21

524 36 6
                                    

Por fin ha llegado el día en el que presentaremos nuestra canción delante de todos los fans en el concierto de Eva en Nueva York. Estoy muy nervioso, pero a la vez tengo muchísimas ganas de salir al escenario a cantarla. Ayer pudimos escuchar el tema ya producido después de estar grabándolo en el estudio, y nos encanta cómo ha quedado. No puedo estar más feliz por el trabajo que hemos hecho durante estos tres meses juntos.

Llegamos ayer a Nueva York y Eva se encargó de hacerme un tour por toda la ciudad. Todo es alucinante. Aún no me creo que esté aquí viviendo todas estas experiencias tan increíbles junto a ella.

Me despierto con las pedazo vistas que tenemos desde nuestra habitación de hotel de la ciudad. Aunque para vistas, las de mi preciosa novia Eva. Me quedo mirándola mientras duerme tranquila entre mis brazos y acaricio su pelo. Hasta que abre lentamente sus bonitos ojos azules y me sonríe.

— Buenos días mi amor — le digo sonriendo.

— Buenos días bebé — nos damos un dulce beso — despertarse con estas vistas es una maravilla... — acaricia mi torso desnudo y miro para la ventana.

— Ya, es increíble... — se ríe y la miro confuso.

— ¡Me refería a ti idiota! — me sonrojo.

— Ahh valee — nos reímos — tú sí que eres una maravilla mi niña — se sonroja también y la beso.

Seguimos saboreando lentamente nuestros labios, hasta que la falta de aire nos hace separarnos.

— Quiero casarme contigo Hugo — me dice tímidamente y abro los ojos sorprendido.

— ¿Pero ahora? ¡Que no tengo el anillo para arrodillarme a pedírtelo ni na! — niega riendo.

— No, ahora no tonto. Pero quizás dentro de uno o dos años, no sé...es que me imagino mi vida a tu lado y me veo muy feliz — sonrío emocionado y dejo un beso lleno de amor sobre sus labios.

— Eso ha sido precioso — se ríe — y yo también me veo muy feliz a tu lado el resto de mi vida cariño — me sonríe y nos besamos apasionadamente.

Pasamos la mañana entre las sábanas haciendo el amor. Y después de una ducha caliente, vamos a comer a un restaurante increíble con Sam y Flavio.

— Chicos, os tenemos que dar una noticia... — nos dice Sam nerviosa mientras terminamos el postre.

— ¿Qué? No me digas que el concierto de esta noche se cancela por favor — le dice Eva asustada.

— No no, no es algo malo, tranquilos...

— Ah vale. ¿Qué pasa entonces?

— Pues que... — mira a Flavio nerviosa y él entrelaza su mano con la de ella sonriendo para animarla a contárnoslo — ¡estoy embarazada!

Eva y yo nos quedamos boquiabiertos.

— ¡Ahhh! ¡Dios mío! — Eva se levanta a darles un abrazo súper fuerte a los dos — buaa qué ilusión enserio. ¡Que por fin voy a ser tía! — nos reímos.

— Enhorabuena chicos, me alegro un montón por vosotros de verdad — les doy un abrazo también.

Brindamos entre risas celebrando la buena noticia.

[...]

Ha llegado la hora del concierto y los dos estamos atacados de los nervios. Madre mía. La primera vez que salgo a un escenario a cantar delante de un montón de personas. Eva cantará todas sus canciones primero y luego, saldré a cantar junto a ella nuestra canción. Espero que todo salga bien.

— ¿Qué tal estoy? — Eva me enseña su outfit, un traje rojo que le queda impresionante.

— Preciosa como siempre cariño — se sonroja.

— Gracias bebé — nos besamos — bueno, que tengo que salir ya. Deséame suerte — niego riendo.

— No la necesitas, lo vas a hacer genial — sonríe.

— Te quiero mucho — le sonrío abrazándola.

— Y yo a ti. Ahora sal ahí a hipnotizarlos a todos como lo has hecho conmigo — me sonríe.

— ¿Así que te tengo hipnotizado eh? — me río.

— Sí, desde la primera vez que te vi ya me quedé hipnotizado por ti amor — digo sonriendo y se ríe.

Después de besarnos unas cuantas veces más, sale al escenario con un gran recibimiento por parte del público. Yo me quedo mirándola embobado desde el backstage, no puedo estar más orgulloso de ella.

Cuando termina de cantar todas sus canciones, me preparo para salir al escenario. ¡¡Pff qué nervios!!

— Muchísimas gracias a todos por haber venido de verdad, espero que os haya gustado mucho. Y ahora para terminar con este concierto, voy a presentar una nueva canción junto a una persona muy especial. Estos tres meses componiendo con él han sido increíbles, una de las mejores experiencias de mi vida sin duda. Hemos vivido momentos maravillosos juntos de los que nunca me olvidaré. Os vais a quedar alucinando con el talento que tiene este chico enserio. Es magia, luz, sentimiento, energía...el amor personificado. Y sabe perfectamente cómo conquistar un corazón. El mío ya lo tiene desde el primer momento en que nos conocimos — mira hacía mí mientras me dedica esas palabras tan bonitas y nos sonreímos emocionados — bueno, no me enrollo más — dice riendo — un gran aplauso para ¡Hugo Cobo!

El público me recibe con muchísimas ganas. Dios mío, estoy flipando. Me acerco hasta Eva dándonos un pequeño abrazo antes de empezar a cantar nuestra canción "Navegantes", dedicada a Mai, mirándonos a los ojos varias veces sonriendo.

Terminamos de cantarla entre más aplausos, y nos despedimos volviéndoles a dar las gracias.

— Illa, qué guapoo — chillo en el backstage levantando a Eva del suelo dando vueltas.

— Hugooo, paraa, que me mareo — nos reímos.

La dejo en el suelo y nos abrazamos con fuerza.

— Es que ha sido brutal enserio — me sonríe.

— Estoy muy orgullosa y feliz por ti Hu

La sonrío dejando un tierno beso en sus labios.

— Gracias por todo Eva, de verdad. Sin ti mi vida ahora mismo sería una mierda. Pero aquí estoy, trabajando en lo que más me gusta que es la música junto a la chica más bonita del mundo mundial — me sonríe emocionada y me besa.

Sam y Flavio vienen a felicitarnos por el concierto.

— Voy al camerino a cambiarme, ¿vale? Enseguida vuelvo chicos — nos dice Eva, asentimos sonriendo y me besa una vez más antes de irse para allí.

Me quedo contándoles a Sam y Flavio cómo ha sido mi experiencia de subirme a un escenario por primera vez, cuando de repente oímos un tiro. Y la gente empieza a chillar y a correr de un lado para otro asustada. ¿Qué cojones está pasando?

Salgo corriendo hacía el camerino en busca de Eva por mucho que les escuche decir que me quede allí quieto. Por favor que no le haya pasado nada.

Vida de ricoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora