Capítulo XVIII

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La conversación fue interrumpida por dos golpes a la puerta. Al abrirla se podía ver a Dumbledore y a otro hombre con traje elegante.

Ron: El jefe de papá, Cornelius Fudge, el ministro de magia -dijo en un susurro bajo la capa.

Fudge: El asunto se puso muy malo, tres ataques a hijos muggles. El ministerio tiene que intervenir.

Hagrid: Pero... yo jamás... usted lo sabe profesor.

Dumbledore: Yo confío totalmente en Hagrid.

La puerta se volvió a abrir, el mismo hombre que Peter conoció en el callejón Diagon, el padre de Darcey.

Hagrid: ¡¿Qué hace usted aquí?! ¡Salga de mi casa!

Lucius: Tampoco me hace gracia estar aquí. A lo que vine fue a esto-dijo mostrando un pergamino- podrás ver las doce firmas.

Dumbledore: Siempre podré ayudar en Hogwarts a todos los que lo necesiten –dijo para dar una mirada al lugar donde estaba el grupo.

Lucius: Bonitas palabras ¿Nos vamos? –dijo para retirarse seguido por Dumbledore.

Fudge: Vamos Hagrid.

Hagrid: Eh... si... ¿Si alguien estaba buscando información? Lo que puede hacer es seguir a las arañas. Ellas lo guiaran. ¡Ahh! Y deben alimentar a Fang mientras yo no estoy.

Una vez que los adultos se fueron los Gryffindor salieron de la capa.

Ron: Es malo, sin Dumbledore habrá un ataque diario.

...

Mayo ya casi acababa y la última víctima era Hermione. El grupo quería verla, pero las visitas estaban prohibidas.

Varios de los alumnos de Slytherin estaban felices por que Dumbledore no era director. Los alumnos que más resaltaban eran Nott, Crabbe y Goyle que iban por los pasillos burlándose de los magos mestizos y muggle-borns.

Otra cosa que sucedió es que los demás estudiantes dejaron de sospechar de Hadley debido a que Hermione era una de sus mejores amigas. Incluso varios estudiantes se disculparnos con ella.

En la clase de defensa.

Lockhart: Quiten esas caras. El culpable ya fue atrapado y llevado a Azkaban.

Dean: ¿A qué se refiere?

Lockhart: El ministro vino y se llevó a Hagrid.

Ron: Ya creo que se lo llevaría -dijo llamando la atención de Dean.

Lockhart: Me atrevo a decir que yo sé más sobre el tema Sr. Weasley. El fue capturado por sus crímenes.

Peter: No fue Hagrid -dijo el castaño golpeando la mesa- él fue quien me trajo al mundo mágico, no es un mal sujeto y es un gran amigo.

Lockhart: Debes estar confundido así que dejaré pasar este arrebato.

Gwen: Es suficiente Pete.

Varios alumnos que habían conocido a Hagrid y estaban de acuerdo con Peter sobre todo tres compañeros leones.

Gwen: Tarantallegra –dijo en un susurro apuntando con su varita a Lockhart.

Hadley: ¿Para qué sirve ese hechizo?

Gwen: Lo hará bailar por un buen rato.

Ron: Se lo merece.

Los chicos habían acordado en ir al bosque prohibido luego de ver a un grupo de arañas.

Una araña mágicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora