La hija del hielo 2

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Ambos corrieron lo más rápido que pudieron; no obstante, el pico de una parte de la montaña detuvo su paso

Infinite: Estamos rodeados, deberíamos rendirnos - sugirió al verse rodeados por los guerreros

Amy: ¡Claro que no! - negó

Aquellos bárbaros rodeadon a Infinite y Amy obligándolos a pegarse a la pared de piedra que impedía su paso

Infinite: Amy estamos desarmados lo mejor será que

Scourge: Miren nada más a quien tenemos aquí, a la matriarca de la tribu del sur - dijo con sorna - Ciertamente eres más hermosa de lo que dicen; ¿Sabes? Planeaba respetar el trato cederte a ese idiota, pero creo que te haré mía - relamio sus labios sin quitar la mirada del cuerpo de Amy

Infinite: ¡No te atrevas a toc-

Scourge: ¡Silencio insolente!

Amy: No, creo que ¡No! - golpeó aquella pared de piedra tras ella

Scourge: Qué adorable ¿Creíste que podrías romper aquella pared de piedra con esas manitos tuyas? Voy a disfrutar tanto arrebatarte esa inocencia

Amy: Hijole yo creo que eso no se va a poder - apunto con su mano hacia arriba

Cuando los bárbaros dirigieron su mirada hacia arriba, una avalancha  de nieve arrazó con el grupo, Amy e Infinite se mantuvieron a salvo al haberse pegado a la pared

Amy: ¡Lo hice! ¡Nosotros... ¡AH! - gritó de dolor al sentir como una flecha atravesó su hombro

Se dio la vuelta y no logró ver a nadie, horrizada dirigió dirigió vista hacia la derecha de su cuerpo y vio como la punta de la flecha había atravesado su hombro, al punto de que podía ver la punta de la flecha

Infinite: Debieron sobrevivir o tener refuerzos - comentó mientras se paraba de nieve -  ¡Vete! - gritó

Amy: Pero-

Infinite: ¡Qué te vayas he dicho! ¡Yo los distraeré lo suficiente para que puedas huir ¡Corre!

Con lágrimas en sus ojos, la pequeña eriza corrió entre la nieve sosteniendo su brazo derecho. La pequeña y débil eriza continúo su camino, resistiéndose así misma, por ser una mal líder, por ser una mala matriarca, por ser una horrible mujer

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Amy se había puesto un trozo de tela a su boca, reunió todo el valor y coraje que pudo y arrancó la flecha de su cuerpo, soltando varias lágrimas en el proceso; nuevamente respiró profundo y tomó una antorcha recién apagada, presionandola contra su herida para cauterizar la misma y evitar un hemorragia, luchando cada segundo para no desmayar del dolor

Al estar sola, tardó más de lo esperado en llegar a la punta de aquella montaña, ya sin fuerzas corrió hacia el altar que se encontraba al centro de la montaña para encontrar el arma sagrada

Amy: ¡Al fin!

Al llegar al altar retiró la nieve del altar y se llevó una amarga sorpresa

Amy: ¿Pero dónde está? - dijo con incredulidad - "El arma de todo guerrero es la fe que le tiene a su pueblo y a sus dioses" - leyó con incredulidad la escritura que estaba grabada en el pedestal - ¡¿Es en serio?! - gritó indignada

Nuevamente un flecha atravesó su cuerpo, está vez su piernas izquierda, la pobre mujer cayó cerca al altar retorciéndose de dolor

Amy: ¡AH!

Infinite: ¿En serio sigues creyendo que ese cuento de niños es real?

Amy: Pero tú...

Infinite: Tenías que arruinarlo todo, pudimos escapar juntos, pero tú amor por la aldea es más grande que el amor que me tienes ¡¿Verdad?! - alzó la voz molesto

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