Cap #3: UnderHeart. Un nuevo comienzo.

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Cap #3: UnderHeart. Un nuevo comienzo.

Heart Pink como se llamaba ahora, se acostumbró muy rapido a tener una familia. Siempre habia visto a los otros sans, con sus Papyrus, sus amigos, con sus AUs. Eso es algo que el no poseía al haber nacido en el vacío del multiverso y ahora por fin tenia su propio universo. Se llamaba UnderHeart, un AU pacifista donde el amor y la amistad son el principal enfoque. Lleno de tantos monstruos amables, que con gusto lo resivieron como uno de ellos. Pink fue "mimado" por decirlo asi por su padre, Gaster, quien era el rey del subsuelo. Algo raro dado el hecho de que en otros Au's el rey, naturalmente era Asgore, pero aquí las tematicas de los personajes eran diferentes. Su hermano Papyrus siempre demostró una actitud muy desafiante y mala pero podia ser un caramelo cuando queria. Sobre todo con el pequeño Pink, al cual protegía de todo y todos. Allí podía ser el mismo, sin dudar, ni seguir ordenes, sin el estres de ser perseguido, incluso había obtenido sufieciente magía para crecer en tamaño, como lo haría alguien normal al pasar de los años. Los humanos y los mounstruos siempre habían vivido en paz, pero como en todas las historias, hay momentos oscuros. Años atras un pequeño grupo de humanos rencorosos, envidiosos de ls mágia que los monstruos poseían y a la vez en pánico de que se alzarán en su contra, atacaron.  Desterraron a los monstruos al subsuelo y levantaron una barrera magica, separando a las dos razas de forma indefinida.

Los mounstruos pacificos que no lucharon en lo absoluto simplemente aceptaron su destino, Pink, tenía el poder de sobra para destruir esa barrera en pedasos. Poseía un rasgo unico, dos almas, llenas de magia y sin duda tenia el poder para hacerlo. Oh, al menos para cruzarla y conseguir la forma de destruirla desde afuera. Pero decidío guardar silencío y seguir fingiendo que era un esqueletito pequeño y debíl.

Al pasar los años, Heart Pink ya habia dejado su pasado atras. Tenia una familia, un AU que lo necesitaba, no quería nada mas. Aunque Cupid seguia siendo parte de su ser, UnderHeart era su nuevo hogar y ahora era otra persona. Ademas con el amor que extraía de los habitantes de allí le bastaba para mantener sus poderes, incluso incrementarlos. En una simple caminata por Snowdin, Pink encontró un extraño portal que se glicheaba y movía de forma rara, eso le extrañó, no había seres ademas de los Sans guardianes que pudieran abrir portales. Intrigado entró en aquél lugar encontrandose con otro Snowdin, se adentró en ese bosque buscando a alguién. Allí conocío a alguién que por raro que suene se convirtío en su mejor amigo en muy poco tiempo.

Ese era Rude Sans. El Au en el que había entrado, se trataba de RudeTale, un Au que nacío de una falla en el codigó de Underfell, dañando su linea temporal causando que se duplicara, creando un universo aparte, con una historia diferente, pero a la vez, agresivo. Pink se encariñó rapidamente con ese Sans engreido y grosero, aunque fueran diferentes, algo dentro de las almas de Pink se removía cada vez que lo veía levantar sus pesas o practicar cualquier deporte. Un día, Pink tomó una rosa Azul de las ruinas de Rudetale y fue a ver a su amigo, sin dudar en lo que haría. Lo encontró en Snowdin. Se detuvó a su lado y lo miró tiernamente.

-Rude -lo llamó suavemente, captando su atención

-¿Ocurre algo, rosita? -Dijo el sans de dientes afilados mientras expulsaba el humo de su cigarrillo, a Pink le encantaba cuando lo llamaba asi "Rosita".

-Escucha Rude, hemos sido muy unidos y yo pensaba si tu y yo... -sacó la rosa de entre su ropa y la mostró- talvez... podriamos... ¿Intentar ser algo mas?....

Todo quedó en silencio, Pink y Rude se quedaron con sus miradas fijas, sin decir una sola palabara. Hasta que el Sans agresivo le arrebató la rosa al pequeño de la mano y sin cuidado alguno la tiro al suelo, pisandola fuertemente con el talon de su zapato. Pink al ver eso, quedó sin palabras, Rude se acercó hasta él y lo tomó por su lazo, levantandolo del suelo.

Entre el amor y el odioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora