—Es por aquí, mi original y las niñas están detrás de aquel bulto de piedras –Gin se giró a Sasuke y le sonrio con confianza —el original esta con su hija.
Sin decir más, Sasuke salió corriendo para donde el clon del albino le dijo que se encontraba su hija.
Los gritos de una mujer lo pusieron en alerta y preparando el Chidori de su mano, se acercó hasta el origen de los gritos.—¿Qué carajo? –preguntó Sasuke llamando la atención de las presentes.
—¡Uchiha-san! –se alegro Gin al ver la amargada silueta del pelinegro —¡Que bueno que mi clon llegó a Kono- HA!.
—Cállate Gin, por dios cállate, cállate, cállate, ¡cállate! –Yukari tenía lágrimas en sus ojos y lo veía amenazante, aún con su mano pálida entre las suyas.
—¡Dada! –la voz chillona de Satsuki llamando a su progenitor lo sacó de sus pensamientos y el Uchiha corrió hasta donde la menor estaba, en brazos de otra de las niñas que estaban ahí.
—Mi hija... mi niña –Sasuke sentía que podía volver a respirar, como si de su pecho se hubiera liberado una piedra que oprimía sus pulmones y de su corazón una neblina pesada que no le dejaba ver el camino. Abrazo con un poco más de fuerza a su azabache y beso su coronilla mientras que la niña lloraba por el consuelo de ver a su padre —mi luz... –Sasuke la separon un poco de su cuerpo para tomarla del rostro y checarla —¿no te paso nada mi cielo? ¿Te hicieron algo?
—Por dios... –Naruto abrió los ojos al ver todas las niñas reunidas cuando se acercó al Uchiha.
—¡Es Naruto-sama! –chilló de alegría una de ellas levantándose del suelo —¡Él y Uchiha-sama han venido a nuestro rescate! –las niñas comenzaron a acercarse al Uzumaki y abrazarlo, unas llorando de felicidad y otras sonriendo de alivio.
—También el jefe de la policía de Konoha y el jefe de Raíz vinieron, ¡Yupi! –dijo Kiba con sarcasmo para luego quejarse por la mordida que recibió de su prima Yukari, quien estaba dando a luz —¡Auch!
—Siento la demora niñas –habló Naruto con el corazón —lamento que hayan tenido que pasar por un tormento... pero les aseguro que ya pasó... nosotros hemos venido por ustedes y les aseguro que ya no volverán a experimentar un dolor como el de ahora.
Sasuke hacía oídos sordos a lo que su mejor amigo decía, él solo se concentraba en darle amor a su hija y la protección que necesitaba sentir. Habían sido unas horas de agonía para toda su familia y ahora que podía abrazar a su pequeña princesa, sentía la inmensa necesidad de mandar todo a la mierda y llevársela de ahí, sin importarle su deber como ninja o el título de Sasaukage.
Pero algo en su inconsciente, una pequeña parte de él le gritaba que muchos padres estaban en la misma situación que él y su familia, que alguno estaban peor pues tenían más tiempo de no ver a sus hijas y...-—¿Son todas? –Sasuke se dirigió a una de las niñas que no estaba llorando.
—Eramos más –le dijo la jovencita —había unas señoritas que habían llegado antes de mi.
—Y de mi –otra tomo su mano —pero se las llevan... no sé a dónde pero ya-ya no las volvemos a ver –la joven se limpió las lágrimas de sus ojos —nosotras eramos las siguientes...
—¿Les hicieron algo? –preguntó Sasuke con miedo de saber la respuesta.
—Nos llevaban a una habitación...
—Nos hacían quitar la ropa que teníamos y nos obligaban a ponernos estos vestidos feos –la niña apunto un pedazo de tela mal cortado.
—Nos ponían precios Uchiha-sama.
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Far from home; una historia de Luz de Luciérnaga.
FanfictionPor una travesura, Uchiha Hideki y Uzumaki Boruto abren un portal que no hará más que darles dolor de cabeza a los adultos. ¡Aclaró! Esta historia está inspirada en la teoría del multiverso. Habrá algunas incongruencias con la línea de Boruto y Naru...