Amapola - Sueño

C10 - Modelo tímido

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Gu Yu se sonrojó aún más cuando miró a Cyno a los ojos.

Sus manos izquierdas estaban entrelazadas con sus dedos en la misma dirección, y él estaba frente a Cyno para darle una toalla.

En este momento, estaba sentado de rodillas entre el lado izquierdo del cuerpo de Cyno y su brazo izquierdo. Parecía que Cyno lo sostenía.

Señaló los ojos de Cyno, levantó la mano derecha hacia sus propios ojos, extendiendo la palma con cuatro dedos juntos, y luego el pulgar y la palma se acercaron el uno al otro.

Cuando las yemas de los dedos estaban una al lado de la otra, su ojo derecho se cerró al mismo tiempo, indicando a Cyno que cerrara los ojos y descansara.

Una vez que terminó, bajó la mano y abrió el ojo derecho, mirando a Cyno expectante.

Cyno recibió un golpe en el corazón, ¿cómo podía ser tan lindo? Los pensamientos que habían sido dispersados por Gu Yu volvieron de repente como un maremoto, incluso más fuertes que antes.

¡Esta hembra artificial, debe haberlo hecho a propósito!

No cerró los ojos. En cambio, sus ojos ardían aún más mientras miraba a Gu Yu, y sus pensamientos lucharon nuevamente.

¡Poséelo! ¡Era una hembra artificial! Poséelo... Estaba en un bucle infinito en su cabeza.

Los latidos de Gu Yu aumentaron de repente. Los ojos de Cyno le hicieron sentirse vulnerable e incómodo. Desvió la mirada, preguntándose si Cyno no lo entendía.

Se mordió el labio, volvió a mirar a Cyno, extendió la palma de la mano y cubrió suavemente los ojos de Cyno.

Debería ser capaz de entender esto, ¿verdad?

La suave palma blanca cerca de sus ojos, emitía una tenue fragancia. Los ojos de Cyno se estrecharon. Era la fragancia de su gel de ducha.

Todas las habitaciones de la villa estaban equipadas con el mismo gel de ducha.

Rápidamente lo comprendió. No es de extrañar que la hembra artificial tardara tanto en cambiarse de ropa, él también se duchó.

La hembra artificial estaba bastante limpia. Mientras lo sostenía por detrás, su atención se había centrado en la fragancia de las glándulas, sin notar siquiera el aroma del gel de ducha.

Cyno lo imaginó en el baño, y ciertos impulsos se volvieron aún más incontrolables.

Gu Yu esperó unos cinco segundos, luego, para ver si Cyno había cerrado los ojos, comenzó a levantar la mano, pero antes de que apenas se moviera, Cyno la agarró.

La palma de Cyno era un tamaño completo más grande que la de Gu Yu, envolviendo casi por completo su mano. Sintiendo el calor de la palma de su mano sobre la suya, su corazón se estremeció violentamente.

Sacudió su mano con fuerza, sin éxito. Cyno agarró su mano y la tiró hacia abajo. Sus ojos se encontraron con los de Cyno, luego se apartaron rápidamente.

Los ojos de Cyno lo pusieron nervioso y en pánico. No pudo encontrar la mirada de Cyno por más de un segundo.

Comenzando por la mano de Gu Yu, los dedos de Cyno se arrastraron hasta abajo, deteniéndose abruptamente cuando llegaron al abdomen de Gu Yu. De repente, soltó sus manos y dijo con voz profunda: ―Date la vuelta.

Gu Yu rápidamente retiró su mano y miró a Cyno confundido.

Cyno lo miró con fiereza y le advirtió: ―¡No importa lo que pase, no lo recuerdes, olvídate de todo! Date la vuelta.