Quita el polvo - Jenlisa

Capítulo XIV

Lisa entró a regañadientes en la oficina de Chaerin a las 9 am para su sesión. Este fue solo la segunda, la primera fue cuando firmaron todos esos papeles. No estaba segura de qué esperar, y su estómago estaba atascado en todo tipo de nudos. Para su absoluta sorpresa, el coche de Jennie estaba en el aparcamiento. De alguna manera, ella había llegado aquí primero, y Lisa ni siquiera llegaba tarde.

Cuando Lisa entró en la habitación, un joven levantó la vista desde un escritorio. "Ah, la señorita Lee te está esperando", dijo, poniéndose de pie y sonriendo amablemente. Le hizo un gesto para que lo siguiera, así que ella lo hizo, y abrió una puerta al final del pasillo. Ella le asintió con la cabeza y entró.

Chaerin se sentó tranquilamente en su silla, con las manos juntas y los hombros hacia abajo. Su cabello estaba recogido en un moño esta vez, y por primera vez desde su extraño encuentro, Lisa se dio cuenta de que en realidad era realmente atractiva. El calor llenó sus mejillas y apartó la vista de la mirada emocionada de Chaerin. Jennie también estaba sentada, frente a Chaerin, pero sus ojos estaban hacia abajo. Lisa se sentó a su lado.

"Buenos días, Lisa," la saludó Chaerin, sonriendo ampliamente. "Espero que hoy se haya despertado de buen humor".

Ella no lo había hecho. Pero ella no lo dijo y se limitó a encogerse de hombros. "¿Entonces, qué hacemos ahora?"

Chaerin exhaló un suspiro y agarró un grueso cuaderno de la mesa a su lado. Se tomó un tiempo para hojearlo, leyendo algo. Un reloj en la pared hizo tictac ruidosamente.

Tic, tic, tic.

Lisa se estaba molestando.

"Antes de explicar el alcance del paso 4, me gustaría que compartiéramos sus sentimientos". Cerró el libro con una fuerte bofetada de entusiasmo. "Jennie, ¿hay algo que te gustaría compartir? ¿Has aprendido algo desde el paso 1?"

Jennie saltó al oír su nombre. Lisa se dio cuenta de que no quería estar allí en absoluto, y sintió un poco de lástima por un segundo hasta que se desvaneció. Todavía estaba enojada con Jennie.

"Um, realmente no ..." suspiró. Sus hombros estaban hundidos y había círculos oscuros debajo de sus ojos que ni siquiera su costoso maquillaje podía ocultar. Lisa se preguntó por qué no dormía bien. El trabajo generalmente la mantenía despierta hasta tarde, y se ocupaba de contratos, propuestas y documentos del personal. Seguramente no fue su matrimonio fallido lo que causó su falta de sueño.

"Continúa", instó Chaerin. "Todo lo que quieras hacer notar. Puede ser bueno o malo. Quiero que este sea un lugar seguro para las dos. No podemos esperar que el paso 4 vaya bien si no lo hacemos ahora. Así que ve adelante, sácalo. Cualquier cosa atascada allí, expúlsalo ".

Jennie levantó la cara. Sus ojos parecían más amoratados de lo que Lisa se dio cuenta. "Estoy increíblemente cansado en este momento y realmente no estoy de humor para esto".

Chaerin asintió. "Eso es un comienzo. ¿Le gustaría compartir qué causó su cansancio y su estado de ánimo?"

Lisa resopló. Ambas se volvieron para mirarla, los ojos de Chaerin llenos de expectación y los de Jennie una mirada furiosa.

"¿Oh, Lisa?" Le preguntó Chaerin.

Lisa se aclaró la garganta. "Probablemente sea solo trabajo", decidió quedarse. "Trabajo y más trabajo".

Chaerin miró a Jennie, pero Jennie no apartó la mirada. La mirada tormentosa en sus ojos puso nerviosa a Lisa. Odiaba el temperamento de Jennie, especialmente cuando estaba dirigido a ella. "Mi padre estaba en el hospital", le dijo Jennie en voz baja. Se pasó una mano por la cara. "Se cayó por la borda de su bote y su personal solo se dio cuenta una hora después. Les tomó un día encontrarlo y otro día para que se despertara".