El chico.

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Al entrar a mi mail, me doy cuenta de que tengo mensajes nuevos de Laia.

"¿Que tal la vida por Los Ángeles?"

Contesto.

"Buenas nuevas"

Pocos minutos después, responde.

"CUENTA YA."

"Nuevo trabajo"

"¿En...?"

"Phillip's M. M. Coffe"

"¿Mesera?"

"No precisamente..."

"¿Entonces...?"

"Amm, tu sabes"

No le escribo "Cantando", porque aún se me hace raro el decirlo. Al leer mi nuevo mensaje, me deja muy en claro que lo captó.

"NO. ME. JODAS."

"Hey, señorita educada"

"ESO NO IMPORTA AHORA, __________. ¿ES ENSERIO?"

"Ajá."

"¿CANTAS? OMG. PUEDES LLEGAR MUY LEJOS AHÍ, ALLY MOURET, OMG."

"Hey, si alcanzo a leer. Existen las minúsculas"

"Bueno, bueno. ¿Y que tal el novio?"

"Nada."

"¿Algún famoso? Si me dices que no, no te creo, es L.A."

"Josh Hutcherson."

Y así, regresan las mayúsculas.

"OMG OMG OMG OMG. FOTOS, A-HO-RA."

"No tengo."

"¿Como que no tienes?"

"Solo lo he visto en Phillip's, Laia. No es como que me baje del escenario a verlo sin mas. Lo único que he recibido de él son gritos y un beso soplado, hasta ahí."

"Carajo, que suertuda. Y por cierto, yo me hubiera bajado del escenario a ver a ese dios griego de cerca, y hasta más."

"Si, bueno..."

"Si lo ves de nuevo, quiero mi autógrafo, gracias."

"Si lo veo de nuevo, solo pediré para mi."

"Mouret."

No se como logra reprocharme hasta por mail.

"Okay."

"Así me gusta."

"Bueno. Nights, Laia."

"Nights, __________."

Cerré mi laptop y terminé de un trago lo que quedaba de mi té verde. Luego, fui a dormir. Y en mis sueños, solo encontraba a Josh Hutcherson.

Hoy, como Cath está enferma y por ello no pudo venir, regreso sola al departamento. Por lo que me pongo mis Ray-Ban, auriculares y subo el volumen de la música a tope. Meto las manos en los bolsillos de mi sudadera y camino despacio, sumergida en lo que escucho y poniendo fija atención a lo que me rodea. Ni aunque llegara alguien a gritarme al oído lo podría escuchar, de eso estoy consciente. Y así sigo mi tranquilo recorrido. Pero, como siempre se tiene que arruinar todo, caigo de frente al piso, porque una persona bastante distraída chocó conmigo por detrás.

El dolor es instantáneo.

-¡Serás estúpido, hijo de...!. -le grito al chico que me tiró.

-Lo siento, lo siento, lo siento. -me interrumpe, aunque no tengo idea de quien me interrumpe, ya que justó detrás de él está el sol que me ciega por unos momentos al tratar de mirarle.

-¿Que te...?. -empiezo.

-Solo ven. -me interrumpe de nuevo, levantándome con una evidente prisa, para luego escondernos en unos arbustos. No entiendo ¡¿Que le pasa?!.

Él se gira, viendo entre las hojas a lo que sea de lo que estaba corriendo. Escucho gritos, de chicas mas que nada. Al abrirme vista en el arbusto, veo que un muy buen grupo de gente, chicas eufóricas y paparazzis, corren en la dirección en la que el chico corría.

¿Quien es el? ¿Porque lo siguen? Trato de verle la cara, pero no puedo, ya que la tiene metida en el arbusto. Una escena bastante cómica, pero retengo mi risa. Quito de mis pensamientos ese tema, para concentrarme en mis rodillas raspadas, las cuales ya empiezan a sangrar. Genial, qué suerte. El chico suspira aliviado.

-Ya han pasado. -dice, mirando aún entre los arbustos, para sacar su cabeza de ahí y dirigir su mirada hacia mi y a mis rodillas, dejándome ver su rostro, por fin.

No me lo puedo creer. Josh Hutcherson.

"El chico" ahora tiene nombre, y es... Josh Hutcherson.

En los brazos de Josh HutchersonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora