Le gente rota somos como un pedazo de vidrio, estamos rotos y lastimamos a aquel que nos agarra. No lo hacemos aproposito, solo que no sabemos cuidar, ni cuidarnos a nosotros ni al otro.
Algunos somos egoístas, pero no es tanto nuestra culpa, nos enseñaron a qué si les das de comer a otro vos te quedas con hambre, no tenemos una medida del amor, a veces no confiamos en los demás porque ya vinieron miles que nos lastimaron, tenemos una daga escondida para sacarla al primer movimiento brusco. Tratamos de cuidarnos de más dañadores.
Corremos del acercamiento porque la última persona que se acercó nos dejó sangrando, sabemos lo que pasa si somos vulnerables. Somos independientes porque sabemos que hasta nuestro propio padre o madre nos puede dejar en menos de lo que nos tuvo. y duele, duele saber que no te quieren, duele estar siempre a la defensiva porque el escudo pesa y nadie nos enseña nunca a como usar la espada correctamente.
Uno no sabe cuánto duele ser un dañado hasta que lo dañan, no venimos fallados de fabrica pero parece que nos fabricaron para fallar, ¿por qué creer que la vida puede ser buena si no tenemos una buena vida?, si no vemos cielos azules, si siempre nos tiran piedras, si siempre buscamos aunque sea cobre pero terminamos encontrando carbón.
A nosotros nosotros mismos nos obligamos a no pensar ni a concentrarnos en ilusiones o sueños hasta que no los podamos tocar, nos autosaboteamos antes de que la vida nos haga chocar. Tenemos un chip que ya sabe que va a pasar, no porque veamos el futuro, si no porque siempre pasa lo mismo, siempre nos pasa lo mismo, a nosotros, los que no podemos arreglarnos con nada, porque es así, estamos rotos.
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Diario de una adolescente solitaria
Teen FictionAdolescente solitaria escritora de una historia que la apuñaló tantas veces que puede contarla de memoria. -Dedicado a mí misma y a las veces que me escondí o me convertí en un reflejo de los demás para no volver a ser abandonada.