Entre el amor y el odio

Cap# 7: Falla Sans.

      Después de todo las cosas habían salido realmente bien, a pesar de todas las cosas malas que hizo, las mentiras que dijo y el daño que causó; Para todos seguía siendo Heart Pink Sans, el principe del subsuelo, para Payrus seguía siendo su hermanito pequeño y para Gaster seguía siendo su hijo. A pesar de que él verdadero Heart Pink estaba muerto, nadíe dudó de que todo había sido solo un desafortunado accidente. Nada había sido a proposito, la armonía que se sentía hacía que los días fueran mas alegres.

Ambas humanas, Chara y Frisk, se hallaban ayudando a Pink, revisando las flores, enredaderas y arbustos de la amada sala de juicio del esqueleto. Bueno, Chara lo hacía con gusto por su mejor amigo, Frisk, digamos que había sido obligada por Toriel a ayudar a Pink para que ambos empezaran a llevarse mejor.

-No me lo puedo creer, siendo un principe ¿No puedes buscarte un jardinero? -preguntó la humana de ojos cerrados, mientras tomaba unas tijeras y cortaba las hojas secas de un arbusto-. Solo digo.

-Vamos Frisk, es bueno ayudar de vez en cuando -Levantó la bolsa que había en su lado y la cerró-. Ademas este lugar es muy lindo como para permitir que se llene de hierbas.

-Lo que tú digas, Chara -siguío cortando las hojas, tomandolas y tirandolas a un balde- Sostenme esto un momento -le habló a Monster Kid, un pequeño monstruo sin brazos que seguía a Frisk a todos lados. El monstruito se acercó y la humana colocó las tijeras sobre la cabeza de este para que las sostuviera-. Solo hago esto porque mamá me obligó, porque de otra forma no me verias serca de él -señaló a Pink que se encontraba a su espalda.

-Bueno bueno chicas, es obvio que todos necestitamos un descanzo y calmar las tenciones -Pink se levantó de su lugar y dejó las herramientas que usaba aun lado-. Voy a buscar unas bebidas para todos. Y así podemos continuar después.

-Bien -la humana de ojos rojos se levantó estirando sus brazos y piernas-. Ya sabes lo que me gusta beber, Pink.

-Lo mismo que a mi -contestó el esqueleto entre risas.

-¡¡Chocolate!! -gritaron los dos al unisono, haciendo que la otra humana se cubriera sus oidos.

-Dios, juro que si fueran mas ruidosos me cortaría las orejas -movío la cabeza, intentando quitarse la malesa que le había caido en el cabello.

Pink y Chara rieron ante el comentario de la otra humana, ella podía ser muy cruel la mayor parte del tiempo pero al fin y al cabo era una chica que solo buscaba encajar al igual que todos los otros humanos que habían convertido el subsuelo en su hogar. El esqueleto se separó de su amiga y caminó por la sala de juicio para entrar al castillo. Re pentinamente, sin saber porque, algo lo hizo detenerse y mirar hacía atras.

Las humanas y el pequeño monstruo habían notado eso, y miraron hacía el lugar que el esqueleto estaba mirando. Unos pasos resonaban en la inmensa sala, acercandose cada vez mas y poco a poco comenzaba a notarse una figura acercandose a ellos. Cuando estuvo lo suficientemente serca, la luz que se filtraba por las ventanas rebeló de quién se trataba.

-eh.... ¿Quién... -Chara volteo hacía Pink, tratando de averiguar si él sabía quien era.

Frente a ellos se encontraba parado otro esqueleto, con un gran parecido a Heart Pink. Este llevaba puesta una capa color morado, sus ojos eran de diferentes colores, el derecho blanco y el izquierdo morado, sus guantes y botas eran moradas también, pero los de el lado derecho tenian rayas moradas y los de el izquierdo blancas. Ademas una brillante corona magenta flotaba sobre su cabeza, tenia un pequeño agujero en su mejilla derecha y su cuerpo estaba lleno de gliches.