First Kiss || YunSang [Editando]

12. Videogames

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YunHo había perdido por completo la cabeza.

Cuando se dijo que planearía confesar sus sentimientos, en serio pensó en hacer algo memorable para la ocasión. Pero sus impulsos lo llevaron a cometer un error, haciendo trizas su plan y lanzándolo directo a la basura.

Se suponía que MinGi y HongJoong lo ayudaron a conseguir una bonita cafetería cerca de un parque donde llevarlo ese sábado. Sonaba cliché, pero estaba escaso de ideas y lo arruinó en menos de lo que lo planeó. Sólo bastó con una mirada y su cerebro ya había hecho cortocircuito.

Sus nervios sacaron la parte más tonta y descuidada de él, y lo único que pudo pronunciar fue:

“Ven a jugar videojuegos en mi casa el sábado”.

Uh, era tan vergonzoso. Aún se daba golpes en la frente de tan sólo recordar como YeoSang asintió para luego irse con su dongsaeng por el pasillo. YunHo estaba cien por ciento seguro de que nadie era más tonto que él, echando a perder su plan maestro.

Ahora estaba improvisando y eso lo estaba sacando de los nervios. Su hermano mayor estaba en casa, su habitación era un desastre así que tendrían que jugar en la sala, su PlayStation no quería funcionar y tuvo que compartir parte de sus snacks con su hermano para convencerlo de no salir de su habitación hasta que YeoSang se fuera.

Era tanto estrés y presión que YunHo estaba apunto de darse de baja en la vida. Aunque resultara exagerado.

—YunHo, están tocando el timbre... —le avisa su hermano, mirando por un diminuto espacio de la cortina.

—¡¿Qué?! No, todavía no estoy listo... —puchereó, despeinando su cabellera rosa de la frustración.

—¿Por qué no lo llevaste a una cita en vez de traerlo a casa?

—Eso se suponía, pero-

—¿Por qué no le dices que...? ¡Dile que no pueden estar en casa y que mejor vayan a una cafetería! —propone sonriente, haciendo un gesto de superioridad por su brillante idea.

—Gasté mi dinero en los snacks y en un videojuego que creí que le gustaría... —contesta escondiendo su rostro entre sus manos.

El timbre volvió a sonar con su típico «ding dong».

—Joder, eres el peor, en serio.

—¿Crees que no lo sé, WonWoo hyung? —suspira, poniéndose de pie para ir a abrir la puerta.— ¿Qué debería hacer? —se detiene al tomar la perilla.

—Para empezar... —el moreno se agacha donde estaban el montón de cables y el enchufe—. El PlayStation no está conectado y por último, no necesitas hacer algo grande, sólo haz que se divierta.

Tras esas palabras, WonWoo sube las escaleras dándole una palmada de aliento a su hermano menor. Mientras, YunHo trata de peinarse y acomodar su ropa lo mejor que puede, sintiéndose estúpido por no darse cuenta de que la consola estaba desenchufada. Y abrió la puerta justo cuando YeoSang está a centímetros de tocar el timbre por tercera vez.

Luce tierno, su cabello rubio está esponjado y revuelto, sus labios coloreados de rosa, curvados en una sonrisa. Es como un ángel, incluso su floja camisa blanca le daba ese aspecto. Se hace a un lado dejándole pasar.

—Tu casa es muy bonita —elogia sonriente pasando a la sala y sentándose en el sofá mientras el pelirrosa cierra la puerta.

—Gracias, tuve que limpiar y ordenar. Siempre es un caos —contesta tomando asiento al lado del rubio.