La Hija de Deucalion

Capito 68

Nadie está preparado para recibir la muerte o eso es lo que pensaba, fue como ver mi toda mi vida en un pequeño paseo por el bosque

Todos sufrían por la misma razón, dos pérdidas por una parte estaba la manada de Satomi y por otra parte la manada McCall

Brett la pasaba encerrado en su habitación unas cuantas veces tocaba su comida y eso solo era cuando su cuerpo lo obligaba, pasaba las noches escuchando música mirando el techo mientras recordaba todo lo que había pasado

Algunas veces se sentaba en la cama con la mirada perdida sintiendo una brisa cálida por su cuerpo quería pensar que se trataba de Kara quien lo cuidaba

Se odiaba así mismo por ser tan descuidado, si tan solo se hubiera puesto un límite en el entrenamiento de lacrosse la consejera Monroe no se habría dado cuenta

Su hermana estaba preocupada por él, Brett estaba delgado con grandes ojeras, estaba descuidado y eso no le gustaba nada

—Brett por favor —toco la puerta su hermana menor— pasaron tres semanas y no has comido casi nada

—Dejame en paz Lori

Lori abrió la puerta encendió la luz en la habitación encontrando a su hermano acostado con auriculares abrazando una fotografía, la misma foto que le había tomado Lori cuando ellos bailaron en la habitación

Había ropa regada en el suelo las ventanas estaban cerradas, le dolía ver a su hermano así

—Brett vamos a comer algo —suplico la mujer lobo— me preocupas hermano

—Lori enserio no quiero nada —habló enojado

—¿Crees que a Kara le gustaría verte asi?

—Kara esta muerta —susurro

—Ella murió para salvarte

—Murió por mi culpa

—¡Murió porque te amaba! —la voz de la pequeña beta se entrecorto— murió porque su amor era tan grande por ti que decidió dar su vida para salvarte

—Si tan solo

—Nada —interrumpió Lori— ¿crees que a Kara le gustaría verte así? —preguntó nuevamente, Brett negó con la cabeza mientras caía una lágrima— por favor hermano

—No puedo hacerlo —suspiro—ba veces siento que la tengo a mi lado, siento sus caricias

—Kara dio la vida por ti Brett, no puedes pagarle de esta manera

Brett se dio la vuelta dándole la espalda a su hermana menor

—Yo también la extraño —Lori se sentó en la esquina de la cama— odio verte así

—Teniamos una vida planeada —sollozo— perdí a mi otra mitad, Lori

—Se que te duele porque la amaste tanto y se que ese amor no se muere pero no puedes seguir así

—Prometí cuidarla pero al final le falle

—No es así Brett, no le fallaste a nadie —suspiro— ella murió por ti, ahora vive por ella —dijo su hermana antes de salir de la habitación

Brett subió el volumen de sus auriculares volviendo a sumergirse en la tristeza

Recordaba cada detalle de su rostro, su voz, como se sentía cuando estaba a su lado, le dolía recordar, él quería que todo esto fuera solo una pesadilla de la cual iba a despertar en cuestión de tiempo

Ambos hombres lobos eran completamente diferentes estando en compañía del otro Brett siempre dijo que Kara era su mundo pero nunca imagino que él podría perderla

Brett nunca la dejaría de amar, ellos no eran perfectos pero el amor que sentían era real

Sabía que la herida iba a sanar pero la cicatriz no iba a borrar, Kara lo había marcado de por vida

Por otro lado Liam cada día intentaba cuidar de Lydia pues sabía que para Kara, ella era una persona muy importante y después de la muerte de Allison, Kara se acercó a Lydia ayudándola a salir adelante. Estaba vez le tocaba a él, su culpa era tan grande que no lo dejaba dormir

Todas las noches tenía el mismo sueño ver a su amiga tirada en el suelo repitiendo sus últimas palabras "te quiero" cada noche la veía, la recordaba y eso es lo que más le dolía saber que no la volvería a ver, saber que él no pudo hacer algo por ella

Estaba tan aferrado a creer que ella volvería esto causó que se hiciera daño. Decía escucharla cuando en realidad era la brisa cuando el caminaba por las calles de Beacon Hills buscando como mantener la mente en blanco y dejar de pensar en la híbrida

Liam fue una de las personas más afectadas después de la muerte de Kara, desde un principio sabía que sí perdía a integrantes de la manada, él no iba a poder con todo el dolor que le dejarían

Estaban preocupados por él, Scott trató de distraer al beta junto a Isaac mantenían entrenando lacrosse querían que él saliera adelante

—No puedes seguir así Liam —habló su alfa

—¿Quién dice que no?

—Nosotros —respondió Isaac— no sólo te estás haciendo daño a ti, se lo haces a todos, los estás preocupando

—Cambiate —ordenó Scott— saldremos en cinco minutos

—Todos esa noche me vieron —susurro— ahora saben lo que en verdad soy —Isaac y Scott compartieron una mirada

Sabían el riesgo que ahora corrían, los cazadores, la gente que ahora temía por su seguridad sin saber que gracias a la manada seguían con vida

Liam sabía que está vez iba enserio, sabía que estaba afectando a todos y no es que tuviera el mejor de los aspectos en esta semana la estaba pasando mal, al igual que todos, pero él los comenzaba a preocupar

En cuanto Deucalion desapareció, nadie sabía de su ubicación Scott y Liam fueron a su casa no encontraron a nadie las cosas seguían en su lugar

Después de la muerte de su hija él decidió alejarse de todo y todos, estaba muy afectado cada noche salía al bosque recorriendo los lugares donde pasaban el tiempo, le traían buenos recuerdos. Hubo un tiempo en el que Deucalion perdió el control se estaba convirtiendo en una amenaza para las personas si no lograba tomar el control de su lobo ¿como lo haría? Perdió a la única persona que le importaba

Scott creía que Deucalion necesitaba su espacio después de la muerte de su única hija, no quería ser negativo e imaginar que lo tenían secuestrado cazadores o peor

Stiles cada día llamaba para preguntar por su híbrida amiga, nadie se atrevió a contar la verdad pues habían llegado al trato de no interrumpir los estudios de Stiles, Kara desde un principio estuvo de acuerdo con esa decisión quería que Stiles siguiera adelante y cumpliera todo lo que quería aunque tuvieran que mentirle

Isaac se quedó con Liam tratando de subir su ánimo, mientras que Scott salió para arreglar unas cosas de la manada

Los dos alfas se reunieron en la veterinaria junto al druida

—Es hora —habló Deaton— el tiempo se acabó debemos actuar ahora o nunca

Los dos hombres lobos compartieron una mirada antes de poner el grimorio sobre la mesa