Poemas de un Alma Rota

Fallen angel

Ángel:
Soy un ángel caido.
¡Saludos! mi nombre es Luzbel,
Tengo el alma destruida,
y una actitud fría y cruel.

Tirado en el suelo me hallo.
He tenido que caer desde muy alto
para darme cuenta de lo poco que valgo...
Ya que sólo porto un insensible corazón helado.

No te quedes a mi lado
por compasión.
No cometas el error
de enamorarte de esta alma errante.

Un alma que merece el infierno de Dante.
Un alma que no merece ni ser amante
ni ser querido.

Ya que su cora herido
es más feliz libre y solo
que mal guardado
en el cajón de otro.

Isabella:
Oscuras son tus alas
y cabizbaja tu mirada.
Tu piel está toda lastimada,
y no se refleja alegría en tu cara...

¿Por qué estás todo herido?
¿Por qué está tu corazón siempre frío?
¿De dónde has salido?
¿Desde dónde has caído?

Déjame ayudarte a que no estés tan perdido,
a construir a tu alrededor un nido
que forme un muro contra este mundo hostil y cruel,
donde todo se compra con un papel.

Un papel donde jamás se ha escrito poesía,
pues es un papel manchado de sangre,
plasmado de hambre,
que se clava como las púas de alambre
en la cabeza de los hombres

Ángel:
¡Detente! no necesito tu ayuda,
tu no conoces mi realidad cruda.

Escapé del lugar más hermoso que te puedas imaginar,
un paraiso donde todos "viven en paz",
¡Que hipócritas! si supieran cual es la verdadera realidad.

Imagina un mundo donde no te puedes equivocar,
ni aunque quisieras,
de ahí vengo yo, aunque no me creas,
donde los ángeles podemos libremente volar,
donde no hay límite que separé sueño de realidad...

Donde no te cuesta nada triunfar
pierdes el valor de aprender de fracasar.
Todo parece simple y nada te cuesta trabajo.
Y como todo es bueno,
con nada malo lo puedes comparar,
y así es como se vuelve banal.

Aquí... en la Tierra,
lo ven todo desde un punto distinto,
porque tienen límites que superar,
tienen islas de Sabina para naufragar,
tienen canciones y barras de bar,
tienen el poder de permitirse pecar.

He caido aquí
porque así me puedo corromper
y con otros ojos las cosas ver.

Así que... ¡huye!
¡y no mires atrás!

Nada bueno hay
en esta alma rota
que muere por tu boca.

Nada bueno hay
en este ángel caido
que desangra tinta a gotas.

✒ 𝕻𝖔𝖊𝖙𝖆 𝘼𝖑𝖒𝖆 𝕽𝖔𝖙𝖆 & 𝕮𝖔𝖑𝖔𝖘𝖔 𝕽𝖔𝖉𝖆𝖘