La Hipocresía de la sociedad heroica-CANCELADA

Capítulo 25: Salvaré tu alma

Ubicación: Residencia Todoroki

Tiempo: actualidad

Los héroes Tops habían sido invitados a la casa del nuevo número 1 a festejar, increíblemente todos aceptaron. Aunque no iban solos pues llevaban a gente de sus agencias y otros héroes que no ingresaron, pero apoyaban al nuevo top 10.

El pecoso estaba siendo "convencido" por su madre y novia para que cocinara, aunque este no quería porque serian demasiadas personas. Las féminas entonces usaron su carta trampa, Eri.

La pequeña niña se emocionó pensando en comer los exquisitos platillos que prepara su padre y con una hermosa sonrisa que daba diabetes a cualquiera, se lo pidió a su figura paterna.

Sin más opción el chico usaba clones de sombra y su enorme velocidad para empezar a cocinar. Al evento también llegaron el resto de los estudiantes que habían recibido una raíz del guardián. El pecoso le pidió ayuda para que fueran sacando los platillos de la cocina.

Los aspirantes a héroes se coordinaron rápidamente pareciendo integrantes de un restaurante. El ambiente era agradable, todos bebían y comían con grandes sonrisas en su cara.

La noche paso sin inconvenientes, un Enji algo tomado presumía la buena comida que, hacia su hijo, aunque por el alcohol comenzó a hablar de toda su decencia, avergonzando a los 5, pero aun así convivían con los presentes.

Natsuo y Fuyumi trataban de evitar que su padre hablara de más. Miruko además de Hawks molestaban a Touya, el pecoso tomó el puesto de anfitrión procurando que los invitados estuvieran pasando un buen momento.

Eran las 3 de la mañana, los únicos despiertos eran Momo, Shoto e Izuku. El trio estaba limpiando un poco, pues la borrachera se salió un poco de control.

— Bien, esa era la última —. Exclamó Yaoyorozu cerrando una bolsa de basura.

— Me siento demasiado cansado —. Dijo el bicolor sentándose de golpe en el piso.

— Fuimos un restaurante tetera... lo peor es que se acabó todo lo que hice —. Exclamó el pecoso acostado en el tatami con una pequeña toalla blanca tapándole los ojos.

— Aunque al final se descontroló un poco —. Habló la chica recordando un poco.

— Me lo esperaría del viejo... aunque recuérdenme no dejar nuevamente solos a Touya borracho.

— ¿querrás decir a esos 3?, si no hubiéramos detenido a Rumi y Keigo... hubiéramos tenido problemas.

— ¿desde cuándo les hablas por su nombre?, sobre todo a la heroína Miruko —. Exclamó la azabache con su aura tétrica.

— Tra... tranquila amor, fueron ellos quienes me estuvieron insistiendo que les dijera así.

— Más te vale.

— Por ahora vayamos a descansar.

— Pensé que no lo dirías —. Dijo Shoto parándose en dirección a su dormitorio.

— Vamos amor.

— Adelantarte Momo chan, ahorita te alcanzo.

— ¿pasa algo?

— No, solo quiero ver un poco la luna.

— ¿quieres que te acompañe?

— Quizá en otra ocasión, te estas quedando dormida.