Omegaverse

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Inquieto

Esa era la palabra que describía a Volkov en estos momentos, su alfa interior luchando con la cordura de Volkov, sentia a su Omega llamarlo

Quizas estaban a kilometros de diferencia pero juraba que podia oler su dulce aroma, flores frescas de una primavera que recien comenzaba, ese era el aroma que su omega tenia, pero por mas que la conexión estuviese allí seguian sin ser pareja, por desicion de el mismo

— ¿Volkov? — Hablo Conway, un beta con suave olor a café, extrañado por la actitud inquieta del peligris, no era usual que su comisario actuara de esa forma — ¿Que pasa?

— Mi omega... — Hablo su alfa, ya no se podia controlar, la poca conciencia que quedaba de el mismo se dedicaba a quedarse en el lugar que estaba, no dar ni un paso, no ir a buscar el aroma que llevaba semanas queriendo sentir cerca

— Volkov — Le hablo con seriedad — Ve con el — le autorizo, solo quedaba que el mismo Volkov aceptara pasar el Celo de su Omega juntos. Asintio con la cabeza, saliendo de comisaria con prisa, ni siquiera se molesto en salir de servicio, tomo las llaves de su patrulla y conducio por las calles de Los Santos, guiado por el aroma que sentia tan cerca pero tan lejos

Y llego, finalmente llego, estaba en las afueras del hogar de Horacio, sus pupilas estaban dilatadas percibiendo la bomba de olor que sentia, pero se apresuro, cualquier alfa era capaz de irrumpir aquella casa con tal de poseer a aquel omega, sabia que el no se dejaria y a pesar de ser un omega tenia una fuerza y caracter diferente a los de otros simples omegas

Sabia exactamente donde guardaba la llave de repuesto, no era primera vez que entraria a su casa de esa manera, abrio la puerta, despacio para no alarmar al chico que estaba dentro

Cerro la puerta, guardando la llave en su bolsillo, la casa estaba en completa oscuridad, las cortinas cerradas y todas las luces apagadas, recien eran las 12:00 de la tarde, su Omega ni siquiera era capaz de levantarse

Unos quejidos se escucharon de la unica habitacion con algo de luz, se fue acercando a ella con suma lentitud, su Alfa estaba controlado, no queria asustar al menor y bajo el efecto que Horacio tenia en el, Volkov tomaba fuerzas para controlar sus instintos

La puerta estaba entreabierta, dejando ver poco y nada del menor, tenia su cuerpo sudado y estaba solo en ropa interior, masajeando su ereccion por encima de su prenda, gimiendo de impresion cuando percibió un fuerte olor a Vodka de golpe

Abrio la puerta, dejando que el menor lo viera y no entrara en panico — V-Volkov... — lo llamo, se acomodo sobre las almohadas que lo rodeaban mientras su mano bajaba su ropa interior, estaba cegado y su omega se retorcía por sentir a su alfa junto a el

Poco a poco sentia sus formales pantalones apretar, se acerco a Horacio, y el como un animal hambriento se tiro a sus brazos, besando con desesperación a aquel hombre que ocupaba un lugar en su corazon pero con el que aun no tenia una relacion — Horacio... — Hablo sobre sus labios, de esa manera era dificil mantener su auto control, separándose de su boca — Estas en celo, no voy a hacer esto asi

— Joder... S-Si estoy muy conciente, bebé

— No — Dejo salir su aroma para calmarlo, era lo unico que haria por el, no era lo que Horacio queria, pero era lo que podia ofrecerle

Se acomodo en la misma posicion que estaba Horacio antes, sentado sobre su cama y apoyado en grandes almohadas, dejaria su olor impregnado en ellas, mejor para el omega, Horacio se recosto entre sus piernas, desnudo, sudando y con su alfa ahí solo le hacia ponerse mas erecto — P-Por favor Volkov... — Le desesperaba estar acostado entre sus piernas sin llegar a tener relaciones sexuales, eso era lo que el queria, lo que su cuerpo le reclamaba que hiciera con su alfa, pero no habia caso, Volkov se negaba por el hecho de que segun el se estaria aprovechando — Si no me v-vas a follar es... Es mejor q-que te vayas — Su olor le lograba tranquilizar, al igual que el mismo alcohol era embriagante, sin embargo; No era suficiente

Y Volkov tampoco lo queria someter a una tortura, sus manos bajaron por el pecho del menor, llegando hasta su entrepierna Se le hacia fascinante el como con su simple tacto Horacio gemía por mas, Tomando aquel miembro goteante, la punta rojiza y las venas marcadas en todo su largo, comenzo un vaivén sin ser del todo lento, deleitándose con los gemidos de Horacio en su oido

