Un beso bajo la lluvia [✔]

1. ¿Me estás siguiendo?

Un nuevo año está comenzando y es mi primer año en la Universidad. La verdad es que no estoy muy entusiasmada, estudiar siempre me ha parecido aburrido aunque mantengo unas notas excelentes, pero no me gusta pasarme la vida entre libros de matemática.

Siempre he sido una chica tranquila, me gusta escuchar música o dibujar, pero odio la escuela, eso no va a cambiar. Seguro pensarán que una chica de 19 años debería estar entusiasmada por ir a la Universidad, podría encontrar el amor verdadero, pero yo no creo en esas idioteces, el amor no existe y la escuela es una basura.

—¡Ro, Ro! Despierta dormilona que ya vamos tarde el primer día.

Esa de ahí es mi mejor amiga Clara, la conozco desde los 8 años y desde entonces ha estado conmigo.

—¿¡Qué!? ¿¡Qué hora es!? ¿¡Por qué no me llamaste antes!?

—Tranquila tigresa, que te estoy tomando el pelo, es temprano y todavía tenemos que recoger a Bruni.

Bruno es mi otro mejor amigo, se podría decir que somos hermanos ya que nuestras madres se conocen desde niñas.

—No bromees así C, casi me da un infarto

Mientras busco qué ponerme observo de reojo a mi mejor amiga que está intercambiando mensajitos con alguien.

—Por lo visto a alguien le fue bien durante las vacaciones— bromeo.

—¿Qué? No, para nada. Es mi madre, ya sabes, quiere que compre leche— dice toda colorada.

—Si claaaro— que la compre la que no la conozca.

—Vale, vale, conocí a un chico.

—¡¡¡Lo sabía!!!— chillo muy agudo.

—Hey, tranquila que no te voy a decir nada, por ahora.

—¿Por qué?— pregunto poniendo carita de perrito mojado.

—Porque esta vez quiero que salga bien. Quiero enamorarme Ro. ¿Es mucho pedir?

—Pues no, la verdad es que no— sentencio y es la verdad, Clara se merece lo mejor del mundo.

Bajamos las escaleras y al llegar al final veo a un chico muy guapo, pelo largo y rubio, ojos verdes, alto y un físico que te mueres y sí, es mi mejor amigo.

—Hola Bruni Booh.

—Sabes que odio que me llames así, ¿verdad?— me contesta mientras me abraza.

—Pero si es el apodo más lindo del mundo mundial— le digo mientras le toco la punta de la nariz en un gesto de cariño.

—Vale, vale bombón— desde pequeños me dice así porque soy adicta al chocolate, literalmente.

—¿Ya terminaron? ¿Qué haces aquí? Quedamos en tu casa— reclama mi mejor amiga en un tono, que si no la conociera bien, diría que son celos.

—Mi madre se ofreció a traerme y de paso se queda un rato a charlar con Raquel.

Raquel es mi madre y Vanessa siempre se queda por las mañanas a charlar con ella. La verdad es que son muy buenas amigas.

—¿Nos vamos o piensan quedarse ahí parados?— pregunto cortando la tensión que se ha creado.

—Vamos— responde Clara y Bruno solo asiente.

¿Qué se traen estos dos?

El camino a la universidad transcurre muy silencioso y al llegar todos nos saludan, o más bien saludan a mi mejor amiga. Clara es la típica chica popular, de pelo rubio y corto, bajita, con muuuchas curvas y unos ojos verdes preciosos y ni hablar de su personalidad, es la persona más sociable que conozco.

Seguro se estarán preguntando: ¿cómo puede una chica que recién empieza la Universidad tener semejante popularidad? Les resumiré la historia. Los padres de Clara no trabajan en nada de moda, pero a su madre se le ocurrió la brillante idea de sacar una línea de maquillajes con una de sus amigas, lo que nunca se imaginó es que esa línea se volvería súper popular entre las adolescentes. Así que sí, Clara es la imagen de la línea de su madre, de ahí que sea tan popular.

Por otro lado estoy yo, pelo castaño claro y largo, ojos marrones y un tanto más alta que ella, no tengo el mejor cuerpo del mundo, pero tampoco me quejo y también soy una de las chicas populares gracias a mi mejor amiga.

—Hey Ro, ¿tienes mates a primera hora?— la voz de Bruno me saca de mis pensamientos.

—Ehm sí, ¿tú también?

—Sip, entonces nos vamos juntos ¿no?

—Sí, sí. Nos vemos luego, C— le digo a mi mejor amiga, pero ella sólo sigue su camino y no me responde.

¿Y ahora que mosca le ha picado?

Entramos al salón y ya está casi lleno, así que nos toca sentarnos al final. Cuando la clase está por comenzar, un chico muy guapo entra y dice que se quedó dormido. Lo dejan pasar y se sienta a mi lado.

Después de un tiempo me detengo a mirarlo con detenimiento sin que él lo note, es muy lindo, alto, de pelo negro y ojos marrones. Tiene un cuerpo muy bien trabajado, observo como se tensan los músculos de sus brazos mientras dibuja, tiene unos labios que matan yyyy me atrapa mirándolo.

—¿Te gusta lo que ves?— Diosss tiene la voz más sexy del mundo, es ronca pero dulce a la vez.

—Si te refieres al dibujo que has hecho de la profesora, es un poco infantil ¿no crees?— le respondo con la seguridad que me caracteriza.

Él solo se ríe y vuelve a su dibujo, y les juro que casi me desmayo de la impresión, su sonrisa es muy seductora.

Suena el timbre anunciando el final de la clase, le digo a Bruno que se adelante y cuando volteo el chico ya no está. A dónde habrá ido?. El resto del día transcurre normal, es hora del almuerzo, pero como hoy es el primer día nos han dado el resto de la tarde libre, así que no tenemos clases hasta mañana.

—Hey, ¿quieren ir a ver el partido?

Clara siempre ha sido fan de ver a chicos guapos corriendo detrás de un balón, así que no nos podemos negar.

Aceptamos la invitación y los primeros 45 minutos pasan aburridos, el marcador está 0-0, así que mucha emoción no hay. Aprovecho el descanso y voy a buscar bebidas. Mientras espero alguien se para a mi lado.

—¿Me estás siguiendo?— su voz es inconfundible, es el chico de antes.

—No eres tan importante, la verdad— le respondo.

—Perdón olvidé que eras miss popularidad— dice rodando los ojos.

—Lo que tú digas— tomo las bebidas y vuelvo con mis amigos. De repente, suena mi teléfono anunciando la llegada de una notificación.

unknow: Estás muy guapa hoy, pequeña ;)

No es necesario decir de quién es el sms porque es más que obvio.

YO: no me llames así. ¿Quién te dio mi número?

Él: ¿para qué quieres saber?

YO: es obvio, eres un extraño que tiene mi número. ¿Me estás acosando?

Él: no eres tan importante ;)

Touchée. Al parecer es un poco listo después de todo. Otro sms llega y centro mi atención en la pantalla nuevamente.

Él: ven a la fiesta de mañana si quieres saber quién me dio tu número.

YO: ¿qué fiesta?

Él: Uy, ¿no le avisaron a miss popularidad?

Después de un par de mensajes más el partido finaliza y nos vamos a casa. Por el camino hablo con los chicos sobre la fiesta, es de inicio de curso y quedamos en ir juntos. Clara suena muy entusiasmada, supongo que su chico misterioso irá a esa fiesta, lo que me recuerda a mi chico misterioso, ¿por qué tenía mi número?