Capítulo 2: Pequeña siesta

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Akihiko despertó luego de un buen rato de estar dormido, una sensación de calor lo abrumó y se dió cuenta de que tenía una linda mantita azul con patrones de osos encima.

¿Quién me puso esto?, Pensó Akihiko

Pero su pensamiento se borró en cuánto vió como una taza de café era puesta enfrente de él.

—¿Qué?—

—¡Oh!, ¡Usami-san!—

Akihiko levantó la vista y su rostro quedó sorprendido al ver al hermoso castaño que estaba al lado de él.

—Casta-, no...Misaki, ¿Que me pasó?—dictó Akihiko mientras veía a Misaki.

—Se quedó dormido en la mesa, y decidí ponerle una manta encima, espero no le haya molestado—decía Misaki un tanto avergonzado.

—Oh...ya veo, espera, ¿Cómo sabes mi apellido?—preguntó Akihiko.

—Eh...lamento esto...pero mi hermano no estaba tan seguro de querer dejarle aquí a dormir un poco, así que decidió revisar su billetera...—

¿¡Qué su hermano que!?

—Ah...¿Porqué?—susurró Akihiko mientras miraba a Misaki con una gotita en la frente.

—¡Perdón!, Intenté detenerlo pero mi hermano es muy sobreprotector conmigo...y cuándo le dije que ibas a dormir un rato aquí...empezó a revisar sus cosas cómo loco hasta encontrar su identificación, no se preocupe, mi hermano no es ningún ladrón, pero entiendo si no quiere volver aquí...—

—No importa, confío en tus palabras, no te preocupes, no estoy enojado ni nada por el estilo, sólo me sorprendió...—menciona Akihiko mientras toma un poco del café.

—Muchas gracias Usami-san, y lamento los inconvenientes...—

Mientras Misaki se disculpaba, Akihiko pudo mirar la hora en el reloj de osito que decoraba el lugar, ¡11:40PM!, había dormido durante 6 horas...

—Lo siento, debería irme ya, es muy tarde, lamento las molestias, de seguro tuviste problemas al teneme aquí estorbando...—

—N-no se preocupe Usami-san, realmente no tuve problemas, estuve aquí todo el tiempo, para asegurarme de que iba a seguir dormido, se veía muy cansado así que quería dejarlo dormir...—dice Misaki completamente avergonzado.

Fue ahí donde Akihiko literalmente explotó, su corazón latía a mil por hora, ¡Misaki estuvo al lado de él mientras dormía!, Akihiko no podía creerlo, estaba bastante feliz al imaginarse la escena del castaño enfrente de él mientas dormía.

—Emmm, ¿Usami-san?—

Akihiko rompió su pequeña burbuja de emoción en la que se encontraba al escuchar la voz del castaño llamándole.

—Oh, cierto, debería irme ya, muchas gracias por cuidarme Misaki, lamento las molestias causadas, y dile a tu hermano que no me importa que haya revisado mi billetera—

Akihiko se levantó con su bolso y justo cuándo iba hacia la puerta, una mano en su brazo lo detuvo.

—¿Misaki?—exclamó el peliplata mientas veía como el castaño lo agarraba del brazo.

—U-usami-san, no puede irse...—

—¿Eh?—

Akihiko estaba que se moría por dentro, ¡Misaki estaba tratando de detenerlo!, ¿Pero porqué?

El chico de la cafetería [Junjou Romántica]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora