𝐡𝐞𝐫𝐞'𝐬 𝐰𝐡𝐞𝐫𝐞 𝐰𝐞 𝐞𝐧𝐝 | 𝐣𝐨𝐧𝐚𝐡 𝐦𝐚𝐫𝐚𝐢𝐬

08 - ,, no estoy sobria

𝟎8,,

𝐢'𝐦 𝐧𝐨𝐭 𝐬𝐨𝐛𝐞𝐫

—Te amo, Elif. Y, suena tan estupido sabiendo que lo puedo perder todo, pero estoy dispuesto a huir contigo.

Sus palabras recorren mi mente, arriba y abajo, de lado a lado, una infinidad de veces. ¿Por qué? Ya me bebí media botella de vodka y aun así no puedo sacar las indecorosas propuestas y el momento tan surrealista que me acaba de suceder de la cabeza. Quiero llorar, beber y escribir sobre ello hasta que mi cerebro esté tan constipado y tan seco que ya no pueda pensar en nada. Pero ni siquiera puedo salir de la bañera

¿Por qué? ¿Por qué diría algo así? Lo odio. Lo odio. Lo amo. Quiero odiarlo y ya no quiero amarlo. Pero no me es posible y solo quiero saber porqué.

Lloro un rato y pronto, estoy dormida. Sus palabras me atormentan en mis sueños también, porque sueño con un recuerdo sepia de nuestras citas y el solo repite sus palabras una y otra vez hasta que me despierto con la respiración agitada y el cuello adolorido por la cerámica del baño.

Ha pasado un rato y es de día. Quiero alcanzar mi teléfono con la mano y después de tirar algunas botellas de acondicionador y unos jabones de lavanda me doy cuenta que no está ahí y que aun estoy un poco ebria. Tomó la botella de vodka y le doy unas vueltas para asegurarme de su contenido: aun tengo media botella que puedo beber para olvidarme de que soy una miserable mujer perdida. ¿Lo hago o me pongo sobria? No lo se, porque si me pongo sobria voy a llorar. Pero si estoy ebria también, así que decido empinarne la botella y acabar con su contenido en dos sorbos grandes.

No estoy sobria y, la verdad, no deseo estarlo por mucho tiempo.