Fly Me To The Moon

La bruja 2

Sally: ¡¿Qué?! - se levantó del sofá por la sorpresa

Amy: Creí que se iban haciendo más inteligentes con el pasar del tiempo supongo que me equivoqué - comentó sarcásticamente

Sally: ¡Oye! - reclamó

Amy: Lo explicaré para que puedas entenderme; si me das tu alma significa que no irás al cielo ni al infierno; si me das la mitad de tu vida, significa que me llevaré la mitad de los años de vida que te quedan

Sally: Pero sin mi alma...

Amy: Piénsalo bien, porque no hay devoluciones - negoció

Sally: Yo no puedo renunciar a mi alma ni a mí vida... - susurró

Amy: Lo comprendo, el amor no es para todas; dímelo a mí, si no fuera por eso yo no me habría convertido en ésto - se señalaba así misma

Sally: ¡Claro que lo amo! Es sólo que es un precio muy alto... - dijo con remordimiento

Amy: Sí lo comprendo, en fin sí eso era todo lo que querías, supongo que tienes que retirarte - se levantó del sillón en dirección a la puerta

Sally: ¿Así de simple? - preguntó notoriamente confundida

Amy: Sí ¿Acaso creíste que te detendría? - bromeó, pero el silencio sólo le dio la razon  - Vaya que eres grosera, ya vete de una vez - soltó arta de la insolencia de la ardilla

Sally: Pero no puedo irme sin que me des un hechizo o algo así - reclamó

Amy: Si no estás dispuesta a pagar el precio no me interesa seguir hablando contigo - se encogió de hombres

Sally: ¡Pero soy la princesa y te ordeno que hagas un hechizo para mí! - reclamó ya como último recurso

Amy: Aparentemente no eres muy inteligente y te explicaré de forma sencilla... - aquella tierna voz se convirtió en una voz más fría y seca

Aquel ambiente acogedor de la casa por un instante se volvió un ambiente tétrico, la ardilla sintió como un viento frío golpeaba su espalda pero no quiso darse la vuelta

Amy: Si yo te ofrezco un producto o servicio debes remunerarme yo no hago caridad - dijo con un importante voz y cerró los ojos - Segundo y más importante, tú no eres nadie aquí; este bosque es mi reino y tú estás en él - abrió los ojos y centro su mirada penetrante e íntimamente en la ardilla

Sally se congeló del miedo pues los coloridos ojos Jade de Amy se convirtieron en unos carmesí como la sangre

Amy: ¿Entendido? - artículo con una voz de ultratumba

Sally: No puedes dejarme así - comentó en voz baja pues ahora sentía miedo

Amy volvió a cerrar los ojos y respiró profundamente para calmarse, volvió a abrir sus ojos y éstos volvieron a ser verde Jade; el ambiente de la casa había vuelto a ser acogedor

Amy: Sí puedo y lo haré - empujó a la ardilla a la salida

Sally: ¿No hay nada que puedas hacer sin esperar algo a cambio? - replicó aferrándose al marco de la puerta

Amy: Puedo ver tu futuro - respondió resignada 

Sally: Prometo que después de que lo hagas me iré

Amy: Ya que... de todos modos ya estás aquí, siéntate en la silla por favor - dejó de empujar a la ardilla

Sally: Siempre creí que eso de las cartas era una mentira, siendo sincera pensé que verías mi futuro en una bola de cristal