IV

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Jisung seguía impactado por ver a Minho, se quedó unos minutos parado en la entrada del edificio antes de que el timbre sonara y tuviese que dirigirse a su aula, en la que rogaba estuviese "Min" como solía llamarle en su vida pasada, para su mala suerte no podían haber tantas coincidencias, y tan pronto sus clases comenzaron cayó en cuenta que no eran compañeros. Su día transcurrió normal, al menos para él, dando lo mejor de sí, contestando cada una de las preguntas que los profesores hacían, en el proceso dejó boquiabiertos a la mayoría, quizás no era el peor alumno pero tampoco era un genio, se ganó muchas miradas de confusión y otras tantas de desagrado, y es que se le había olvidado que despertó en el cuerpo del Jisung del futuro, y que antes de que eso sucediera, él tenía una vida y probablemente personalidad completamente distintas.

Habían muchas personas murmurando a sus espaldas, y tenía el presentimiento de que no era solo por su inteligencia, ya que entre las tenues voces alcanzaba a escuchar "él es el chico que..." "no tenía una familia un tanto..." "pero él le hizo daño..." No soportaba los ambientes así y menos no obtener respuestas, así que agradeció demasiado cuando llegó la hora del almuerzo, salió al patio donde había un camino de solo árboles de cerezo esperando a la primavera para tintar completamente de rosa el paisaje, era una vista agradable, el aire fresco le pegaba justo en el rostro mientras desacomodaba sus cabellos, el cielo era azul brillante sin signos de una próxima tormenta, quizás solo quizás su corazón deseó que su tiempo ahí nunca acabara.

Jisung decidió vagar por aquel enorme patio, después de los cerezos había mesas, canchas para deportes, espacios destinados a cada club, un gran estacionamiento por supuesto, entre otras cosas lujosas, decidió caminar hacia el ultimo lugar que no había visitado, lo cual era extraño considerando que estaba cerca de los árboles de cerezos, realmente no había prestado atención al enorme jardín que yacía bajo los intensos rayos del sol pero que incluso así daba sombra entre los arbustos.

Caminó adentrándose en el verde, viendo las flores y oliendo una distinta cada que aparecían en su campo de visión, ese lugar transmitía paz y tranquilidad, había una perfecta armonía, sin darse cuenta llegó al centro de ese mini bosque, había una pila de agua justo como la que tenía Félix en su hogar, se acercó para poder observarse en el reflejo, pero tan pronto lo hizo pegó un grito echándose para atrás y cayendo de sentón en el césped.

—AHHHHHH— Cerró sus ojos por el impacto y sobó su parte trasera.

—Oh lo lamento, enserio una disculpa, no pensé que te asustarías, yo te ví aquí y... Hannie?

Jisung abrió sus ojos de golpe, sintió su rostro arder e irónicamente sus sentidos se paralizaron, pero no su corazón que latía frenéticamente, apenas pudo formular unas torpes palabras.

—Lee Minho, ¿eres tu? Esto, es... irreal.— Sus ojos brillaban con euforia y podía jurar que pronto se convertirían en un mar de lágrimas.

—¿Tanto me odias que ni siquiera recuerdas como me veo?— Dijo sarcásticamente mientras le extendía su mano para ayudarlo.

—¿Odiarte? Jamás podría hacer algo así, yo.— te amo, no podía decir eso, claro que no— Amm...— Correspondió a la ayuda levantándose.

—No quiero tener esta conversación nuevamente, ¿seguro te encuentras bien?— Notando el nerviosismo del castaño.

—Y-Yo es solo que... tu y yo, no sé solo... ¡perdí la memoria!— Genial Jisung te llevas el premio al más idiota.

—¿Qué? Oh no, esperaba todo menos eso, dices que no recuerdas nada, ¿absolutamente nada?—Lamentablemente cayó incrédulo ante la mentira del menor.

—Nop, absolutamente nada, me pasó hace unos 6 días más o menos.— No le quedó más que continuar con su farsa.

Minho tomó de la muñeca al castaño y comenzó a tirar de él en dirección al "camino rosa".

En nuestras próximas vidas(Minsung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora