Capítulo 4

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Darach

Narra Kara:
Cuando desperté lo primero en notar fue que Ethan me estaba abrazando no lo quise levantar así que me bañe y me cambié, hice mi rutina, cuando salí del baño Ethan ya estaba despierto

—Rápido o nos dejan y no quiero estar aquí una noche más —dije en cuanto se levanto

Ethan entro al baño, yo me puse su chaqueta

Tuve que esperar en la cama sentada organizando las cosas en las mochilas de ambos para irnos rápido, una vez que salió fuimos al autobus siendo uno de los primeros en subir ambos nos sentamos juntos me tape con la capucha el rostro recargando mi cabeza en su hombro

—No quiero saber —dijo el entrenador— de verdad no quiero saber pero en caso de que no oyeran la junta se cancelo así que iremos a casa ¡vamonos! ¡Vamonos!

Scott se sentó del otro lado de la fila mirándonos

—No se que es lo que pasó anoche —le dijo Ethan a Scott— pero estoy seguro de que salvaste mi vida

—Debes estar bromeando —me levante del lado de Ethan

—De hecho yo salve tu vida —interrumpió Stiles

—¿Tú? —solté una risa— si como no —mire a Ethan— me ofendiste

—Así que te diré algo, estamos seguros de que Derek esta vivo —dijo Ethan— pero mató a uno de nosotros eso quiere decir, va a pasar una de dos cosas o se une a nuestra manada

—Y mata a uno de ellos —dijo Scott

—O Kali va tras de él y lo matamos así son las cosas —dio por terminado Ethan

—Tu pequeño código de ética es un poco barbárico solo para que lo sepas —dijo Stiles

—¿Que tiene que ver la chica? —pregunto Scott

—Ella no es parte de esto —respondió Scott

—Si como no —dijo el humano

—Busca una amiga a la que le importes demasiado para salvar tu vida —dijo Ethan— no se metan con ella o se las verán conmigo y con Aiden

—Como digas —dijo el humano

—Kara —Ethan me miró— ven aquí

—No lo creo —sonreí

—Te quedas con la chaqueta

—Ya voy

—Entrenador puedo ver su silbato un momento —Lydia le quito el silbato

—¡Oye! Bien pero me lo regresas —escuche como Lydia intento hacerlo sonar también parte de la conversación sobre un Darach tendría que investigar sobre él; vi como Stiles arrojó el silbato por la ventana— oye oye oye ¡Stilinski!

Comenzamos de nuevo el viaje pero esta vez al instituto, cuando llegamos Ethan me paso dejando en mi casa; entre encontré a mi padre sentado en la sala

—¿Como te fue? —pregunto mi padre

—No quiero hablar de eso —me sente a su lado— ¿por qué?

—Esa pelea la íbamos a ganar sin tu ayuda

—También soy parte de la manada —dije algo molesta

—Si te llegaban a ver tan solo ellos, el resto lo iba a saber y con los asesinatos puede que te involucren

—Papá soy capaz de cuidarme sola y lo sabes tú me entrenaste me hiciste fuerte, puedo demostrarlo

—Lo sé

La Hija de DeucalionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora