"tres"

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 ────CAPÍTULO TRES:

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────CAPÍTULO TRES:

LEO

     (omnisciente)

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     (omnisciente)

Leo había encontrado un dragón en el bosque.

Bueno, o una especie de dragón solo que era de bronce y no tenía alas.
Leo lo había salvado de una trampa y se había dispuesto a ayudarlo y arreglar aquellos circuitos dañados. Entre tanto, él había acabado lleno de barro, grasa y aceite pero Festo, como había decidido llamarlo, lucía con mejor aspecto de antes, incluso el dragón le insinuó a Leo subirse sobre su lomo antes de internarse en el bosque.

Al parecer, Festo lo había guiado hasta la entrada de un búnker secreto.

—Festo —murmuró Leo—, ¿dónde estamos?

El dragón se dirigió al centro de la estancia dando fuertes pisotones y dejando huellas en el polvo espeso, y se acurrucó en una gran plataforma circular.

La cueva era del tamaño de un hangar para aviones, con innumerables mesas de trabajo y jaulas de almacenamiento, hileras de puertas del tamaño de las de un garaje a lo largo de cada pared y escaleras que subían a una red de pasarelas situadas en lo alto. Había herramientas por todas partes: elevadores hidráulicos, sopletes para soldar, monos aislantes, palas neumáticas, carretillas elevadoras, además de algo que se parecía sospechosamente a una cámara de reacción nuclear. Había tableros de anuncios cubiertos de planos gastados y desvaídos. Y armas, armaduras, escudos..., pertrechos de guerra por todas partes, muchos solo parcialmente acabados.
Colgada de unas cadenas muy por encima de la plataforma del dragón, había una vieja pancarta tan desvaída que casi no se podía leer. Las letras estaban en griego, pero de algún modo Leo sabía lo que decían: BÚNKER 9.

¿Se refería al nueve de la cabaña de Hefesto o a que había otros nueve? Leo miró a Festo, que seguía acurrucado en la plataforma, y le dio la impresión de que el dragón parecía tan contento porque estaba en casa. Probablemente había sido creado en aquella plataforma.

𝐓𝐎 𝐅𝐎𝐑𝐄𝐕𝐄𝐑 ☇ 𝐡𝐨𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora