Atsuko Kagari conocida como Akko,se enamoro de Diana Cavendish una chica inteligente,la mejor de la clase,una chica de una familia millonaria,Atsuko de una familia japonesa,lo contrario a Diana, tradicional y social.
Akko se le va a confesar a Diana...
Los rayos entraban desde la ventana, un bostezo se hizo presente.
Diana se estiró un poco y se tallo los ojos.
Al abrirlos pudo notar que no estaba en su habitación ¿No era un sueño verdad? Pensaba mientras se sentaba lentamente sobre la cama.
Un bostezo llamado su atención, se sonrojo al ver a Akko.
Akko no se despertó del todo pero abrió los ojos al sentir como unos labios tocaban los suyos y sentía su respiración cerca.
Diana se sonrojo por esa acción y apartó la mirada sonrojada, Akko se tallo los ojos y sonrió al ver a Diana frente suyo.
Diana la miro "Quiesiera ver esa sonrisa todas las mañanas" penso para si misma, bien sabia que amaba a su novia, su sonrisa es una de ellas.
-Buenos días Diana.---Akko sonrio con las mejillas sonrojadas a lo que Diana se lo devolvió al instante.
Akko abrazo el cuello de su novia en lo que al mismo tiempo se sentaba en sus piernas, Diana se sonrojo por esa acción y sin darse cuenta y por instinto agarro las caderas de Akko.
Akko sonrió para si misma y beso a Diana, ese beso era demaciado intenso que Diana olvido todo y le siguió el paso.
Diana atrajo su cuerpo más al de ella, Akko disfruto eso y abrió un poco la boca para pasar su lengua por la de la contraria, Diana empezó a acelerar su respiración y al mismo tiempo hacían una danza de lenguas.
Un toque en la puerta hizo a Akko estremecerse y separarse al instante, se levantó y dejó a Diana muy acalorada.
En lo que Akko abría la puerta Diana tendía la cama y mientras lo hacía Akko ya había cerrado la puerta.
Ambas apartaron la mirada de lo avergonzadas que estaban.
-Akko, por que hay muchas chicas vestidas así?.---Dijo Diana un poco extrañada, la ciudad de Japón estaba repleta de personas haciendo cosplay.
-Estan haciendo un cosplay, aquí en Japón nos encanta el anime.---Akko le explico de la forma más entendible ya que Diana nunca había visto un anime.
Se la pasaron bien, Akko llevo a Diana a templos, por el centro, a un restaurante de sushi tradicional.
Diana quedó maravillada al conocer las tradiciones de Japón, quería saber de ese lugar de donde vino su querida japonesa.
Se divirtieron tomando café, Diana negó al ir a un arcade pero Akko insistió y terminaron llendo.
Akko ganó un oso de felpa en la máquina de peluches y de lo regalo a Diana, Diana sonrió por ese pequeño detalle "Se parece al que me regaló mi madre" pensó para si misma, Akko le regaló un detalle único para Diana.
Un regalo que ni siquiera sabe Akko lo importante que es para ella.
Al terminar llegaron nuevamente a la casa de Akko
Mientras que la noche caía, Akko y Diana cenaron con la familia.
Al terminar jugaron todos a juegos de mesa y a ajedrez.
Diana ganó la mayoría de las veses y Akko hizo un puchero al perder nuevamente, todos rieron y ella también río.
-Es divertido estar con ustedes.---Diana sonrió y ambos padres sonrieron.
-¿Te gustaría ver el álbum de Akko?.---La mamá de Akko sonrio y Akko nego rápidamente con su cabeza.
-M-Mama es vergonzoso.---Akko se razco la nuca y una gota de sudor recorrió su frente.
-Me encantaría verlo.---Diana sonrió, la verdad ella tenía curiosidad de como era Akko de pequeña.
La mamá de Akko fue por un pequeño libro, lo abrió y se sentó alado de Diana.
Akko se tapó la cara con sus dos manos y el papá de Akko reía al ver la cara de su hija.
-Esta fue la vez en la que Akko se aventó desde la montaña con una escoba y termino raspandose sus rodillas.---Dijo la señora Kagari mientras señalaba la pequeña foto donde se mostraba a una pequeña Akko con pelo corto y varias raspadas leves en sus rodillas.
Diana se río un poco por lo que dijo la mamá de Akko, ¿la pequeña Akko era igual de como ll esta ahora?
Diana sonrió, Akko era muy linda de pequeña a lo que le dio un halago a Akko.
Esta levanto la mirada y sonrió con pena.
Así se la pasaron toda la noche, contando todas las anécdotas que paso Akko de pequeña y todo lo divertido que fue.
-Diana, espero que puedas venir de nuevo.---La mamá de Akko sonrio a lo que Diana le devolvió la sonrisa.
-Me encantaría señora kagari.---Debe admitir que le encanto estar allí.
-Cuida a Akko esta bien, yo se que esta en buenas manos.---Ambos padres dijeron a la chica rubia, esta se sonrojo pero asistió rápidamente en lo que hacia una reverencia.
-Estara bien conmigo, la cuidaré siempre.---Sonrio y Akko se sonrojo por eso.
Se desearon las buenas noches y todos se fueron a su habitación.
Akko y Diana entraron y se acostaron al mismo tiempo a la cama.
-Te quiero Diana.---Akko miro a su novia y le planto un beso en su mejilla.
Esta se sonrojo y la miro a los ojos, ambas se acercaron poco a poco hasta tocar sus labios.
Un beso dulce y se separaron por falta de aire.
-Regresaremos pronto a Luna Nova, ¿Volverias otra vez aquí?.---Akko miro con dulzura a Diana y esta sonrió también.
-Miestras estés tu, volvería todas las veses que fueran.---Sonrio y abrazo a Akko.
Ambas tenían los ojos pesados, hoy fue un largo día.
Akko cayó dormida en sus brazos y Diana le plantó un beso en la frente.
Mientras acariciaba su pelo, Akko sonrio y Diana cerraba sus ojos lentamente.
Después las caricias se fueron haciendo menos hasta caer dormida, Akko se acomodó y abrazo a Diana de una mejor manera.
-Descansa Akko.---Dijo en susurro a lo que Akko sonrio para si misma y calleron ambas dormidas.
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