BreakFast «JIKOOK» ︴ Adap.

•˚• ¡Capítulo Díez!

──¡Ah, mierda! ¡Está caliente! ──hornear, aparentemente, nunca será el fuerte de JiMin, no, ninguna actividad culinaria era su fuerte; ese era término correcto. Pero el desafío de hacer un esfuerzo por la persona que le gusta le da mucha adrenalina para el día de San Valentín de este año.

Entonces, para eso, se apresuró al supermercado justo después de que terminó con sus tareas, ahora, con lista en mano mientras deambulaba por el lugar a lo que cantaba en silencio y buscaba las cosas que necesitaría.

Tiene dudas de que pueda hacer unos cupcakes adecuados temiendo que pudiera quemar su propia casa en el proceso, sin embargo, el pelinegro se aseguró de comprar ingredientes extras por si algo pasaba.

Con un profundo respiro, se ató el delantal morado de su madre, y levantó dos puños en el aire mientras asentía con la cabeza para darse ánimos.

"¡Fighting!" Exclamó hacia ninguna parte, dando un vistazo a todo el equipo antes de pasar a su celular lleno de tutoriales que vio.

Primero intento, falló, segundo, tercero...

──¡Joder!

──¿Necesitas algo de ayuda, JiMin? ──le cuestionó su madre desde el sillón, veía como su hijo iba de un lado a otro, ella tenía un extintor a su lado por precaución.

──¡No, está bien, mamá! ¡Yo puedo solo. Gracias!

El alfa se pregunta, ¿Cuántas veces maldijo por esa noche? ¿Por qué hornear es tan difícil? Solo quiere crear algo para mañana, solo quiere darle un lindo detalle con ese adorable omega que siempre lo ayudaba todos los días.

Por lo tanto, incluso por décima vez de intentarlo, JiMin nunca pensó en dejarlo todo y simplemente dormir acurrucado con su almohada debajo de la cálida manta. Aunque por ahora, podría considerar esa opción, está un poco cansado si es honesto.
Pero afortunadamente después de tantos intentos, ¡Cuatro cupcakes finalmente tienen éxito!

──¡Finalmente! ¡Oh Dios mío! ──el pelinegro grita de manera cómica, los iris brillando en alegría por el resultado de su esfuerzo.

Sonrió ampliamente en lo que visualizaba el día de mañana.

Lunes por la mañana y ya estaba sentado en la banca del patio de la escuela, quizá por la emoción llegó mucho antes de lo que normalmente acostumbra a llegar.

Una palmada con mínima fuerza aterrizó sobre su nuca, no hacia falta ser adivino para saber de quien se trataba.

──¿Por qué tan temprano hoy, JiMin? ¿Qué es esa caja? ¿Y JungKook? ──atacó TaeHyung con preguntas, sentándose seguido de Namjoon.

──Hoy amanecimos preguntones.

──Ahg, como sea. ¿Nos dirás de una vez o qué?

──Bien... es para Ju-JungKook. ──sus comisuras se levantaron al recordar el beso del día de ayer.

Lo primero que hizo cuando llegó a su casa fue ir a su habitación lanzandose a su cama y gritar sobre su almohada con euforia.

──Por tu cara de tonto enamorado presiento que hay algo que no nos haz contado.──esta vez preguntó el alfa mayor.

──De hecho, a-ayer nos besamos.

──¡Ihhh, son novios! Me siento como toda una fangirl cuando su shipp es confirmado. ── TaeHyung aplaudió.

──Shhh, baja la voz TaeTae. Además, no somos novios, al menos no aún. ──susurró.

El pelirosa miró por detrás del pelinegro viendo a JungKook caminando a pasos cortitos hacia su dirección.

──Bueno, ahí viene tu casi-novio, Romeo.

JiMin se giró, sus miradas se cruzaron y que de inmediato apartaron por lo que había pasado entre ellos.

──Buenos días chicos. ──al llegar, saludó a la pareja. Para finalizar con JiMin──B-bueno días para ti Minie... y feliz San Valentín.──con timidez notable, extendió hacia él una caja decorada con un lindo moño rosa.

Mordió su labio inferior mientras miraba a otro lugar menos a la cara se su amigo, sus mejillas rellenitas era lo más parecido a unas manzanas de lo rojas que se encontraban.

¿Cómo podía ser tan tierno sin siquiera intentarlo?
JiMin la tomó entre sus manos y agradeció bajito, ello le dio la suficiente valentía para ponerse de pie y tomar la caja de cupcakes.

──Kookie, necesito que me mires. ──el susodicho negó con un "Nuh uh" apenas audible──Sino me miras no te daré mas abracitos──Y como si fuera lo peor que le pudieran decir, le miró con su boquita abierta con indignación.

──Feliz San Valentín para ti también, bebé. ──fue su turno para mostrar su sorpresa──Sabes que no soy el mejor en la cocina, pero me esforcé mucho para darte esto...

──Minie-

──Lo sé, lo sé, no es nada comparado a todo lo que haz hecho por mi, pero quiero que sepas que te quiero muchísimo y...

──JiMinie...

──Ah, estoy haciendo el ridículo, ¿Verdad? C-creo que debí comprarte otra co...──sus palabras fueron interrumpidas por el casto beso que JungKook le dio en sus labios para callarlo.

──Ya entendí, tontito. ──agarró el obsequió y sonrió con su característica sonrisa──Es perfecto, hyung. Gracias.

El alfa pelinegro no puso resistir, cogió y dejó la caja en la banca para abrazar con mucha fuerza al menor, este, soltó un chillido por ser tomado desprevenido. Y sus piecitos dejaron de tocar el suelo, la vista era innegablemente adorable para cualquiera.

──Rayos, esto está mejor que mi telenovela── comentó TaeHyung.

Rieron al oir a su amigo, se separaron no sin antes frotar sus naricitas. Iba a ser el mejor San Valentín sin duda.