En los brazos de Josh Hutcherson

¿Princesa?

-Creo que me debería ir ya. -le digo a Josh, levantándome.

-Oh, espera -dice, levantándose y sacando su celular- Tomemonos una foto. -me sonríe.

-Claro. -respondo.

Toma la foto.

-Los chicos me van a envidiar de que conocí a la princesa del Phillip's. -dice, mirándola.

-Ehh... no creo ser una princesa. -le digo.

-Si que lo eres. Por eso te llamamos asi, de echo, por eso vamos al Phillip's tan seguido. Nunca antes habiamos visto a alguien tan buena en lo que hace ahí. Asi que, por eso te pusimos así.

Siento que mis mejillas arden. En cualquier momento se van a quemar. "La princesa del Phillip's", no pensé que el grupo de amigos de Josh (¡Y Josh!) me llamara así.

Después guarda su celular en el bolsillo de su abrigo. Saco mi celular también.

-Qué lindo fondo tienes. -me dice, viendo la pantalla de mi celular.

Porque claro, tengo un collage en blanco y negro con fotos de Cath y yo, asi como de Laia y yo, por qué no, haciendo muecas bastante ridículas.

-Ah, si, vaya... -le digo apenada de que haya visto tales fotos de mi.

-¿Quienes son?. -me pregunta.

-Ella -digo refiriéndome en las fotos que tengo con Laia-, es Laia, mi mejor amiga de toda la vida. Eras su amor de pequeña. -omito el decirle "Eras nuestro amor de pequeñas, y mío todavía, de echo, Joshua, tengo pósters tuyos guardados en un estuche. Ni creas que los traje a Los Ángeles y que pensé en ellos para adornar mi departamento, no, ni creas..." Nótese el sarcasmo.

-¿En serio?. -pregunta con una sonrisa.

-Little Manhattan. -digo en respuesta.

-¿Y que tal tu? ¿No era tu amor de niña?.

«¡Si, Josh! ¡Y lo sigues siendo!».

-Amm, esteee... Y Cath es linda, vaya que lo es. -tartamudeo, nerviosa.

Él ensancha mas su sonrisa, pero no insiste.

-¿Ella?. -dice apuntando a Cath, haciéndose el tonto conmigo, siguiéndome el juego.

-Es mi vecina de enfrente, y mi única amiga en Los Ángeles, realmente. Va a mi misma universidad. -explico.

-¿Universitaria, eh? -me dice.

Bien, no se como interpretar eso.

-Si. -respondo solamente.

Después, nos tomamos la foto. Sé que tengo que hacer algo, pero no recuerdo qué... ¡AH! ¡Laia! Estaba tan distraída en él (¿y como no hacerlo?) que se me olvidó por completo el autógrafo de Laia.

-Por cierto, Laia me pidió tu autógrafo, ¿podrías?. -le pregunto.

-¡Claro!. -responde. Le extiendo un cuaderno abierto en una hoja al azar y un bolígrafo. Cuando termina, me devuelve ambas cosas.

-Gracias. -le digo con una sonrisa.

-Gracias a ti, por no delatarme a esos que me perseguían. -dice con humor. Río.

-No es nada.

Nos miramos. Cada vez al verle, caigo en un estado hipnótico, incapaz de apartarle los ojos. Él pone uno de mis mechones detrás de mi oreja, viéndome directamente.

-Te veo en la noche, __________. -me dice bajito. Su cálido aliento me llega en la cara.

-Te veo en la noche, Josh. -repito sus palabras.

Abro la puerta, lanzo mi mochila lejos y me tumbo en un sofá. En todo el camino no pude parar de pensar en Josh, de echo, se ha vuelto mi actividad favorita. Saco de mi mochila el cuaderno que firmó Josh. Lo hojeo, ya que no me fijé en que página se lo entregué.

Encuentro la hoja. Está divida en dos, de manera irregular, leo la parte de arriba, la más pequeña.

"Gracias por el apoyo, Laia! :) -Josh"

Y luego la de abajo, donde hay mas texto.

"__________:

Yo sé que no me pediste firma para ti, pero igual te escribo. Muchas gracias por no delatarme ante todos ellos, de verdad. Tienes una voz linda, potente, mágica, te entregas al público y eso es de admirar, sigue tus sueños, princesa de Phillip's. Ahí me tendrás a diario escuchándote. Por cierto, tus ojos son preciosos, lo vi. Por eso te miraba tanto, porque es imposible no hacerlo :).

Pd: Siento haberte lastimado. -Josh"

Wow. Él se fijó en mis ojos. Él me dijo de nuevo "Princesa de Phillip's". Ay, él. En cualquier momento me va a derretir. Si tan solo supiera que también miraba sus ojos.

Recorto la hoja, dividiendo la parte de Laia con la mía. Guardo mi pedazo entre las hojas de mi libro favorito. En lugar mas seguro y cuidado no podría estar.

Tomo foto del pedazo de Laia y se lo mando por correo.

"Hey, ámame"

Y adjunté la foto para después mandarlo. No tardó mucho en llegarme una respuesta.

"¡NO JODAS, __________! ¡Te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo!"

"Me debes una, Laia."

"¡Te debo las que quieras!"

Río.

"Te quiero :)." le escribí.

Y cerré mi laptop. Fui a la cocina y me serví un vaso de agua, aún pensando en todo lo que pasó hoy. Luego, fui rápidamente a ducharme, peinarme y cambiarme para ir a otra de mis tantas noches de luces y música.

Como mi rodilla está aún raspada y duele el ponerme unos jeans, opté por enrollarla con una venda y ponerme un vestido de brillos rojos corto. Lo acompañé con unas botas negras altas y me acomodé el cabello en un moño. Marcus, como a diario, me presenta. Y antes de pasar al frente vi el lugar habitual que toman Josh y sus amigos. Ahí están, y ellos ya me miran de lejos. Les saludo agitando la mano y hacen lo mismo animadamente.

Josh ya se ha dado cuenta de mi venda, por lo que frunce el ceño y me señala mi rodilla. Asiento en respuesta. Él hace una mueca.

Toca salir al centro. La música empieza a sonar.

Mientras canto, veo que reemplaza su sombría expresión y ahora sonríe alegremente. Pude ver sus ojos brillar, la felicidad encendida en ellos.