¿¡Somos Padres?! 🌸SEBACIEL (PAUSADA)

Ciel

Un chico joven, hermoso y brillante. Con una piel suave, tersa y blanquecina, con unos ojos azules los cual cautivan a cualquiera.

Bueno,un ojo azul y el contrario el cual se encontraba bajo un parche de cuero,aquel iris de el color carmesi mas intenso que podrias imaginar, cubierto con un pentagrama demoníaco.

Ese era Ciel Michaelis.

Un joven de 26 años el cual siempre mostraba un porte elegante y sofisticado ante la sociedad ya que el y su apellido eran importantes. Bueno, su apellido antes de casarse.

-Cariño ¿Estas bien? Te noto pensativo ¿Es por los niños? -La voz de su esposo le hizo salir de su pensamientos y dirigirle la mirada a este

-Estoy bien, solo pienso... hace años que no viajamos tan lejos de casa y bueno igualmente hace años no veo a Alois Tracy - El pronunciar aquel nombre solo le lleno de repulsión en ese momento, cuanto lo odiaba

-Supongo que debes estar entusiasmado de verlo ¿No? - Pregunto Sebastian luego de sentarse junto a su esposo y darle cariño en la cabeza

-Si, muy emocionante - Dijo con un tono algo agrio el cual pasó desapercibido por su  esposo demonio

-Realmente espero que los niños esten haciendo bien las cosas y que esten respetando sus horarios y deberes - Dijo el ex-mayordomo

-Si claro, estan muy bien solos - Hablo Ciel con una leve sonrisa, recordando cosas de su pasado

-¿En que estas pensando mi pequeño demon? - Su tono meloso de Sebastián solo lo hizo sonreír y recostarse en el hombro de el mayor

-Nada en especial, divago entre mis pensamientos..

-Eso me suena a que estas pensando en otro ¿Es eso? - Dijo con tono de diversión

-Claro, estoy pensando en un demonio alto, guapo, de cabello azabache, ojos encantadores, con cuerpo de mil demonios y que tiene una mordida en su mano - Prosiguió a morder la mano de su amado y reir levemente

-Eres un demonio - Dijo divertido mientras negaba

-Demonios ¿Te gusta hacer esos chistes tan demoniacos, verdad?

-Diablos ¿Como lo sabes? - Dijo siguiéndole el juego a su esposo

-Un diablito me lo dijo - Terminó dando una carcajada al igual que Sebastián, para luego besar sus labios cortamente

-Conde, hemos llegado-Anuncio el conductor de el carruaje

-Bueno... es hora de ir con Alois-Suspiro y su semblante cambio a uno serio. No le agradaba estar con aquel estupido chico

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-¡Mi amigo! ¿¡Como has estado todo este tiempo?! - Exclamo con un tono de alegria el rubio

-Eh estado bien ¿Y tus hijos? - Su semblante serio pero sereno no era raro en el

-Uh...mi linda princesa esta con su prometido - Sonrió y abrazo por el cuello a Ciel mientras caminaban

Ciel estaba incomodo

-¿Y Alexander? ¿Donde esta el? - Su voz cambio a una dura, causando que el contrario se tensara

-Debe estar por ahi... jugando - Su voz salió temblorosa y se aparto

Sebastián habia ido a su habitación de estancia por petición de su esposo, se quedo ahi. Caminaron hacía el despacho de el rubio y por sopresa se encontraron con el demonio Claude

-Conde... - Dijo mirando sorprendido a este

-Claude.. - Saludo cordialmente Ciel, dando una leve reverencia