Capítulo 10: El equilibrio entre lo trémulo

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Advertencias y comentarios: 

1_ Contenido sexual explícito.

2_ Créditos al autor de la magnífica imagen utilizada.

Pd: El próximo capítulo será otro especial desde el punto de vista de Obito; a partir de ahí empezará el desenlace de la historia, y su inevitable fin. Desde ya muchas gracias por todo el apoyo; sin más que agregar, disfruten la lectura.

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Obito estaba sentado en el piso de su sala de estar, tenía una pequeña pluma entre las manos, la cual movía de un lado a otro haciendo que el gato corriese alocadamente tras ésta para atraparla. La sonrisa que Kakashi observaba a lo lejos era por demás adorable, le llenaba de alegría ver esa escena. Tenía muchas ganas de acercarse, pero a la vez quería quedarse ahí, a lo lejos, observando al moreno como siempre. Hacía un tiempo que desistió de las excusas para esa práctica reiterada, ahora se limitada a disfrutar de la sensación inmensa de felicidad que le inundaba.

Decidiendo que ya había esperado mucho se acercó hasta la casa, golpeó la puerta que tan bien conocía sin poder dejar de admirar los detalles en la misma, siempre era igual, aunque en ese momento se sentía nervioso por buenas razones; le inundaba una sensación de regocijo y expectativa poco común en él. Sería la primera vez que vería a Obito desde que habían confesado lo que sentían, más bien habían aceptado que se gustaban.

Él le gustaba a Obito. Ese simple hecho le había hecho estar en las nubes durante toda su misión.

Obito abrió la puerta y al verlo sonrió ampliamente, era un sonrisa tan genuina que Kakashi sintió que le faltaba el aire, notó enseguida que había estado conteniendo la respiración, cuando lo recibió con esa alegría todas sus preocupaciones anteriores se esfumaron y dejó ir el aire acumulado para sonreír en respuesta.

_ Hola_ Obito se veía tan bien, mucho mejor de lo que había estado en mucho tiempo, aún estaba más delgado de lo usual, pero su piel y aura naturalmente cálida habían regresado. Kakashi sentía ganas de abalanzarse sobre él, era un impulso tan potente que apretó las manos en puño dentro de sus bolsillo.

_Hola_ se mordió la lengua antes de decir algo empalagoso como "te extrañé demasiado"

Obito se hizo a un lado y lo dejó pasar.

_ ¿Qué sucede? Te ves tan tenso... _ Obito se acercó por detrás y depositó una cálida mano sobre su espalda mientras lo miraba de manera inquisitiva. Kakashi cerró los ojos conteniéndose de hacer cualquiera de las cosas que estaba pensando. No quería asustarlo.

_ Solo un poco cansado_ no era del todo mentira, pero fue la excusa perfecta para voltearse y como un cachorro herido se lanzó hacia los brazos del moreno, apoyando su cabeza en el hombro ajeno, lo que le permitió aspirar su aroma como si fuera la primera vez que respiraba en días, lo tomó de la cintura acercándolo más mientras tomaba bocanadas codiciosas de ese aroma que tanto le gustaba, le tranquilizaba como nada. Obito se quedó quieto por unos segundos, luego me devolvió el abrazo dirigiendo una mano a acariciarle de manera suave su cabeza.

_ Debió ser una misión muy difícil..._ dijo Obito en voz muy baja, Kakashi se limitó a asentir, estaba muy concentrado en bajarse la máscara para recorrer el cuello ajeno con su nariz, sin poder evitar depositar un pequeño beso en el lunar que ahí había. Sintió como las manos de Obito se cerraron en su chaleco, acercándolo aún más, saber que su cercanía no lo molestaba hizo que se animara a más.

_ Obito... _ susurró cerca de su oreja _ ¿puedo besarte?

_ ¡Dios! Juro que te golpearé si no lo haces_ escuchar eso le hizo sonreír antes de dirigirse a los labios que tanto había deseado desde cuando entró a la casa. Obito lo recibió gustoso, llevando sus manos a su cuello para atraerlo más.

Pasos insegurosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora