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Drew.

El amanecer de un día igual a los demás, uno sin nada de especial y otra mañana despertando solo.

Ya estaba harto de ello.

Mientras más analizo mi vida más insatisfecho me siento, se supone que debería ser feliz, estoy con la mujer que amo y está esperando un hijo mío ¿Qué puede estar mal?

Oh claro, el hecho que desde que se enteró de su embarazo mi esposa no me habla ni se me acerca, los días se hacen tediosos y aburridos en esta maldita oficina que aborrezco con el corazón, esto no era un escenario, no era mi vocación pero todo lo hice para que Trisha y yo estuviéramos juntos.

Es triste pensar que desde nuestra boda las cosas no han sido como esperaba. Mi abuelo estaba tan feliz de que me uniera a la heredera de una familia tan prestigiosa como los Clareston, tanto que me dió su bendición

Lo cual era milagroso ya que desde me volví coordinador me habia dado completamente la espalda. En cambio ese día restauré el nombre de los Hayden como su único nieto varón.

Y ahora...

Soy un idiota que dirige una estúpida empresa de tecnología. El presidente de la recíen re nombrada HDN Inc. Debería estar contento.

Debería.

—¿Señor me está escuchando?

No, la verdad no.

—¿Podrías repetírmelo?

—Señor Hayden tiene que poner atención, es importante ya que este individuo llevará sus finanzas personales no las de la empresa.

Todo fue idea de mamá, ella realmente no ha confiado en mí desde que me casé, no confía en Trisha, de hecho no le agrada, por eso mismo he tratado de mantenerla contenta para evitar disgustos.

—Lo sé, lo sé, continúa mejor.—Yates asintió.

—Pues no llegaron muchos candidatos,  entre ellos
estaba un antiguo contador de empresa conocida, no obstante siento que es demasiado viejo para esto, también estaba un criador pokémon, pero es su único atributo, había uno que tenía un poco de ambos atributos pero tiembla más que una hoja, también llegó un insufrible chiquillo, muy creído diciendo que más nos valía ir llenando los cheques de muchos ceros porque no iba a aceptar menos. Lo corrí en el acto.

La descripción de los candidatos sólo me hizo enojar, aunque siempre he sido del tipo no quiero saber nombres hasta que pase el filtro, realmente estaba muy decepcionado ¿Qué no habia nadie decente?

—Y también llegó una muchacha, simpática, agradable, para mí fue la más impresionó.

Eso me preocupó, Yates solía suavizarse con las mujeres porque le recordaban a su hija, además una chica haciendo este trabajo no era la mejor idea, no por la falta de capacidad sino por que Trisha se da ideas que no debería.

—Yates ya hablamos de eso.

—Sí, sí ya sé lo que va a decir, pero creo que esta chica podría hacer un gran trabajo, es buena en el área y además cumple perfecto con el segundo requisito.

Eso último me hizo sentir como una completa basura, pensé en mis pokémon y como debían estar odiándome, después de todo los abandoné.

Si tan sólo hubiera sabido que a Trisha le causaban alergia los pokémon.

Tuve que dejarlos en mi viejo apartamento donde mis primas los cuidaban con regularidad, pero estaban próximas a hacer un viaje importante y necesitaba alguien que viera por ellos, que realmente conectara y que no los hiciera odiar a los humanos. .

Someone Like You [Contestshipping]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora