto de pasar en el baño de aquel sucio bar y que alguien tocara su cuerpo sin permiso, lo tenía mal. Así que no se atrevió a darle consuelo palmeando su hombro o abrazándolo.

In A Heartbeat °• HOPEVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora