El lamento del rey 2

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¿Qué pasaría si lo perdieras?

La boda del monarca fue colosal, todo su reino celebró sus nupcias pues creían que aquella mujer ayudaría a Shadow a mejorar como Rey. El día de su boda, Amy se veía notablemente nerviosa pues toda su vida había sido una simple plebeya

Amy: Respira... respira... respira... pronto serás una reina y una reina no puede perder la elegancia por los nervios - decía en voz baja mientras salía de la iglesia

No obstante, sintió como algo cálido se entrelazaba con su mano, giró su cabeza y vio que era Shadow quien había tomado su mano, el moreno sonrió levemente al ver el nerviosismo de su ahora esposa

Shadow: Te ves preciosa

Amy: Me lo dijiste unas 15 veces el día de hoy - dijo con una leve sonrisa

Shadow: Siento que 16 es poco cuando se trata de ti - respondió acariciando su rostro

Amy: ¿Crees que sea una buena reina? - preguntó con dudas

Shadow: ¿Y eso que importa? Lo importante es que estés a mi lado

Amy: Claro que importa, tenemos que esforzarnos para hacer de este reino un lugar mejor - respondió firme

Shadow: Supongo que no puedo decirte que no

¿Qué sabría ella de ser una reina? No obstante la presencia de Shadow la calmaba, pues sabía que el siempre estaría a su lado y ambos se ayudarían mutuamente a cambiar para bien

Su romance era cautivador, y Shadow, que en rara ocasión había mostrado interés por nadie que no fuera él mismo, le consagró su vida a Amy. La pareja era inseparable: el rey casi nunca iba a alguna parte sin Amy, no dejaba de prodigar regalos a su reina y la atención que le procuraba rara vez cesaba.

Amy: Mira esta tela es muy fina - decía entusiasmada - ¡Oh! ¿Eso es seda? - corrió hacia el otro lado de la tienda

Shadow: Toma todo lo que desees - dijo con una sonrisa al ver el gozo de su amada

Infinite: Señor ya es tarde, necesito una respuesta suya para tener en paz a los aldeanos pues amenazan con dejar de proporcionarnos alimentos - reprochó

Shadow: Que lo intenten y yo mismo me encargaré de quemar sus casas - amenazó

Infinite: Aún si lo hace, sólo ellos saben producir en la tierra - argumentó

Shadow: No lo sé arréglalo por tu cuenta, ahora estoy ocupado

Infinite: Pero señor

Shadow: Te di la orden de que lo arregles y debes-

Aquel regaño fue interrumpido cuando Shadow se dio cuenta que había perdido de vista a Amy, la busco con la mirada pues no le gustaba que ella estuviera lejos de él. Mientras camina por el lugar en busca de la rosada pudo escuchar su aguda voz en un pasillo lejano

Amy: Lo siento - decía apenada

X: ¡Fíjate por donde caminas mocosa malcriada! - gritó

Amy: Perdón...

X: Arruinaste 2 metros de tela con tu torpeza y vas a pagar por ello

Amy: Lo haré...

X: Eres muy bonita, podrías pagarme de otra forma

Cuando este acercó su mano a la rosada fue rápidamente detenido por otra mano. Ambos elevaron la vista y vieron al erizo azabache quien estaba detrás de Amy con una mirada intimidante, no obstante, aquella mujer  se sintió protegida al ver a su amado

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