¿Estamos en 1957?

3.- Un plan genial.

Rubén: Chicas ¿Será que me pueden decir de una vez por todas a dónde vamos?

T/n: Tenemos un plan. Y si funciona, muy pronto vamos a regresar a casa.

Eva: Exacto.

Rubén: ¿Si funciona?

Eva - T/n: Confía en nosotras.

Rubén: Famosas ultimas palabras. ¿Qué otra opción tengo?

T/n: Bueno, puedes usar el teléfono temporal y... llamar a Sofia para decirle que te venga a recoger.

Rubén: Espera, espera ¿Existe un teléfono temporal que puede llamar al futuro?

Eva: Rubén...

Rubén: ¿Qué?

T/n:  ¿Teléfono temporal? Piensa.

Rubén: Sonaba increible, ahora quiero uno.

Eva: Pues no existe. Tu única esperanza de regresar a Sofia somos nosotras.

Rubén: Adiós Sofia, tendrás que aprender a vivir sin mi.

T/n: Gracias, por el voto de confianza. Suerte, viviendo sin Sofia.... y sin internet.

Rubén: Esperen, esperen, esperen, esperen.

Eva: Pensé que no confiabas en nosotras.

Rubén: No se trata de confiar chicas. Miren como hermano y primo mayor, tengo el deber de cuidarlas ¿Qué tal que en vez de llagar a casa terminen en el Coliseo Romano rodeadas de leones?

Eva - T/n: Y si eso pasa, ¿Tu nos vas a salvar de los leones?

Rubén: Claro es mi deber usarlas como escudo, para subir a las gradas, huir y salvarme.

Eva - T/n: Vamos.

Rubén: ¿Seguras qué no existe un teléfono temporal? Quisiera llamar a un taxi.

JJ.

JJ: Nada.

Checho: Hola Eva. Soy Checho, y me encanto tu broma ¿Quieres más batidos? Con permiso Eva.

JJ: No eres gracioso, Checho. Es que... no se porque estoy así, chicos.

Oso: Porque me parce que estás más enamorado de ella que de Vero.

JJ: Bueno, Vero es una linda chica, pero... no creo que este enamorado de ella.

Checho: Pues alguien tiene que decírselo, porque... Vero jura que te mueres por ella.

JJ: Eso pensaba, pero... ahora solo puedo pensar en... en Eva.

Oso: Chicos, chicos, chicos. ¿Cómo creen que pudieron entrar en el estudio?

Checho: Y aparecer en medio de todo el baile.

JJ: Ni idea. Pero es seguro que Eva sabe hacer una buena broma. No como otras persona.- refiriéndome a ellos.

Manuel.

La cosa azul no salia de mi cara.

Andrés: Yo que tu, me voy así.

Manuel: Sí, muy gracioso.

Fernando: Gracioso estás tu. Por suerte el azul queda bien con el color de tus sabanas. Ya nos dijeron que usas sabanas de ovejita.

Manuel: Eso era un invento de cuando estaba chico. Cuando no podía dormir, contaba las ovejas de mis sabanas ya así me quedaba dormido.

Andrés: Miren. Ya que vas bien tarde, te vamos a ayudar a llegar un poquito más rápido. Fer, llévale sus herramientas a la puerta para que no pierda más tiempo.