CRUZADOS II

EPILOGO - Parte B

Parte B

El plan lo habían armado Gabriel y Paloma, por eso ahora iban todos montados sobre bicicletas, paseando por el pueblo.

A la bicicleta de Eugenio le instalaron una sillita en el respaldo para que Mateo se sentara y el niño iba feliz de la vida.

Casualmente, Eugenio y Macarena iban juntos, mientras que los muchachos se habían adelantado.

Mat: ¡Más rápido, papi! ¡Rápido!

Macarena rió, pero su marido se las cobraría.

Eu: ni tú me pides que sea tan rápido...

Ma: ¡Eugenio!

Mat: ¿qué pasó, mami? (Riendo pues su papá hizo un giro acercándose más a la bicicleta de su mamá)

Se detuvieron y terminaron los 3 riendo... Sin aparente motivos... Pero para ellos, todo era un motivo para ser felices...

Ma: tu papá está loco, mi amor....

Mat: papá loco...

Eu: ¿cómo que loco, eh??

Se ubicaron de tal forma que sin bajarse de las bicicletas, Macarena sacó las botellas de agua y las repartió para su marido y su hijito.

5 minutos después, Gabriel y Paloma regresaban por ellos...

Ga: ya tenemos hambre...

Ma: vamos a comer, ¿no...?

Tan normal como extender una especie de manta sobre el césped y todos se sentaron en torno a ella para comer, en el parque principal del pueblo.

Y sí, muchas personas que pasaron reconocieron más que nada a Macarena y a Paloma, y la mayoría los saludaron...

Se levantaron a jugar con un balón, pero Eugenio y Macarena fueron los primeros en sentarse bajo un árbol... Ella recostada en él, siendo envuelta por sus brazos.

Ma: ¿hmmm...? (Sintiendo los labios de su marido en la mejilla y en el cuello, se abrazó a sus antebrazos)

Eu: ¿sabes algo...?

Ma: ¿qué...?

Eu: te quiero...

Ma: y yo te quiero a ti...

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Por la noche...

Mateo jugaba con sus hermanos y Rufi en la sala, cuando sus padres bajaron listos para... ¿Salir...?

Mat: Papi, mami... ¿se van...?

Eu: sí, jovencito...

Mat: ¿dónde?? (Bajándose del sillón para ir con ellos)

Paloma, Gabriel y Rufi se contuvieron de reír.

Ma: unos amigos nos invitaron a cenar... Camila y Orlando, ¿los recuerdas...?

Mat: no mami...

Eu: no importa, mi amor... Te quedarás con Rufi y tus hermanos, ¿eh...? Dame un beso...

Ma: te diviertes mucho, mi vida...

Mat: pero... Yo quiero ir, mami...

Los hermanos al rescate...

Ga: te vas a divertir más con nosotros, chaparro... Vamos a seguir jugando...

Pa: vamos a hacer palomitas y a comer helado... Ándale, quédate...