Roommates → '🧺٫ 𝗄𝗈𝗈𝗄𝗆𝗂𝗇 !

3. Masaje

Después de la deliciosa cena preparada por su Hyung, Jungkook se sentía de maravilla.

Había tomado una ducha y su cuerpo se sentía ahora menos tenso, aunque su espalda le estaba causando una ligera molestia a debido de sus doloridos músculos.

Al volver a la sala de estar, vio a Jimin sentado en el sofá mientras hacía zapping, sin necesariamente querer encontrar alguna película con la cual entretenerse.

—¿Te sientes mejor? — le preguntó el mayor apenas se sentó a su lado.

—Si, estoy bien — murmuró Jungkook —, sólo estoy algo cansado.

Jungkook, al voltear a ver a Jimin, pudo notar que éste parecía algo nervioso, por alguna desconocida razón.

—S-si quieres puedo d-darte un masaje — hizo una pausa para tomar aire —. Te haría bien.

Y Jungkook también se puso algo nervioso.

—¿N-no te molesta? — Jungkook se palmeó el rostro mentalmente, ¿por qué se sentía tan nervioso? — No tienes que forzarte a nada Jimin, no estoy tan adolorido.

—N-no, para nada — su Hyung le regaló una sonrisa sincera, haciendo que Jungkook se sintiera cálido por dentro —. Vamos a tu cuarto, en tu cama estarás más cómodo.

Ya en la habitación de Jungkook, éste se dejó caer de espaldas sobre su cama. Debía admitir que si, su espalda lo estaba matando, le estaba doliendo bastante.

—Date la vuelta — dijo su Hyung, apoyado contra la puerta —. Tengo un aceite para masajes, ya regreso. Deberías quitarte la camisa — dijo Jimin mientras se dirigía a su habitación, en busca del aceite.

Jungkook empezó a sentirse aún más nervioso.

«Es solo un masaje, ¿por qué te pones así?», se preguntó.

Se quitó su camisa de dormir, dejándola a un lado sobre la cama y se dió la vuelta, recostándose sobre su estómago, enterrando el rostro entre sus brazos cruzados sobre la cama.

Jimin regresó a los pocos segundos con una pequeña botella de aceite para masajes.

Al ver a Jungkook acostado boca abajo, dejando su tonificada espalda al descubierto, Jimin sintió cómo algo en su interior se removía.

Intentó concentrarse nuevamente, mientras se sentaba sobre la espalda baja del menor, dejando sus piernas a cada lado del fuerte cuerpo debajo de él. Abrió la botella y vertió una cantidad generosa de aceite en sus manos, para luego dirigirlas lentamente sobre la piel de su menor, temblando de anticipación por alguna razón que desconocía.
Empezó a recorrer la espalda de Jungkook, las palmas de sus manos presionando sobre la suave piel. Empezó a amasar lentamente los tensos músculos de su espalda, intentando disolver sus nudos.
Jimin no pudo evitar pensar en lo lisa que era la piel del boxeador, extremadamente suave bajo su tacto. Algunos lunares adornaban el largo de su espalda. Algunas cicatrices también se hallaban sobre la suave piel, resultado de las múltiples peleas de boxeo en las que había participado el menor desde una temprana edad.

Empezó a amasar con sus pulgares una pequeña cicatriz en forma de luna que se hallaba en la parte baja de su espalda, provocando que Jungkook soltara suaves suspiros.

Y aunque Jungkook nunca lo admitiría en voz alta, amaba la sensación de las suaves manos de Jimin recorriendo su piel, sus largos y delgados dedos amasando todos sus músculos, disolviendo poco a poco sus nudos.

Y el aceite mezclado con aquellas maravillosas manos le provocaban miles de sensaciones placenteras, mientras sus tensos músculos se relajaban.

Y aunque aún no esté consciente de ello, Jungkook tal vez sentía algo más que un simple cariño por Park Jimin, su tierno compañero de piso.