Capitulo 43 - Miedo a quererte

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- ¡Elle!

Thomas me llama desde el pasillo, yo guardo el sobre ya abierto en el cajón de mi tocador, no podría resistir el tener un sobre con el género del bebé y no saberlo, ahora lo sé

- Aquí cariño

Suelto mi cabello cuando él entra, trae el monitor en su mano

- Mira, la he hecho dormir, por fin 

Me muestra el monitor con la imagen de Katie durmiendo tranquilamente en su cuna, a pesar de no dormir la siesta ha sido difícil dormirla, Thomas lo ha hecho  

- Muy bien

Él deja el monitor en la mesa de noche, yo voy hacia el vestidor y me empiezo a desvestir para ponerme la pijama

- Estamos solos ¿sabes? Podemos dormir sin pijama... O no dormir

Dice abrazándome por detrás, obliga a que me detenga, me he quedado en ropa interior, yo me volteo hasta tener su rostro frente al mío

- Ahora solo vamos a dormir, lo necesitas - Le doy un beso, él pone sus manos en mi trasero desnudo y me pega hacia él - No no no, a dormir, es en serio

Digo separándome, joder, merezco un premio por autocontrol

- Bien pero al menos sin la pijama ¿si? Subimos la calefacción, nos ponemos bajo la cobija juntitos

No puedo decirle que no, me sacude el corazón

- Está bien

Él sonríe y sale del pequeño lugar, yo dejo mi sostén a un lado y salgo de allí también, no puedo evitar sentir algo de frío, tomo una pequeña manta y la pongo sobre mi, agarro el monitor y camino hacia la habitación de Thomas, él está moviendo a un lado los cojines sobre la cama, trae puesto solo un bóxer azul oscuro

- Ya he subido la temperatura y la cama está lista

Dejo el monitor sobre la mesa de noche y la manta a un lado para acostarme en su cama, no es más grande que la mía y su habitación es realmente sencilla, tan solo tiene algunas fotos de los niños en las paredes y el televisor por supuesto

Él apaga la luz haciendo que lo único que nos ilumine sea una pequeña lámpara en su mesa de noche, se acuesta junto a mi, pone la gran cobija encima nuestro, me quedo boca arriba, él pasa su brazo sobre mi abdomen y apoya su cabeza junto a la mía, tan solo tengo que voltear para verlo

- ¿No te sientes cansado?

- Si pero con acostarme me basta

Me volteo hacia él y pongo mi mano en su mejilla, nos quedamos en silencio unos minutos solo mirándonos, ya no existe el frío ni nadie más que nosotros y esta sensación tan alucinante y arrolladora suele ser quien llama mis inseguridades

- Tengo miedo de quererte tanto Thomas - Digo en un susurro - Lo qué más quiero se desase ante mi

- No puedo decir que sé lo que sientes porque a pesar de mis pérdidas, no puedo decir que he quedado solo como tú lo haz dicho. Pero si puedo decir que lo que siento por ti es verdadero y que cada minuto qué paso junto a ti es para mi la prueba de que si, puedo ser mejor y debo serlo

- Para mi eres perfecto

- Pero mereces más, y te lo demostraré

- Eso es hermoso de tu parte, pero prometimos ser honestos y aunque no quiera creer que es así, no puedo evitar pensarlo 

- ¿Qué cosa?

- ¿Qué tal que todo esto que decimos y sentimos no sea tan mágico como parece? ¿Qué tal que sigamos tan heridos que cuando ya no lo estemos tanto solo nos demos cuenta que esto no es real? ¿Qué solo nos hagamos daño uno al otro intentando encontrar algo que no existe?

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