La habitacion olia exageradamente a primavera con Alcohol, a las rosas mas frescas que podian regalar, y el vodka mas puro y de calidad, Su alfa le pedia a gritos dejarlo libre y hacer suyo a ese omega, pero siempre el autocontrol de Volkov era mas fuerte, dando únicamente unos cuantos besos en la frente de este, realmente todo seria mas sencillo si lo marcase, el tacto de Volkov le quemaba pero eso era lo que tanto le gustaba

Su mano bajo de su miembro hasta su entrada, sintiendo los fluidos naturales empapar aquel aro carnoso, queria que fuese suyo, definitivamente lo queria, su propio miembro necesitaba atencion

Si eso era lo unico que iba a calmar a su alfa y al omega de Horacio, entonces lo iba a cumplir, introdujo dos de sus dedos a aquella entrada tan estrecha, moviendolos como todo un experto

Muy pronto alcanzo la prostata del menor, dandose cuenta por los altos gemidos que daba cuando rozaba esa zona, sus piernas temblaban y su miembro goteaba, y el queria mas, Tomo de la nuca a Volkov, obligándole a mirarle mientras este gemia y se retorcía bajo su ardiente tacto

Ataco sus labios con desespero, como ultimo recurso para convencer al mayor de que lo follara, de que lo tomara de las caderas y lo penetrara con fuerza, por que eso queria y lo tenia que conseguir, dio un pequeño brinco, rozando con el duro miembro de Volkov, sobre sus labios gimió por esto

Pero fue suficiente, los dedos salieron de su interior y los besos pararon, su aroma lo estaba cautivando cada vez mas. Aun algo dudoso se saco la camisa, dejando su trabajado abdomen al descubierto, chocando con la espalda del menor, haciendolo sonreir al saber ya lo que iba a pasar

Fue todo excesivamente rapido, saco su miembro de sus prendas inferiores, bajandolas un poco para estar mas comodo, detras de Horacio, sus rostros se volvieron a acercar, atacando los labios del contrario en un beso adictivo, ya para este momento era un dulce beso de amor, se acomodaron, dandole la espalda aun a Volkov, alineo el miembro de Volkov con su lubricada entrada, y lentamente se dejo caer, gimiendo por el tamaño de su alfa

Las manos de Volkov sobre la cadera de Horacio, apretando con fuerza mientras el menor saltaba sobre el, su miembro estaba atrapado en una exquisita sensacion cada vez que entraba y salia del calido interior de Horacio

Sus ojos se volvieron oscuros, para sus oidos solo existian los gemidos de su Omega, sus ojos fijos en su cuello, justo en la zona donde deberia morderlo para hacerlo suyo, su omega, su chico
Lamio la zona, haciendo sobresaltar al de cresta, quien seguia saltando con ganas de calmar su celo — V-Vik? — pregunto

cuando sintio los colmillos clavarse en su cuello, no dejo sacar el aire de sus pulmones, sentia la mezcla de saliva y sangre correr por su cuello— Eres mio ahora, Solntse — Volvio a atacar sus labios en un beso salvaje, bajando su mano hasta su miembro, masturbando al compás de los saltos, los gemidos de Horacio resonaban en la habitación, lagrimas de placer y felicidad salian de los ojos de Horacio

No les quedaba nada para llegar al orgasmo, el choque entre sus pieles les hacia temblar, cada vez mas rapido, mas fuerte, exclamaciones en sus idiomas natales, Una cancion Rusa y Francesa, el menor exploto, ensuciando con su escencia la mano de su Alfa y su propio abdomen, apretando su interior por las fuertes sensaciones de su orgasmo

Un gemido alto al‍erto al de cresta, Volkov llegaría al orgasmo y no tenian proteccion — C-Cachorro, ¡Volkov! — Exclamo mientras sentia el miembro del contrario ensancharse en su interior, su entrada dolia por el nudo que los mantendria unidos por unos minutos, maldito mecanismo involuntario de alfas

Fue un gran orgasmo y un gran final, el simple hecho de que Volkov fuera a pasar el celo con el le hacia feliz, pero eso no quitaba el hecho de que habian altas probabilidades de un embarazo, apoyo su cabeza en el Hombro desnudo del peligris, sus manos recorrían su cuerpo desnudo, su expresion transmitía calma y cero arrepentimiento, quizas para el no fue... Tan malo

Su mano se detuvo en su vientre, pensativo de lo que se podia formar despues de ese dia, cuando finalmente el nudo se solto, Viktor ayudo al omega a acostarse de una forma comoda, despues de darle un beso en la frente, abandono la habitacion, fue a la cocina a reflexionar sobre sus actos y el dejar a su alfa liberarse en el interior del omega

— дерьмо...

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Privatters ! VolkacioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora