stream thunderous
Al abrir los ojos se dio cuenta que estaba en una elegante habitación, acostado en una cama suave y cubierto por las más finas sábanas. El aroma en la almohada le hizo recordar instantáneamente al hombre de sus sueños.
—Ya has despertado —la hermosa voz de Hyunjin hizo que levantara levemente la cabeza para ver como se acercaba hacía él.
—¿Q-Qué pasó después de...? —preguntó tímido cuando Hyunjin se había posado sobre él, con sus rostros muy cerca. Hyunjin le interrumpió con un beso.
—Siento que pasó una eternidad de la última vez que probé tus labios —Seungmin sonrió y pasó los brazos por el cuello del azabache para volver a juntar sus belfos. Era un beso apasionado y lleno de sentimientos, ambos sabían que querían recuperar todo el tiempo perdido.
Pero un toque en la puerta les interrumpió.
—Príncipe, si el joven Kim ya ha despertado, por favor bajen al vestíbulo, el hechicero Changbin les llama.
Hyunjin bufó.
—Te prometo que no te escaparás la próxima vez —le giñó un ojo y dejó besito rápido en los labios esponjosos de Seungmin. Este se rió con un notable sonrojo en sus mejillas.
Después de que Hyunjin le ayudara a alistarse, bajaron tomados de la mano hacia la sala principal, donde todos les esperaban.
Después de la confrontación con Yurim, Changbin se había encargado de toda la magia obscura que dejó la varita de Soobin, también de enviar muy lejos a la bruja para que no volviese nunca, sin embargo, todo esto le había dejado agotado en demasía por lo que caminar o moverse se había convertido en un desafío. Ahora estaba sentado como un rey -como él mismo se llamó- alegando que se lo merecía.
Jisung y Minho aún se mantenían un poco alejados, no sabían cómo Chan se tomaría la noticia de que Jisung quería romper el matrimonio con el príncipe y tampoco el saber que los padres de este habían facilitado a la bruja llegar hasta ellos.
—Me encantaría poder ayudarte con todo lo que traes en este momento, pero me temo que si exijo algo más a mi varita, ella me matará —dijo Changbin al ver a Seungmin. No era secreto que al enfrentar a la bruja había salido herido, aún tenía algunos pequeños cortes en su rostro y sus manos estaban vendadas por completo.
—Sanará poco a poco —tranquilizó.
Todos hablaban amenamente, un poco indecisos en tocar los temas principales, pero unas escandalosas voces les hizo aminorar la tensión.
Por las grandes puertas del salón entraron cuatro hechiceras y una de ellas tenía a un pequeño bulto en sus brazos cubierto de mantas.
A Seungmin le picaron las manos por querer abrazarlo de inmediato. Hyunjin miraba hipnotizado.
La pelirroja, Sooyoung, se acercó hasta ellos y dejó al bebé en los brazos del rubio.
—El pequeño príncipe está sano y salvo —susurró a los padres.
—Gracias por cuidar de él —ijo Changbin.
—No fue nada y casi creemos que no necesitaba de nosotras, el hechizo que pusiste sobre él era incluso más fuerte que el que protege a este castillo o al mismo rey —la pelinegra, Yujin, agregó.
Un carraspeo hizo que el silencio cayera.
—Seungmin... Hyunjin... ¿qué? —el rey Chan estaba estupefacto.
—Yo, bueno... —comenzó Seungmin.
—Es nuestro hijo, Chan —interrumpió Hyunjin seguro, aquel bebé era una copia exacta de él.
Después de escuchar aquello Chan tuvo que sentarse en el trono, todos le miraban expectantes por una respuesta, pero la sonrisa y los ojos acuosos les dijo que estaba más que feliz, luego caminó hacia ellos y tomó al niño en sus propios brazos mirándole con adoración.
—Será la nueva luz del reino.
Todos vitorearon felices, al fin podían vivir en paz. Seungmin veía como todos se reunían para ver a Hyungwoo y ya esperaba todo el alboroto que iba a haber luego de que los recién casados anulen su voto y de que resulte el hijo perdido del príncipe más joven.
—¿En qué piensas, amor mío? —los brazos de Hyunjin le rodearon.
—Ya podremos ser felices ¿verdad?
—Eso no lo dudes, no volveré a irme, nunca.
Unieron su promesa con un dulce beso que no pasó desapercibido por nadie, pero decidieron no interrumpir aquel momento de felicidad.
Y fue así, en los próximos días se anunció a todo el reino la causa del matrimonio entre Han Jisung y el príncipe Hyunjin, por lo que no fue difícil el que los súbditos aceptaran que no serían un matrimonio. Minho naturalmente aprovechó aquello para pedir oficialmente la mano de Jisung siendo bendecidos por el propio rey Chan.
La boda de Hyunjin y Seungmin fue una semanas después en los que la música alegre inundaba las paredes del castillo y las bendiciones y regalos llovían para el príncipe más Joven, Hwang Hyungwoo.
Las sorpresas no dejaban de llegar, como cuando un desvergonzado Chan comentó en la cena que Jeongin iba a ser el próximo rey, todos se paralizaron y Jeongin parecía un tomate.
La vida en el castillo por fin volvía a ser tranquila y Seungmin nunca más quiso volver a su anterior vida, amaba a todos los que le rodeaban y nunca reemplazaría el dulce calor de los brazos de Hyunjin ni el dulce aroma de su hijo que crecía día a día.
—¿A dónde vas amor? —pregunta Hyunjin acostado con su hijo en la mitad de la cama matrimonial.
—Iré a la biblioteca un rato —el rubio asiente y Seungmin sale de la habitación.
Aquel día era realmente tranquilo, los guardias estaban entrenando en el jardín trasero y los sirvientes debían estar preparando la cena. Miró los pasillos con detenimiento, aún quedaban indicios de la presencia de Yurim, pero los obreros reales se empeñaron en no dejar rastro.
Cuando llegó a las grandes puertas de la biblioteca, empujó estas y entró, este era su lugar favorito en el castillo, le encantaba leer todo lo que encontraba a su paso y el silencio de aquella sala le permitía relajarse y pensar.
Caminó entre los grandes pasillos, subió y bajó aquellas escaleras que le permitían alcanzar los libros más altos hasta que encontró uno particular.
My universe.
Abrió los ojos desmesuradamente ¡Estaba ahí! ojeó las páginas dándose cuenta que el libro estaba completo y en perfecto estado, incluso habían imágenes.
Ese era... ¡Hyunjin y él !
Rápidamente buscó la última hoja.
S. C.
—No te preocupes por el libro, esta vez me he asegurado de guardarlo muy bien.
Seungmin giró la mirada a donde provenía aquella voz.
Changbin sonrió mostrando sus blancos dientes.
—Eres el Seungmin de este mundo.
F I N
muchas gracias a txecute por dejarme adaptar esta historia y gracias a ustedes por acompañarme en una adaptación más, nos estamos leyendo, besos.
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Soy el Seungmin de este mundo - Hyunmin
Fiksi Penggemar¡¿Dónde estaba Seungmin?! ¡Ese no era Seúl! Donde Seungmin tendrá que vivir en un mundo diferente ¡Dentro de una novela romántica! ↬ adaptación AUTORIZADA. ↬ historia original de: @txecute ↬ contenido homosexual ↬ m-preg ↬ portada por @Mo_chu12♡ #현...