Capitulo 16 ~ Chocolate suizo

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"Ha llegado a su destino"

Dice el GPS, lo único que veo de lejos es una carretera casi vacía rodeada arboles

- Es un interesante lugar

Digo mirando a mi alrededor

- Es el lugar donde puede acelerar hasta 250km/h

Lo miro con los ojos muy abiertos

- ¿Es broma?

- No, además no hay muchos autos por aquí así que inténtelo

Yo sonrío internamente, muevo la palanca quitando el modo estacionamiento y empiezo a acelerar, poco a poco la velocidad aumenta al igual que los latidos de mi corazón, miro brevemente el tablero, 150km/h y aumentando, la carretera es larga, vacía y perfecta. Puedo sentir la velocidad en cada palpito de mi cuerpo, mis manos se aferran al volante y mi pie al acelerador, mantengo la velocidad máxima permitida por un par de minutos, empiezo a disminuir cuando veo a los lejos un par de autos que vienen y van, no puedo adelantar

- Increíble

Digo cuando la velocidad disminuye a 80km/h, la misma que el auto de enfrente. Siento olas de adrenalina en mi cuerpo

- Si le soy sincero no esperaba que llegara a esa velocidad

- Yo tampoco, es reconfortante, siento que liberé todo tipo de hormonas

- Así es, una buena manera de liberar estrés

La sonrisa no se quita de mi rostro, siento una energía nueva recorrer mi cuerpo, hace mucho tiempo no me sentía así

- Definitivamente

Doy vuelta a la rotonda para regresar a la ciudad, en mi cabeza se siembra una gran duda que como las demás no puedo callar

- Señor Hunt

Llamó su atención sin quitar la vista del frente, él miraba algo en su celular

- ¿Si?

- ¿Por qué yo?

- ¿Que quiere decir?

- Si ¿Por qué yo? Digo, soy solo su niñera, una trabajadora más en su complicada vida ¿Por qué estoy aquí? Manejando su auto con usted junto a mi

Puedo ver de reojo como deja el celular y me mira, le regreso la mirada brevemente

- Usted no es una trabajadora más señorita Greene, usted se encarga de mis hijos, lo más importante que tengo en el mundo

- Luz roja, respuesta inválida. Le dije que trabajé como niñera mucho tiempo, me encargué de muchos niños y ninguno de sus padres o tutores me invitó a salir en su auto o algo por estilo

Él suspira

- Por alguna razón usted siempre gana, es imparable

Me río por eso último

- No lo soy. Solo soy una persona que no se deja intimidar por alguien como usted, antes lo hacia pero ya no tengo nada que perder así que digo y hago lo que quiero cuando quiero y como quiero pero ese no es el caso, respóndame en serio

Se queda en silencio unos segundos.

- Ha vivido en mi casa las últimas semanas y lo maximo que sabía de usted es que su segundo nombre es Marie, es doctora, viene de Australia, y nunca se queda callada... Hoy solo me di cuenta que es más que eso y que es imperdonable que viva con usted y no me haya dado cuenta de que extrae su leche y la manda por correo, que sufre un duelo como todos nosotros, que todo este tiempo sus ojos han sido tan verdes como un par de esmeraldas, que es observadora y es buena analizando las emociones de los demás, que es sencilla, no se complica, que hace realmente felices a mis hijos... Solo quería seguirla conociendo al igual que las personas que me rodean de las cuales solo sé su nombre y bueno, la traje aquí, a conducir como nunca lo ha hecho porque a mi me ayuda cuando me siento perdido en el mundo. Esa es mi verdadera respuesta

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