Siempre me recalcabas que a tus
34 años, no harías ninguna estupidez, nada que podría lastimarme.
¿Pero me explicas porqué en lo nuestro apareció alguien más?
Todo lo que siempre quise fue una relación normal, de esas que duran más.
Es claro que la edad no condiciona la madurez, pero es claro que solo denota la idiotez.
Te quise amar, no pasar el día desquiciado, te lo repetí de mil maneras lo que no debías hacer, y eso es lo que cometes.
Luego quieres defenderte con tus argumentos machistas, insulsos, te dije adiós porque no quiero volver a saber de ti.
Pensabas que era tonto e inexperto, pero te lo recorde, que a mí jamás me verás llorar.
Creí que sentía cosas por ti, pero la verdad es que me ganó el aburrimiento, pero fue lindo el momento de juego.
Quizás seré egoísta o tú solo un simple traidor, tarde caí en la cuenta de que esto jamás debió haber empezado.
