C27 - Tratamiento

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Zolei no terminó el resto de su oración antes de que un soldado lo amordazara con un guante. Zolei negó con la cabeza violentamente, tratando de quitarse el guante. ―Uh-uh ... 

El soldado que se quitó el guante, también se quitó bruscamente el guante derecho y amordazó a Zolei aún más. Miró a Zolei, ―Sabías que era una hembra natural y te atreviste a lastimarlo, ¿sigues siendo un hombre? 

El resto de los soldados también se veía furioso.

Su ira no tenía nada que ver con Cyno, sino porque Gu Yu era una hembra natural. Las hembras naturales deben ser amadas y cuidadas por todos, y cualquiera que intente lastimarlas debe ser castigado severamente.

Hong y Li se quedaron paralizados en su lugar.

Cuando vieron a Gu Yu y escucharon la voz de Gu Yu, comenzaron a sospechar de la identidad de Gu Yu, pero solo lo sospecharon. Después de todo, las hembras naturales eran demasiado raras, ni siquiera una durante casi sesenta años.

Las palabras de Zolei convirtieron la sospecha en realidad y les causaron un gran impacto.

Cyno los recorrió con la mirada, luego le dio a Zolei una mirada fría y exigió: ―Alguien, por favor, conduzca. ―Se fue con Gu Yu en sus brazos.

Los soldados pelearon con la mirada por un momento, y el que ganó inmediatamente siguió a Cyno con alegría y rapidez.

El asistente sonrió cálidamente mientras miraba a Li, Hong y el hermano de la cámara, ―Ustedes tres, hablemos.

Cyno abrazó a Gu Yu en el asiento trasero del auto. Gu Yu estaba caliente, así que se frotó el hombro y se apartó la chaqueta del uniforme, ―Caliente.

Su voz parecía ser cálida, vaga y suave, que era inexplicablemente dulce para los oídos. El cuerpo de Cyno estaba tenso, Gu Yu estaba sentado en su regazo en este momento, incluso un ligero movimiento era una gran prueba para él.

El aire se estaba llenando de feromonas. Respiró hondo, cumplió con los deseos de Gu Yu y se quitó la chaqueta.

Gu Yu estaba satisfecho, pero vio que la cara de Cyno se ponía fea y extendió la mano para tocar la frente de Cyno, sin embargo, su mano fue capturada.

Las yemas de sus dedos tenían abrasiones, ligeramente rojas e hinchadas, y debido a la piel blanca, eran particularmente obvias. Cyno bajó la cabeza y besó la mano pálida. Los dedos de Gu Yu se curvaron y su rostro se puso rojo, ―Está bien.

Cyno se culpó a sí mismo, ―Lamento no protegerte.

Gu Yu frunció el ceño, ―No es tu culpa ―, dijo recuperando el aliento, ―Realmente no es tu culpa.

―Mariscal, estamos aquí. ―El soldado que actuaba como conductor sudaba profusamente y oler el dulce aroma de las feromonas era una dulce tortura.

Golpearon la ventanilla del lado del pasajero. Qin Sheng había estado esperando en el estacionamiento durante mucho tiempo, y cuando vio el auto de Cyno, se acercó de inmediato.

―Abre la puerta. ―Dijo Cyno.

El soldado abrió la puerta y Qin Sheng se sentó rápidamente en el lado del pasajero. El olor de las glándulas femeninas que llegó a él hizo que su respiración se detuviera, ―¡Cierra la puerta! 

El soldado se apresuró a pulsar el botón de cerrar la puerta para aislar el olor en el coche por si lo olía la gente que pasaba por allí. Aunque el purificador del coche estaba encendido en todo momento, la fuente emisora estaba en el interior del coche, por lo que el olor era difícil de eliminar por completo.

Amapola - SueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora